Internacional
Califica CNT de miserable y desesperado el mensaje de Gadhafi
Los leales al dictador todavía resisten en su ciudad natal, Sirte, conminados a la rendición en un plazo de una semana
TRÍPOLI, LIBIA (01/SEP/2011).- El ministro del Interior del Consejo Nacional de Transición (CNT) libio, Ahmad Darrat, calificó de "miserable y desesperado" el llamamiento hecho hoy por el líder libio, Muamar al Gadhafi, a sus leales para que mantengan la resistencia.
En declaraciones a los periodistas en Trípoli, Darrat insistió en que el dictador huido está perdido y sin posibilidades ya de victoria.
"Es un discurso desesperado y miserable. La revolución ha salido triunfante y la mayor prueba de ello es la presencia de más de un millón de personas en la plaza Verde (de Trípoli)", aseguró el ministro.
En una grabación de audio difundida a través de un canal de televisión por satélite sirio, Gadhafi instó a sus fuerzas a seguir en la batalla y aseveró que "no nos rendiremos, no somos mujeres, seguiremos luchando".
El líder libio se encuentra en paradero desconocido desde que el pasado 20 de agosto las fuerzas insurrectas, apoyadas por la OTAN, asaltaron Trípoli y se hicieron con el control de la capital.
Los leales al dictador todavía resisten en su ciudad natal, Sirte, a la que las fuerzas rebeldes han dado un plazo de una semana para que se rinda.
En declaraciones a los periodistas en Trípoli, Darrat insistió en que el dictador huido está perdido y sin posibilidades ya de victoria.
"Es un discurso desesperado y miserable. La revolución ha salido triunfante y la mayor prueba de ello es la presencia de más de un millón de personas en la plaza Verde (de Trípoli)", aseguró el ministro.
En una grabación de audio difundida a través de un canal de televisión por satélite sirio, Gadhafi instó a sus fuerzas a seguir en la batalla y aseveró que "no nos rendiremos, no somos mujeres, seguiremos luchando".
El líder libio se encuentra en paradero desconocido desde que el pasado 20 de agosto las fuerzas insurrectas, apoyadas por la OTAN, asaltaron Trípoli y se hicieron con el control de la capital.
Los leales al dictador todavía resisten en su ciudad natal, Sirte, a la que las fuerzas rebeldes han dado un plazo de una semana para que se rinda.
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