Bélgica reporta primer ejercicio de eutanasia de menor de edad
Es el único país que acepta la muerte asistida en menores si su condición es incurable
BRUSELAS, BÉLGICA (17/SEP/2016).- Una enferma terminal de 17 años se convirtió en la primera menor de edad en ser ayudada a morir en Bélgica, desde que las restricciones de edad para solicitar la eutanasia fueron levantadas en 2014.
Bélgica legalizó la eutanasia en 2002, pero hace dos años adoptó nuevas normas que permiten la muerte asistida por un médico en el caso de menores de edad si su condición es incurable, por lo que es el único país del mundo que lo acepta.
Wim Distelmans, jefe del Comité Federal de Evaluación y Control sobre la Eutanasia de Bélgica, confirmó este sábado que se trata del primer caso en el país de eutanasia en un menor, quien se encontraba "críticamente enfermo" y sufría "dolor físico insoportable".
Los médicos utilizan "sedación paliativa" como parte del proceso, explicó Distelmans, sin proporcionar mayores detalles del caso, según reportó la cadena pública de noticias RTBF de Bélgica.
Para solicitar la muerte asistida de un menor con una enfermedad terminal, los pacientes deben tener la capacidad de tomar decisiones racionales y estar en las etapas finales de su padecimiento, pero los padres tienen que dar su consentimiento.
La legislación belga sobre eutanasia ha recibido atención internacional recientemente debido al caso de la atleta paralímpica Marieke Vervoort, de 37 años, quien tiene una condición incurable y degenerativa.
La atleta belga afirma que todavía considera la eutanasia como futura opción, pero contrario a los informes de medios de comunicación, no terminará su vida inmediatamente después de los actuales Juegos de Río de Janeiro.
"Tengo mis papeles de eutanasia en la mano, pero todavía estoy disfrutando cada pequeño momento", declaró Vervoort, quien recién ganó una medalla de plata en la carrera de 400 metros en sillas de ruedas
Los registros de la Comisión Nacional de Control de la Eutanasia muestran que, entre 2003 y 2013, el número de pacientes que recurrieron a ese procedimiento en Bélgica aumentó casi ocho veces, para un total de ocho mil 752 casos.