A la Casa Blanca hablando español
John McCain y Barack han recurrido al castellano para ganar adeptos
WASHINGTON, EU.- Cuando Barack Obama habló en español, Rosalía López, una joven empresaria de telecomunicaciones en San Juan de Puerto Rico se quedó hipnotizada frente a la televisión. En ese momento, López supo que su voto sería para Obama a pesar de que la mayoría de las encuestas favorecían ampliamente a Hillary Clinton en unas primarias que, al final, se convertirían en epílogo de una histórica contienda.
“Fue muy agradable. Me mostró su genuino interés y respeto por la comunidad latina. Su pronunciación era muy buena, lo cual me demostró que se había tomado el tiempo para aprender algo de español y transmitir correctamente su mensaje. Sólo eso le ganó mi voto y confianza”, aseguró Rosalía en una corta conversación telefónica.
El súbito empeño de Obama, por aprender algo de español y hablar de las urgencias económicas y de las preocupaciones de los puertorriqueños, reveló algo más que su interés por un idioma. Manifestó, sobre todo, su deseo por conquistar a un electorado que la mayoría de los estrategas ya considera clave en el horizonte político de Estados Unidos.
Apenas cuatro meses atrás, durante un encuentro con un grupo de estudiantes latinos en Los Ángeles, Obama había reconocido la importancia de aprender inglés para ganarse el derecho a ser ciudadano, pero sin dejar de reconocer al mismo tiempo la necesidad de entablar un diálogo y un canal de comunicación en español:
“Los inmigrantes tienen que aprender inglés para poder integrarse como ciudadanos. De la misma manera que yo, por supuesto, tengo también que aprender a hablar en español”, les dijo Obama para ofrecer así la imagen de un candidato presidencial de vena incluyente que ha reconocido la importancia de una minoría que este otoño supondrá más de 9 millones de votos.
“Hoy como nunca el camino a la Casa Blanca pasa por los barrios de la comunidad latina en Estados Unidos”, aseguró William Ramos, director del Fondo Educativo de la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos y Nombrados (NALEO por sus siglas en inglés).
Menos aventajado que Obama en el manejo del español, el republicano John McCain se ha visto en la necesidad de utilizar interlocutores como Juan Hernández —un ex miembro de la administración del ex presidente Vicente Fox— para poder trascender la barrera del idioma en busca de esos votos que podrían marcar la diferencia en noviembre próximo y en estados clave como Florida, Colorado, Nuevo México, Nevada y Arizona.