Internacional
Corea del Norte pide escudos humanos para su nuevo líder
Corea del Norte sufre desabastecimiento crónico de comida
SEÚL, COREA DEL SUR (01/DIC/2012).- Corea del Norte pidió a su pueblo que marche tras su nuevo líder, Kim Jong-un, y lo proteja haciendo de "escudo humano" para resolver el "urgente asunto" de la escasez de alimentos manteniendo las políticas de su fallecido padre, Kim Jong-il.
Los tres grandes diarios estatales del país indicaron en una editorial que suele publicarse en Año Nuevo que Kim Jong-un tiene legitimidad para proseguir con la batalla revolucionaria iniciada por su abuelo, Kim Il-sung, y desarrollada por su padre, el gobernante de puño de hierro que murió hace dos semanas.
"Kim Jong-un, el líder supremo de nuestro partido y nuestro pueblo, es la bandera de victoria y gloria de la Corea Songun (el Ejército Primero) y el centro eterno de su unidad", afirmó el editorial de cinco mil palabras, difundida por la agencia de noticias estatal KCNA.
Asegurando que el inexperto Kim, que está al final de la veintena, es "precisamente" idéntico a su padre, el editorial señaló que "todo el partido, todo el Ejército y todo el pueblo debe poseer una firme convicción de que se convertirán en baluartes humanos y escudos humanos defendiendo a Kim Jong-un hasta la muerte".
Es llamativo que la editorial se refiera al problema de alimentación de Corea del Norte como un "asunto urgente" por resolver para el Partido de los Trabajadores, para construir un "país floreciente."
Corea del Norte sufre desabastecimiento crónico de comida, y depende en buena parte de la ayuda exterior. Un informe de Naciones Unidas indicó en noviembre que el aislado Estado comunista necesita ayuda alimentaria para casi 3 de sus 24 millones de personas en 2012.
Muchos observadores en Seúl, capital de Corea del Sur, creen que el editorial no apunta a ningún cambio importante en políticas sociales o económicas, pero parece sensible al aspecto de la alimentación.
"Para solidificar y estabilizar su poder, abordar el problema alimentario es uno de los primeros puntos en la agenda con los que Kim Jong- un debería tratar por ahora", dijo Yang Moo-jin, profesor de la Universidad de Estudios Norcoreanos.
La editorial también ataca al Gobierno surcoreano por buscar la confrontación pese a los esfuerzos del Norte por reabrir el diálogo, e insiste en su demanda de que se retiren las tropas estadounidenses del sur.
Pero algo sospechosamente ausente del documento era cualquier mención al programa armamentístico nuclear norcoreano, la principal fuente de preocupaciones sobre seguridad en la región durante la era de Kim Jong-il.
"El Norte parece decidido por el momento a centrar sus políticas en estabilizar temas internos como asuntos económicos, en lugar de avanzar de forma agresiva con aspectos diplomáticos", comentó Yoo Ho-yeol, experto en Corea del Norte en la Universidad de Corea.
La posición norcoreana sobre el proyecto nuclear ocupó un espacio prominente en las editoriales de año nuevo anteriores.
Los medios de Corea del Norte anunciaron el sábado que Kim Jong-un había sido nombrado oficialmente comandante supremo de su Ejército, de 1.2 millones de soldados, dos días antes de que terminara el luto oficial por el líder fallecido.
Los tres grandes diarios estatales del país indicaron en una editorial que suele publicarse en Año Nuevo que Kim Jong-un tiene legitimidad para proseguir con la batalla revolucionaria iniciada por su abuelo, Kim Il-sung, y desarrollada por su padre, el gobernante de puño de hierro que murió hace dos semanas.
"Kim Jong-un, el líder supremo de nuestro partido y nuestro pueblo, es la bandera de victoria y gloria de la Corea Songun (el Ejército Primero) y el centro eterno de su unidad", afirmó el editorial de cinco mil palabras, difundida por la agencia de noticias estatal KCNA.
Asegurando que el inexperto Kim, que está al final de la veintena, es "precisamente" idéntico a su padre, el editorial señaló que "todo el partido, todo el Ejército y todo el pueblo debe poseer una firme convicción de que se convertirán en baluartes humanos y escudos humanos defendiendo a Kim Jong-un hasta la muerte".
Es llamativo que la editorial se refiera al problema de alimentación de Corea del Norte como un "asunto urgente" por resolver para el Partido de los Trabajadores, para construir un "país floreciente."
Corea del Norte sufre desabastecimiento crónico de comida, y depende en buena parte de la ayuda exterior. Un informe de Naciones Unidas indicó en noviembre que el aislado Estado comunista necesita ayuda alimentaria para casi 3 de sus 24 millones de personas en 2012.
Muchos observadores en Seúl, capital de Corea del Sur, creen que el editorial no apunta a ningún cambio importante en políticas sociales o económicas, pero parece sensible al aspecto de la alimentación.
"Para solidificar y estabilizar su poder, abordar el problema alimentario es uno de los primeros puntos en la agenda con los que Kim Jong- un debería tratar por ahora", dijo Yang Moo-jin, profesor de la Universidad de Estudios Norcoreanos.
La editorial también ataca al Gobierno surcoreano por buscar la confrontación pese a los esfuerzos del Norte por reabrir el diálogo, e insiste en su demanda de que se retiren las tropas estadounidenses del sur.
Pero algo sospechosamente ausente del documento era cualquier mención al programa armamentístico nuclear norcoreano, la principal fuente de preocupaciones sobre seguridad en la región durante la era de Kim Jong-il.
"El Norte parece decidido por el momento a centrar sus políticas en estabilizar temas internos como asuntos económicos, en lugar de avanzar de forma agresiva con aspectos diplomáticos", comentó Yoo Ho-yeol, experto en Corea del Norte en la Universidad de Corea.
La posición norcoreana sobre el proyecto nuclear ocupó un espacio prominente en las editoriales de año nuevo anteriores.
Los medios de Corea del Norte anunciaron el sábado que Kim Jong-un había sido nombrado oficialmente comandante supremo de su Ejército, de 1.2 millones de soldados, dos días antes de que terminara el luto oficial por el líder fallecido.
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