Internacional

Ataque de Al Qaeda deja un británico muerto en Yemen

De acuerdo a las primeras investigaciones, el coche habría sido preparado para utilizarlo en un atentado contra un convoy de oficiales de Inteligencia de Yemen

LONDRES, INGLATERRA (20/JUL/2011).- Un ciudadano británico, quien trabajaba para una empresa de transporte marítimo en la ciudad de Adén, sur del Yemen, falleció hoy por la explosión de un coche-bomba, presuntamente de la red terroristas Al Qaeda. 

La explosión se registró esta mañana de la región de Moalla, cerca de un hotel donde tiene la sede de la empresa de transporte marítimo, en momento en que el británico se encontraba cerca del vehículo, que sería utilizado en un ataque contra la inteligencia yemenita.  

De Acuerdo con las primeras investigaciones de lo ocurrido, el coche bomba habría sido preparado por militantes de Al Qaeda para utilizarlo en atentado contra un convoy de oficiales de Inteligencia de Yemen.  

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Reino Unido confirmó en un comunicado la muerte del ciudadano británico en un ataque con explosivos, cuyas causas, destacó no son claras, según un reporte de la cadena británica BBC.  

'Podemos confirmar que ha muerto un nacional británico en Adén", destacó la cancillería británica, sin revelar la identidad de la víctima, ya que primero se debe notificar a sus familiares sobre el fallecimiento.  

Testigos revelaron a la prensa internacional en Adén que la explosión fue estruendosa y destruyó por completo el vehículo, cuyos restos quedaron esparcidos a varios metros.  

La BBC de Londres destacó en su reporte que esta no es la primera vez que ciudadanos británicos han sido blanco de la violencia en Yemen, uno de los países más pobres e inestables en el mundo árabe y donde la presencia de Al Qaeda ha ido en aumento.  

En abril de 2010, el embajador británico en Yemen escapó de ser asesinado, cuando un coche bomba afectó alcanzó a su convoy cuando circulaba por una de las principales de Sanaa, capital yemenita.  

En octubre pasado, una granada propulsada por cohete golpeó un coche de la Embajada de Reino Unido en Sanaa, provocó heridas a tres personas, incluido a un diplomático británico.  
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