Internacional
Comisión de Zelaya deja diálogo por rechazo restitución
El Gobierno de facto, encabezado por Roberto Micheletti, rechaza que el depuesto presidente regrese al cargo
TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los negociadores del depuesto presidente de Honduras
Manuel Zelaya se retiraron el viernes de la mesa del diálogo sobre la prolongada crisis política en el país, ante el rechazo del Gobierno de facto a restituir al derrocado líder.
Las negociaciones para zanjar la peor crisis en Centroamérica en décadas naufragaron después de que los delegados de Zelaya fijaron como un ultimátum la medianoche si el Gobierno del presidente de facto Roberto Micheletti no accedía a un acuerdo para devolver el poder al derrocado mandatario.
"En este momento nosotros damos por agotado, por terminada esta fase", dijo la negociadora Mayra Mejía a periodistas al cumplirse el plazo.
La comisión de Micheletti había rechazado el ultimátum y citó a sus contrapartes a un nuevo encuentro el viernes para continuar en la mesa del diálogo.
Las negociaciones habían sido retomadas hace tres semanas, bajo el auspicio de la Organización de Estados Americanos (OEA), pero observadores y opositores creen que Micheletti había alargado el diálogo ganando tiempo con la vista en los comicios de noviembre, con los que espera cerrar la crisis política.
Las negociaciones para zanjar la peor crisis en Centroamérica en décadas naufragaron después de que los delegados de Zelaya fijaron como un ultimátum la medianoche si el Gobierno del presidente de facto Roberto Micheletti no accedía a un acuerdo para devolver el poder al derrocado mandatario.
"En este momento nosotros damos por agotado, por terminada esta fase", dijo la negociadora Mayra Mejía a periodistas al cumplirse el plazo.
La comisión de Micheletti había rechazado el ultimátum y citó a sus contrapartes a un nuevo encuentro el viernes para continuar en la mesa del diálogo.
Las negociaciones habían sido retomadas hace tres semanas, bajo el auspicio de la Organización de Estados Americanos (OEA), pero observadores y opositores creen que Micheletti había alargado el diálogo ganando tiempo con la vista en los comicios de noviembre, con los que espera cerrar la crisis política.
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