Burundi rechaza fuerza de paz de Unión Africana
Si envían las tropas sin aprovación de Burundi, será considerado un ataque
Si la Unión Africana envía tropas sin el consentimiento de Burundi, será considerado un ataque, dijo el portavoz gubernamental Philippe Nzobonariba, y agregó que el país tiene suficientes soldados para mantener la paz.
Burundi ha estado envuelta en un torbellino desde abril, cuando Nkurunziza anunció su candidatura a un tercer período. La violencia escaló tras la reelección del presidente en julio. La reelección fue criticada en Burundi y por la comunidad internacional por violar el límite de dos términos establecido por la constitución. Nkurunziza dice que su primer término no cuenta porque fue elegido por el parlamento, no por votación popular.
Ochenta y siete personas murieron la semana pasada cuando grupos no identificados atacaron tres instalaciones militares. Las fuerzas de seguridad respondieron con una serie de violentas batidas en diversas partes de la capital, Bujumbura, consideradas como centros de oposición. La policía y el ejército están acusados de sacar violentamente de sus casas a más de 150 civiles y balearlas a quemarropa, de acuerdo con grupos de derechos humanos. El gobierno insiste en que sus tropas actuaron profesionalmente.
En respuesta a la violencia, la Unión Africana autorizó el viernes el envío de cinco mil soldados de paz a Burundi.
La Misión Africana de Prevención y Protección será desplegada en Burundi por al menos seis meses y puede ser extendida, dijo el Consejo de Paz y Seguridad de la organización. El mandato de la fuerza incluirá la protección de civiles bajo peligro inminente y ayudar a crear condiciones para un diálogo interno. La decisión fue inusual porque la Unión Africana no buscó una invitación del gobierno para enviar a sus soldados.
En otro esfuerzo de mediación, las facciones en conflicto en Burundi se reunirán el 28 de diciembre en Uganda para abordar las violentas disputas políticas en el país, indicó el ministro ugandés de Defensa.
Catorce grupos, entre ellos el partido gobernante, organizaciones de la sociedad civil y partidos de oposición, asistirían a las conversaciones para poner fin a la violencia política, dijo el ministro Crispus Kiyong, que también es facilitador de las conversaciones de paz mediadas por la Comunidad del África Oriental.
El diálogo sobre la crisis comenzará bajo la mediación del presidente de Uganda, Yoweri Museveni.
La Comunidad del África Oriental nombró mediador a Museveni el 6 de julio, y el presidente viajó a Bujumbura el 14 y 15 de julio para reunirse con varios partidos, pero la situación de seguridad ha seguido empeorando desde entonces.
Al menos 400 personas han muerto en Burundi desde el 26 de abril, cuando el partido gobernante anunció la decisión de Nkurunziza de buscar un tercer término. Casi tres mil 500 han sido arrestadas en la crisis política y 220 mil han escapado del país.