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Vamos al cine
Guadalajara, cine y festival
GUADALAJARA, JALISCO (23/MAR/2011).- El cine a nivel global, no sólo el mexicano, se proyecta como el instrumento inteligente de penetración para el espectador. La alfombra roja del Festival Internacional de Cine en Guadalajara se tiende para recibir producciones reconocidas en otros países y festivales. Ya no es un intento, es toda una realización de prestigio para nuestra ciudad.
Más de dos décadas preceden el esfuerzo de convocatoria en una industria competidora por la calificación más exigente, la del público. Ahora el compromiso es mayor al integrar los avances técnicos de máxima exigencia para obtener y mantener la preferencia, ya no sólo al cine por sí mismo, sino por el tiempo y atención del público cada vez más ocupado con múltiples atractivos de espectáculo, diversión y entretenimiento.
Sin duda los invitados de cada año y la dedicatoria del Festival dan un toque particular. En éste, Werner Herzog, el realizador alemán, calificado como el fundador del nuevo cine alemán es concurrente distinguido, igual que los miembros integrantes del jurado para 15 áreas de producción entre las que destaca el cortometraje, por décadas relativamente olvidada y que ahora resurge con discusión sobre la justicia en México a través de todos los medios de comunicación.
La información que ya no es noticia reciente, aunque cause expectación: Trujillo, quien fuera por décadas director de la Filmoteca de la Universidad Nacional Autónoma de México, debutará como director del Festival Internacional de Cine en Guadalajara.
De esta forma y muchas más, Guadalajara se imprime en la mente de los cinéfilos apuntando hacia octubre de este mismo año, cuando vista sus mejores galas como escenario de los Juegos Panamericanos. Se trata ahora de destacar la presencia y la difusión del cine mexicano e iberoamericano en un foro con repercusión internacional, donde la diversidad se convierte en solidaridad.
Dios nos guarde de la discordia.
Más de dos décadas preceden el esfuerzo de convocatoria en una industria competidora por la calificación más exigente, la del público. Ahora el compromiso es mayor al integrar los avances técnicos de máxima exigencia para obtener y mantener la preferencia, ya no sólo al cine por sí mismo, sino por el tiempo y atención del público cada vez más ocupado con múltiples atractivos de espectáculo, diversión y entretenimiento.
Sin duda los invitados de cada año y la dedicatoria del Festival dan un toque particular. En éste, Werner Herzog, el realizador alemán, calificado como el fundador del nuevo cine alemán es concurrente distinguido, igual que los miembros integrantes del jurado para 15 áreas de producción entre las que destaca el cortometraje, por décadas relativamente olvidada y que ahora resurge con discusión sobre la justicia en México a través de todos los medios de comunicación.
La información que ya no es noticia reciente, aunque cause expectación: Trujillo, quien fuera por décadas director de la Filmoteca de la Universidad Nacional Autónoma de México, debutará como director del Festival Internacional de Cine en Guadalajara.
De esta forma y muchas más, Guadalajara se imprime en la mente de los cinéfilos apuntando hacia octubre de este mismo año, cuando vista sus mejores galas como escenario de los Juegos Panamericanos. Se trata ahora de destacar la presencia y la difusión del cine mexicano e iberoamericano en un foro con repercusión internacional, donde la diversidad se convierte en solidaridad.
Dios nos guarde de la discordia.
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