Lugares congenio: Guadalajara y Praga
Preparando una lista de libros para estas vacaciones escogí los Lugares con genio. Los escritores y sus ciudades de Fernando Savater (Sudamericana, 2013) que pensé venía al caso si un día queremos viajar a través de sus escritores, de tal manera que, cuando lo hagamos, sea un turismo más rico emocionalmente hablando.
Ahora, la idea de ese libro la contrasto con lo que preparó María Palomar en el capítulo de Guadalajara d/escrita —parte del curso Guadalajara, la perla de Occidente que estará disponible en febrero, 2014 en www.aulabierta.org—, donde escogió textos de escritores que hablan de esta perla, como Bernardo de Balbuena en el XVI o Altamirano en el XIX cuando propone que es “la hija predilecta del trueno y de la tempestad” o Agustín Yáñez en el XX, cuando recuerda el “trueno de asustar que estremeció la barranca.”
Mucho mejor la idea de María que realmente nos permite conocer y disfrutar más a la ciudad de Guadalajara a través de algunos escritores y no como es la promesa de Savater que nos ofrece más bien detalles biográficos de algunos grandes escritores y uno que otro detalle de las ciudades que habitaron como es la Praga de Kafka o el Buenos Aires de Borges o La Isla Negra, más que Santiago de Chile, con Pablo Neruda; vamos a ver qué dice de Londres aprovechando a Virginia Woolf y de Lisboa con Fernando Pessoa, así como, la Florencia de Dante y la Ciudad de México de Octavio Paz (con curiosidad de saber qué nos dice Savater de este poeta que conocimos en vida) y así, trata de los autores no tanto de las ciudades con anécdotas sabrosas de sus vidas como la de Stevenson en Edimburgo o el viejo Madrid de Cervantes y Lope de Vega que tiene este Soneto inolvidable que empieza así: ir y quedarse, y con quedar partirse… Bueno, no cabe la menor duda que es otra manera de viajar alrededor de nuestro sillón para conocer más que la ciudad, la intimidad a sus escritores.
Por eso les ofrezco este contraste de lo que preparó María Palomar cuando cita a Altamirano y describe Guadalajara: “la vista no puede menos de quedar encantada al ver brotar de la llanura, como una visión mágica, a la bella capital de Jalisco, con sus soberbias y blancas torres y cúpulas, y sus elegantes edificios que brillan entre el fondo verde oscuro de sus dilatados jardines… parece una ciudad oriental que encierra en su seno todas las bellezas que traen a la memoria la imagen de esas ciudades del desierto descritas en las poéticas leyendas de la Biblia.”
Mientras que con Savater leemos detalles de la vida de Kafka y mejor escuchamos a Smentana a propósito del río Moldava y nos asomamos por la ventana de su cuarto antes de acompañarlo para que le lea a Felice Bauer La condena y nos enteremos que fue ese día reconoció su vocación en contra de lo que pensaba su padre; luego nos enteramos que iba al hipódromo donde escribió esto que tiene “múltiples y contradictorias interpretaciones”, como buena obra literaria: “los mejores amigos no han apostado a nuestro caballo porque temen que si pierden, podrían enfadarse con nosotros. Pero como nuestro caballo ha sido el primero y ellos no han ganado nada, cuando pasamos, se dan la vuelta y prefieren mirar a otro lado”, que habla de su genialidad pero no de la ciudad de Praga.