Internacional
Denuncian falta de alimentos y medicinas por conflicto en Birmania
Observadores de derechos humanos llaman al gobierno birmano y a las fuerzas kachin a garantizar que los desplazados reciban víveres, refugio y atención médica
NAIPYIDÓ, BIRMANIA (20/DIC/2011).- Human Rights Watch solicitó hoy más ayuda ante la falta de alimentos y medicinas en los campos de desplazados causados por el conflicto entre la guerrilla de la minoría étnica kachin y el Ejército en el norte de Birmania (Myanmar).
"Los desplazados kachin necesitan alimentos, medicinas, mantas y combustible. Los campos tienen limitaciones para cubrir las necesidades sanitarias y nutricionales de los niños y las mujeres embarazadas", afirmó en un comunicado la ONG, que citó fuentes locales.
Las autoridades birmanas autorizaron a comienzos de diciembre la entrada en la región de un convoy de la ONU con ayuda humanitaria, pero HRW asegura que las provisiones son insuficientes para los 50 mil kachin desplazados desde que comenzaron las hostilidades el pasado junio.
"El Gobierno y las fuerzas kachin deberían garantizar que las decenas de miles de desplazados en campos remotos reciben los alimentos y el refugio que necesitan", afirmó Elaine Pearson, subdirectora de HRW en Asia.
Aunque el Ejecutivo birmano decretó el pasado 10 de diciembre un alto el fuego unilateral y aseguró que los soldados sólo dispararían para defenderse, la ONG afirmó que los combates se producen casi a diario, según testigos locales.
Desde el pasado junio, los soldados birmanos han cometido ejecuciones extrajudiciales, ataques contra civiles, violaciones, trabajos forzados y saqueado aldeas kachin, denunció la organización defensora de los derechos humanos.
HRW también acusó al Ejército y la guerrilla de utilizar niños soldado y minas antipersona, lo consideró una grave violación de las leyes internacionales.
Los kachin, una de entre la casi veintena de etnias birmanas, establecieron un acuerdo de paz en 1994 tras años luchando por la autonomía de la región en la que habitan, pero este se rompió el pasado año a raíz de que la guerrilla se negó a integrarse en una fuerza paramilitar de fronteras al mando del Ejército birmano.
La guerrilla del Ejército Independiente Kachin (KIA) tiene entre 7,500 y ocho mil combatientes y controla áreas del extremo norte del país.
"Los desplazados kachin necesitan alimentos, medicinas, mantas y combustible. Los campos tienen limitaciones para cubrir las necesidades sanitarias y nutricionales de los niños y las mujeres embarazadas", afirmó en un comunicado la ONG, que citó fuentes locales.
Las autoridades birmanas autorizaron a comienzos de diciembre la entrada en la región de un convoy de la ONU con ayuda humanitaria, pero HRW asegura que las provisiones son insuficientes para los 50 mil kachin desplazados desde que comenzaron las hostilidades el pasado junio.
"El Gobierno y las fuerzas kachin deberían garantizar que las decenas de miles de desplazados en campos remotos reciben los alimentos y el refugio que necesitan", afirmó Elaine Pearson, subdirectora de HRW en Asia.
Aunque el Ejecutivo birmano decretó el pasado 10 de diciembre un alto el fuego unilateral y aseguró que los soldados sólo dispararían para defenderse, la ONG afirmó que los combates se producen casi a diario, según testigos locales.
Desde el pasado junio, los soldados birmanos han cometido ejecuciones extrajudiciales, ataques contra civiles, violaciones, trabajos forzados y saqueado aldeas kachin, denunció la organización defensora de los derechos humanos.
HRW también acusó al Ejército y la guerrilla de utilizar niños soldado y minas antipersona, lo consideró una grave violación de las leyes internacionales.
Los kachin, una de entre la casi veintena de etnias birmanas, establecieron un acuerdo de paz en 1994 tras años luchando por la autonomía de la región en la que habitan, pero este se rompió el pasado año a raíz de que la guerrilla se negó a integrarse en una fuerza paramilitar de fronteras al mando del Ejército birmano.
La guerrilla del Ejército Independiente Kachin (KIA) tiene entre 7,500 y ocho mil combatientes y controla áreas del extremo norte del país.
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