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Profundas reflexiones en breves relatos

Los cortos ''Sueña'', ''Alpha y Omega'' y ''La noria'', de manufactura tapatía, se apoyan en la sensibilidad en diferentes formas

GUADALAJARA, JALISCO (07/MAR/2012).-

Recurre a la fantasía

"Sueña" es un cortometraje de ocho minutos y se trata del primer trabajo en cine de Ana Zamboni, producción que compite en la sección de Cortometraje mexicano y que fue apoyado y será distribuido por Imcine.

La ficción cuenta con un poco de animación y es una especie de homenaje a las personas que recurren a la fantasía y a los sueños para sobrevivir.

“Me tomó bastante tiempo hacerlo, desde 2009 gané el Estímulo a la Creación Artística de Jalisco y lo grabé. Seguí trabajando a principios de 2010 y parte de 2011, cuando la Academia Jalisciense de Cinematografía me otorgó un apoyo para la posproducción”, comparte Zamboni, quien también apunta que “quería expresar que ahora que vivimos en un mundo tan caótico en el que muchos medios bombardean con cuestiones erróneas sobre dónde y cómo encontrar la felicidad, nos hacen creer que el dinero y la belleza física son la clave, sin embargo esto sólo genera frustraciones y por eso es que muchas personas son infelices”.

La idea, enfatiza Ana Zamboni, quien también es organizadora del Talent Campus, “es aplaudir a aquellos que me han enseñado que la felicidad no tiene que ver con las posesiones, sino con momentos. Un atardecer, el nacimiento de una flor, por ejemplo, me atrae la idea de recurrir a la imaginación y a la fantasía, porque creo que nos hemos vuelto una sociedad de zombis que camina con los ojos cerrados, creyendo que estamos abriendo los ojos ante la vida”.

Tragedia griega

Una tragedia griega protagonizada por zombis, así puede definirse "Alpha y Omega", un corto de Mane González, que tuvo un costo de cerca de 50 mil pesos y requirió de al menos 30 personas para su realización.

La historia escrita por el guionista Alfonso R. Miller hace una crítica social de la mano de seres que no están vivos ni muertos, que lo único que les sobrevive es el instinto primario de alimentarse, que carecen de inteligencia y conciencia.

“'Alpha y Omega' es la historia de Z, un zombi que vive en lo alto de una ventana de un edificio y ve a los humanos como si fueran mounstros irracionales”, así explica el director que ya exhibió el relato en su tierra con sala llena, cuestión que agradece porque “una de las ventajas de estar en casa es que llevas porra”.

Más que dar un mensaje, apunta Mane,  “buscaba que la gente se quedara pensando, que la invitara a reflexionar, aunque es cierto que cada uno interpretará cosas distintas”.

“Incluso –comenta el realizador– una espectadora me comentó que le interesó la forma en que se aborda la violencia humana y la manera de retratar al mounstruo , así como a los mounstruos que podemos ser los seres humanos”.

El trabajo que contó con apoyo del Departamento de Imagen y Sonido de la UdeG, además de su última proyección gratuita hoy a las 16:00 horas en la Expo Guadalajara, “buscará espacio en otros festivales. Esperamos llegar a Guanajuato y a Morelia, pero queremos que se exhiba en los encuentros de género”.

Enfrentar la pérdida

"La noria" tardó un año siete meses en tomar forma, de hecho apenas la semana pasada salió la primera copia. Dura siete minutos, un poco menos que "Jacinta", el anterior corto que realizó la tapatía Karla Castañeda y con el que consiguió un Ariel y varios reconocimientos más, así como un tour interesante de festivales, aunque es la propia directora quien asegura que no  fue menos trabajo y “hay una evolución”, comenta Karla, con respecto a los personajes de 'Jacinta'”.

“Está mejor logrado”, apunta la directora y añade que “tiene más personajes, más escenarios, exteriores e interiores, mientras que en Jacinta era sólo un personaje”, y ciertamente después de conseguir reconocimientos la presión es mayor.

En la producción participan Ignacio López Tarso y Ana Ofelia Murguía, que aun cuando no hay diálogos en sí, ellos se encargaron de integrar las expresiones, mientras que el director Carlos Bolado ("Crónica de un desayuno") puso su creatividad en la edición. La fotografía estuvo a cargo de Alejandro Cantú ("Las razones del corazón de Ripstein") y la música la compuso Gilberto Cervantes de la banda Troker.   

“Me interesaba hablar de cuando un padre pierde a un hijo, de cómo se detiene el tiempo con la pérdida de un ser querido. Me interesó porque creo que la mayoría esperamos que se vayan primero los viejos y no al revés, nunca esperas que un hijo se muera”.

EL INFORMADOR/ ALTAGRACIA LIZARDO MEDINA
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