Internacional
Colom pide a funcionarios entregarse
El presidente guatemalteco dijo que su jefe de seguridad y el encargado de la Secretaría de Asuntos Estratégicos deben presentarse a las autoridades voluntariamente
GUATEMALA, GUATEMALA.- El presidente de
Guatemala, Álvaro Colom, consideró hoy que se deben entregar a la justicia los funcionarios de su Gobierno vinculados con el caso de espionaje en su contra descubierto la semana pasada.
Según Colom, tanto Carlos Quintanilla, titular de la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad (SAAS), responsable de la seguridad del presidente y su familia, y Gustavo Solano, encargado de la Secretaría de Asuntos Estratégicos (SAE), deben presentarse a las autoridades voluntariamente.
Contra ellos pesa una orden de búsqueda y captura, tras desconocerse su paradero, después de que el primero presentó su dimisión y destituyó al segundo, cuando todavía no se les vinculaba con la estrategia de espionaje.
"Creo que lo importante es la verdad. Honestamente creo que se deben presentar (a la justicia). Ellos sabrán como", dijo el mandatario a la prensa, a manera de llamado a los prófugos, después de participar hoy en una sesión solemne en el Congreso, con motivo del 187 aniversario de la independencia de Guatemala, que se conmemora el próximo lunes.
"Si no hay nada qué ocultar, no hay por qué ocultarse", insistió el presidente.
El jefe de Estado recordó que su Gobierno descubrió los aparatos de espionaje en la Casa Presidencial y en otras dependencias de su uso privado y denunció la situación y que el Ministerio Público (Fiscalía) está haciendo su trabajo.
Desde el pasado sábado existen órdenes de captura contra los dos ex funcionarios, a los que la Fiscalía sindica, entre otros cargos, de los delitos de espionaje contra el presidente.
Álvaro Colom precisó que, a raíz de este incidente, la SAAS está en reestructuración, al frente ahora de Ricardo Marroquín, y "se va a cerrar un poco la seguridad, pero creemos que no va a ser nada traumático o complicado".
"Se están revisando todos los expedientes, hay personal de SAAS, que es totalmente profesional y que ha tenido todos sus cursos; se está haciendo un análisis uno por uno", agregó el presidente, y aclaró que "no se está haciendo una cacería de brujas".
El gobernante calificó el espionaje descubierto en su contra como "una agresión seria al Estado". "Nuestro esfuerzo está en encontrar a quienes financiaban, compraban y propiciaban este tipo de información y creo que en unos días se estará presentado la ley contra escuchas ilegales", manifestó.
"A mí me preocupa quién pagó, quién financió, quién dirigió todo esto. Ojalá que los mecanismos de investigación del MP, que cuenta con el apoyo de todos los mecanismos de investigación del Estado, encuentren al promotor", subrayó Colom sobre el tema.
El presidente de Guatemala anunció que, durante una reunión que mantuvo hoy que su Gabinete de Seguridad, discutió sobre la integración de una Secretaría de Inteligencia Estratégica para que coordine todo el sistema de seguridad y ayude a "tomar decisiones correctas".
En unas primeras declaraciones sobre el incidente, fuentes cercanas al presidente señalaron que un grupo elite de antiguos guerrilleros, que desde hace mucho tiempo forman parte de su entorno más estrecho, fueron quienes descubrieron los aparatos con los que se le espiaba.
Según Colom, tanto Carlos Quintanilla, titular de la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad (SAAS), responsable de la seguridad del presidente y su familia, y Gustavo Solano, encargado de la Secretaría de Asuntos Estratégicos (SAE), deben presentarse a las autoridades voluntariamente.
Contra ellos pesa una orden de búsqueda y captura, tras desconocerse su paradero, después de que el primero presentó su dimisión y destituyó al segundo, cuando todavía no se les vinculaba con la estrategia de espionaje.
"Creo que lo importante es la verdad. Honestamente creo que se deben presentar (a la justicia). Ellos sabrán como", dijo el mandatario a la prensa, a manera de llamado a los prófugos, después de participar hoy en una sesión solemne en el Congreso, con motivo del 187 aniversario de la independencia de Guatemala, que se conmemora el próximo lunes.
"Si no hay nada qué ocultar, no hay por qué ocultarse", insistió el presidente.
El jefe de Estado recordó que su Gobierno descubrió los aparatos de espionaje en la Casa Presidencial y en otras dependencias de su uso privado y denunció la situación y que el Ministerio Público (Fiscalía) está haciendo su trabajo.
Desde el pasado sábado existen órdenes de captura contra los dos ex funcionarios, a los que la Fiscalía sindica, entre otros cargos, de los delitos de espionaje contra el presidente.
Álvaro Colom precisó que, a raíz de este incidente, la SAAS está en reestructuración, al frente ahora de Ricardo Marroquín, y "se va a cerrar un poco la seguridad, pero creemos que no va a ser nada traumático o complicado".
"Se están revisando todos los expedientes, hay personal de SAAS, que es totalmente profesional y que ha tenido todos sus cursos; se está haciendo un análisis uno por uno", agregó el presidente, y aclaró que "no se está haciendo una cacería de brujas".
El gobernante calificó el espionaje descubierto en su contra como "una agresión seria al Estado". "Nuestro esfuerzo está en encontrar a quienes financiaban, compraban y propiciaban este tipo de información y creo que en unos días se estará presentado la ley contra escuchas ilegales", manifestó.
"A mí me preocupa quién pagó, quién financió, quién dirigió todo esto. Ojalá que los mecanismos de investigación del MP, que cuenta con el apoyo de todos los mecanismos de investigación del Estado, encuentren al promotor", subrayó Colom sobre el tema.
El presidente de Guatemala anunció que, durante una reunión que mantuvo hoy que su Gabinete de Seguridad, discutió sobre la integración de una Secretaría de Inteligencia Estratégica para que coordine todo el sistema de seguridad y ayude a "tomar decisiones correctas".
En unas primeras declaraciones sobre el incidente, fuentes cercanas al presidente señalaron que un grupo elite de antiguos guerrilleros, que desde hace mucho tiempo forman parte de su entorno más estrecho, fueron quienes descubrieron los aparatos con los que se le espiaba.
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