Internacional
Cancilleres del ALBA discuten en Quito sobre Honduras y Colombia
A fin de discutir temas como la situación actual de Honduras y otros más se reunieron hoy los miembros del ALBA en Quito
QUITO, ECUADOR.- Los cancilleres de los países miembros de la Alianza Bolivariana para las Américas (
ALBA) se reunieron hoy en Quito para discutir sobre la situación de la democracia en Honduras y la decisión de
Colombia de ampliar sus acuerdos militares con Estados Unidos.
La cita, que se efectuó de forma paralela y en el mismo hotel donde se realiza la reunión de cancilleres de la Unión de Naciones Sudamericanas ( Unasur), fue presidida por el ministro ecuatoriano de Relaciones Exteriores, Fander Falconí.
Al comenzar la reunión de la ALBA, con la presencia momentánea de la prensa, Falconí explicó que se discutirán tres asuntos principales, uno relacionado con la creación de instituciones propias del grupo, otro sobre las definiciones políticas y, finalmente, la elaboración de un acta de la cita.
Falconí fue claro al señalar que la ALBA no intenta "suplantar" a otros organismos de integración regionales como Unasur, pero afirmó que los de la Alianza son países "que tiene visiones compartidas" sobre asuntos de interés comunes.
Además, dijo que los cancilleres de la ALBA discutirán sobre la crisis hondureña y recordó la firmeza con la que el organismo condenó y actuó contra el golpe de Estado al depuesto presidente Manuel Zelaya.
La ALBA discutirá "una acción mucho más efectiva para lograr eso en que hemos redundado", que es la restauración de la democracia en Honduras, dijo Falconí, tras apostillar que, "para nosotros, el único presidente legítimo (de Honduras) es el presidente Zelaya".
Además, el canciller ecuatoriano hizo referencia a la preocupación que ha despertado en la región la negociación que lleva a cabo el Gobierno colombiano con Estados Unidos, que incluiría la posibilidad del uso compartido, entre militares de los dos países, de siete bases militares colombianas.
La cita, que se efectuó de forma paralela y en el mismo hotel donde se realiza la reunión de cancilleres de la Unión de Naciones Sudamericanas ( Unasur), fue presidida por el ministro ecuatoriano de Relaciones Exteriores, Fander Falconí.
Al comenzar la reunión de la ALBA, con la presencia momentánea de la prensa, Falconí explicó que se discutirán tres asuntos principales, uno relacionado con la creación de instituciones propias del grupo, otro sobre las definiciones políticas y, finalmente, la elaboración de un acta de la cita.
Falconí fue claro al señalar que la ALBA no intenta "suplantar" a otros organismos de integración regionales como Unasur, pero afirmó que los de la Alianza son países "que tiene visiones compartidas" sobre asuntos de interés comunes.
Además, dijo que los cancilleres de la ALBA discutirán sobre la crisis hondureña y recordó la firmeza con la que el organismo condenó y actuó contra el golpe de Estado al depuesto presidente Manuel Zelaya.
La ALBA discutirá "una acción mucho más efectiva para lograr eso en que hemos redundado", que es la restauración de la democracia en Honduras, dijo Falconí, tras apostillar que, "para nosotros, el único presidente legítimo (de Honduras) es el presidente Zelaya".
Además, el canciller ecuatoriano hizo referencia a la preocupación que ha despertado en la región la negociación que lleva a cabo el Gobierno colombiano con Estados Unidos, que incluiría la posibilidad del uso compartido, entre militares de los dos países, de siete bases militares colombianas.
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