Rosana rompe la barrera de los estereotipos

GUADALAJARA, JALISCO (07/MAR/2017).- Cálida, sencilla y sincera son tres palabras que definen a Rosana Arbelo. La cantautora tiene más cualidades, pero estas tres saltan a la vista cuando se da el acercamiento con ella. La intérprete española estuvo de visita en Guadalajara para promover su más reciente disco “En la memoria de la piel”, un álbum muy personal y genuino que grabó desde su casa, a la cual convirtió en estudio, pero que también tiene un mensaje muy importante: romper la barrera de los estereotipos.

“La gente no envejece, se hace grande y además creo que hay que morir joven lo más tarde posible, no creo en envejecer como algo malo. Creo en apoderarte de un montón de vivencias y de cosas bonitas, que te sirvan a ti y a los que están contigo. Pero en este caso en concreto, ‘La memoria de la piel’, ni siquiera está hablando de los recuerdos, está hablando de las emociones vivas que uno no decide, muy gráfico y muy fácil de entender: no hay nadie en el mundo que le diga a su piel ‘erízate’ y que ésta se erice. La piel se eriza cuando ella quiere y erizándose, nos hacemos conscientes de que algo nos ha tocado el alma, la piel tiene vida propia, guarda las caricias y los abrazos”.

Rosana adora abrazar, le emociona y le gusta el contacto con la gente, con su público, con sus amigos, con su familia. “El abrazo es algo especial y estar en contacto así es una forma de comunicarte, no sólo está el hecho de mirar a los ojos, escuchar o hablar, también está la energía, lo que se transmite en la piel”.  

La cantante se reconoce en un mundo donde aún pesa el color de la piel, la diversidad de pensamiento y la libertad de ser, tres dones con los que el ser humano nació, pero que aún le cuesta trabajo aceptarlos y entenderlos. Desde su trinchera, la compositora abre un camino donde las emociones que se sienten al tocar la piel de otro ser, pueden ser esa llave para derribar muros y barreras.

“Había algo que me lleva preocupándome atrás tiempo que es la cantidad de gente que anda hablando de las cosas que nos separan, de las cosas que nos dividen a las personas, de los estereotipos, de las etiquetas y la verdad me duele, porque los seres humanos en las cosas importantes de verdad nos parecemos mucho; tenemos más cosas en común que en contra, tenemos más cosas que nos hacen similares que diferentes, si uno va a la esencia de lo que de verdad importa”.

El mejor de su carrera

Sin titubear, para Rosana este disco es el mejor de su carrera, no sólo por este mensaje emocional que conlleva, también porque es un disco cocinado desde casa, desde donde todo funciona mejor. “Es un sonido orgánico, un poco más fuerte, intenso, más eléctrico y eso ha hecho que de repente el paisaje donde se desarrollan las historias sea como más pasional y grande en un momento determinado, pero esencialmente yo creo que sigo siendo la misma, cuando uno desnuda esas canciones y las deja solo a guitarra y voz, sigue mandando la melodía y los textos. Es mi mejor disco hasta ahora”.

Asegura que siempre hace todos los discos con las mismas ganas, pero con éste le ha nacido decir que es el mejor y que en lo consecuente, espera hacer aún mejores álbumes: “Esta vez he conseguido llevar hasta afuera lo que tenía dentro y eso lo hace mágico para mí”. Desde el último disco inédito que Rosana presentó, han pasado cinco años, en el inter presentó un recopilatorio de sus éxitos, “Ocho  lunas” donde hizo nuevas versiones y colaboró en duetos con otros compañeros como Jesús Navarro y Rubén Blades, entre otros.  

“En casa me puse a componer desde julio del año pasado hasta la última semana de diciembre y cuando terminé de componer me di cuenta que había hecho 50 canciones. Pensaba que en dónde podría encontrar el sonido que necesitaba para este álbum, donde todo fuera natural contrastando con una parte programada, pero que la realización fuera orgánica, que no hubiera maquillaje y en esto de decir, ‘no es el estudio que conozco ni en Madrid, ni en México, ni en Nueva York’, di una palmada sin querer y en esa palmada dije, a ver si tengo suerte (y el estudio) lo voy a tener aquí (su hogar)”.

Rosana grabó en diferentes lugares de su casa y con diferentes alturas, “incluso pusimos la batería en la piscina, grabamos en el salón, en la entrada; luego, vino la parte de la magia que te trae la suerte de grabar así, puede gustar más o gustar menos, pero de verdad que yo tenía dentro la necesidad”.

SABER MÁS
Regresa en la segunda mitad del 2017

Rosana regresa a España para empezar su gira de conciertos para promover este disco “En la memoria de la piel” y planea volver a México para junio o julio y ofrecer presentaciones, por lo pronto, en las principales ciudades del país. “Habrá gira durante dos años y medio y México es obligado y deseado”. Rosana es una cantante que disfruta de tres formatos de shows para compartir con su público: guitarra y voz, el intermedio que es de teatros y auditorios y finalmente los masivos.

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