Entretenimiento
Una década de soñar con música
La publicación celebra su presencia en nuestro país y anuncia planes de expansión y digitalización
GUADALAJARA, JALISCO (02/JUN/2012).- “No somos solamente una revista de música”. Con esas palabras, Alejandro Carranco, editor en jefe de la redacción de Rolling Stone, define a la publicación que llega a una década de vida en México convertida, en efecto, en algo que supera por mucho lo que es una revista de música.
“Hay gente que incluso cree que tenemos algo que ver con el grupo Rolling Stones, ¡y no!”, agrega antes de soltar una carcajada. La publicación, que en Estados Unidos tiene ya 45 años presente y con planes de seguir creciendo, se ha convertido en la última década en uno de los escaparates más importantes de la cultura popular, no solamente a nivel musical, sino también para política, cultura, cine y videojuegos.
Pero sobrevivir una década en el complejo medio editorial mundial, y particularmente en México, no es tarea fácil. Durante este tiempo también ha superado momentos complicados, desde crisis económicas hasta la partida de algunas de sus plumas más prestigiadas.
Sin embargo y por encima de todos los contratiempos, Rolling Stone le ha hecho justicia a su nombre y muestra que ante las dificultades puede ser tan dura como una piedra. “Han sido (10 años) con muchos altibajos, hemos pasado por varios problemas, pero los hemos superado, todo eso nos ha empujado a hacer una mejor revista”, agrega Carranco.
Durante años, Alejandro ha estado del otro lado de la grabadora. Ahora es él quien responde. “Ya me tocaba, ahora sé que se siente (risas)”. De visita en la Feria Internacional de la Música, el editor habla de los retos que enfrenta una publicación que lucha mes con mes por seguir vigente en un mundo en plena transformación son parte de los temas que toca el “cerebro” creativo detrás de la revista.
— Actualmente las opciones de información se han incrementado. “Rolling Stone” compite con otras revistas, páginas de internet y la televisión. ¿Cómo encaran todo eso?
— Aquí lo importante son los contenidos. Lo que en la revista buscamos son materiales exclusivos, tanto en texto como en fotografía. Es un valor que no todas las revistas te pueden ofrecer. Ahora, y es cierto, desgraciadamente hay un periodismo de entretenimiento muy básico donde muchas veces es más fácil bajar dos notas de internet, hacer una fusión medio rara y presentarlo como una noticia original. Nosotros tratamos de ir en una dirección distinta”.
— También las redes sociales se han convertido en una opción para mucha gente.
— Nos queda claro. Están en un auge enorme, pero hay que tener cuidado. ¿Cuántos artistas este año se han muerto y revivido en Twitter (risas). En la revista procuramos manejarlas con mucho cuidado. Además, tenemos también un respaldo enorme por parte de Rolling Stone Estados Unidos, tanto con información como en archivos.
— ¿Cómo es un día “normal” para alguien que se encarga de editar una revista como “Rolling Stone”?
— Es muy divertido, es una chamba que disfruto enormemente porque hago lo que me gusta. Nada más, eso si, el día que se cierra la edición y se manda a prensa, es la locura total. Se tienen que coordinar una gran cantidad de colaboradores, muchos de ellos de renombre y expertos en sus respectivos temas. Se tiene que cuidar el contenido, mandarlo a la sección adecuada, conseguir el material adecuado, diseñar, editar. ¡Es mucho trabajo!, pero ver que la revista salga bien, mes con mes, es lo más satisfactorio.
— Les molesta que se encasille a la publicación como una revista de música?
— No, porque no somos solamente una revista de música, aunque es una idea que persiste entre mucha gente, lo entendemos y tratamos de cambiarlo. El estilo de la publicación es dar un abanico de temas muy amplios, de conocimientos muy variados.
En estos días hemos entrevistado a candidatos a la Presidencia. Tenemos cultura, tecnología, videojuegos, cine. Si, nos gusta la música, ¿a quién no?, pero también hay otras cosas que queremos mostrar.
— Es muy difícil jugar al adivino en el medio editorial. ¿Te imaginas celebrando los 20 años de “Rolling Stone” en México?
— Si, si me imagino. Creo que no va a ser fácil, pero tenemos como llegar. Vamos a fortalecer la plataforma digital, a ofrecer mayores opciones de información a nuestros lectores a través de la red con reportajes, dinámicas, programas. Espero celebrar 20 años y muchos más con la revista.
A celebrar
Una entre pocas
Aunque con 10 años en el mercado, “Rolling Stone” México experimentó de primera mano los estragos del voluble mercado editorial mexicano, e incluso tuvo que “parar” durante un tiempo el lanzamiento de sus ediciones ante la crisis económica. Sin embargo, sí tienen razones para celebrar.
El referente más reciente de una revista de música que celebró 10 años en México fue “La mosca en la pared”, sin embargo el día de la celebración le dijo a sus trabajadores que la revista cerraba.
“Hay gente que incluso cree que tenemos algo que ver con el grupo Rolling Stones, ¡y no!”, agrega antes de soltar una carcajada. La publicación, que en Estados Unidos tiene ya 45 años presente y con planes de seguir creciendo, se ha convertido en la última década en uno de los escaparates más importantes de la cultura popular, no solamente a nivel musical, sino también para política, cultura, cine y videojuegos.
Pero sobrevivir una década en el complejo medio editorial mundial, y particularmente en México, no es tarea fácil. Durante este tiempo también ha superado momentos complicados, desde crisis económicas hasta la partida de algunas de sus plumas más prestigiadas.
Sin embargo y por encima de todos los contratiempos, Rolling Stone le ha hecho justicia a su nombre y muestra que ante las dificultades puede ser tan dura como una piedra. “Han sido (10 años) con muchos altibajos, hemos pasado por varios problemas, pero los hemos superado, todo eso nos ha empujado a hacer una mejor revista”, agrega Carranco.
Durante años, Alejandro ha estado del otro lado de la grabadora. Ahora es él quien responde. “Ya me tocaba, ahora sé que se siente (risas)”. De visita en la Feria Internacional de la Música, el editor habla de los retos que enfrenta una publicación que lucha mes con mes por seguir vigente en un mundo en plena transformación son parte de los temas que toca el “cerebro” creativo detrás de la revista.
— Actualmente las opciones de información se han incrementado. “Rolling Stone” compite con otras revistas, páginas de internet y la televisión. ¿Cómo encaran todo eso?
— Aquí lo importante son los contenidos. Lo que en la revista buscamos son materiales exclusivos, tanto en texto como en fotografía. Es un valor que no todas las revistas te pueden ofrecer. Ahora, y es cierto, desgraciadamente hay un periodismo de entretenimiento muy básico donde muchas veces es más fácil bajar dos notas de internet, hacer una fusión medio rara y presentarlo como una noticia original. Nosotros tratamos de ir en una dirección distinta”.
— También las redes sociales se han convertido en una opción para mucha gente.
— Nos queda claro. Están en un auge enorme, pero hay que tener cuidado. ¿Cuántos artistas este año se han muerto y revivido en Twitter (risas). En la revista procuramos manejarlas con mucho cuidado. Además, tenemos también un respaldo enorme por parte de Rolling Stone Estados Unidos, tanto con información como en archivos.
— ¿Cómo es un día “normal” para alguien que se encarga de editar una revista como “Rolling Stone”?
— Es muy divertido, es una chamba que disfruto enormemente porque hago lo que me gusta. Nada más, eso si, el día que se cierra la edición y se manda a prensa, es la locura total. Se tienen que coordinar una gran cantidad de colaboradores, muchos de ellos de renombre y expertos en sus respectivos temas. Se tiene que cuidar el contenido, mandarlo a la sección adecuada, conseguir el material adecuado, diseñar, editar. ¡Es mucho trabajo!, pero ver que la revista salga bien, mes con mes, es lo más satisfactorio.
— Les molesta que se encasille a la publicación como una revista de música?
— No, porque no somos solamente una revista de música, aunque es una idea que persiste entre mucha gente, lo entendemos y tratamos de cambiarlo. El estilo de la publicación es dar un abanico de temas muy amplios, de conocimientos muy variados.
En estos días hemos entrevistado a candidatos a la Presidencia. Tenemos cultura, tecnología, videojuegos, cine. Si, nos gusta la música, ¿a quién no?, pero también hay otras cosas que queremos mostrar.
— Es muy difícil jugar al adivino en el medio editorial. ¿Te imaginas celebrando los 20 años de “Rolling Stone” en México?
— Si, si me imagino. Creo que no va a ser fácil, pero tenemos como llegar. Vamos a fortalecer la plataforma digital, a ofrecer mayores opciones de información a nuestros lectores a través de la red con reportajes, dinámicas, programas. Espero celebrar 20 años y muchos más con la revista.
A celebrar
Una entre pocas
Aunque con 10 años en el mercado, “Rolling Stone” México experimentó de primera mano los estragos del voluble mercado editorial mexicano, e incluso tuvo que “parar” durante un tiempo el lanzamiento de sus ediciones ante la crisis económica. Sin embargo, sí tienen razones para celebrar.
El referente más reciente de una revista de música que celebró 10 años en México fue “La mosca en la pared”, sin embargo el día de la celebración le dijo a sus trabajadores que la revista cerraba.
Síguenos en