Entretenimiento
Pablo Alborán, listo para volar
El nativo de Málaga se presentará el próximo sábado en el Auditorio Telmex, en un concierto que promete será especial
GUADALAJARA, JALISCO (23/ABR/2015).- Hace un par de años se comentaba de un músico que apenas comenzaba su carrera musical, pero que tenía mucho talento para compartir, hoy ese joven llamado Pablo Alborán cosecha los frutos de estar comenzando desde cero con una serie de conciertos por Europa y América Latina, y toca el turno de llegar a México con su gira “Terral”, que comprende Distrito Federal, Guadalajara y Monterrey. En nuestra ciudad deleitará a sus fans tapatías este sábado 25 de abril en el
Auditorio Telmex en punto de las 21:00 horas.
Pablo, quien llegó a la Perla Tapatía hace unos años con un perfil bajo, no imaginaba toda la fama que ahora tiene al ser un referente de la música contemporánea en Hispanoamérica; con apenas 25 años, el músico es hoy día una de las fichas más importantes de la industria del entretenimiento.
El cantante reconoce que México para cualquier artista es una plataforma importante cuando se trata de consolidar una carrera, por ello sus ganas de presentarse en suelo azteca. “México es un clavo en la carrera de cualquier artista, especialmente por la cultura musical que tiene la gente, cuando uno llega a este país percibe que el público está escuchando, analizando y esperando a ser sorprendido”.
El intérprete dijo que a diferencia de sus anteriores presentaciones, esta vez en su gira por las ciudades más importantes de la República se volcará por ofrecer un “espectáculo” en toda la extensión de la palabra y dejar un poco la parte acústica que también le encanta a su público.
A pesar del camino recorrido y de que cumple un sueño al cantar en vivo para los mexicanos, no deja de sentirse nervioso. “Lo único que puedo decir es que lo que hago me sale del corazón”.
Lejos de sentirse halagado con la fama de la que hoy goza, Pablo no quita los pies del suelo, sabe que una carrera musical no sólo se basa en tener éxito, sino en la lucha constante y que él sigue trabajando porque hace lo que más le gusta: cantar y componer, porque estas dos actividades para él siguen siendo necesidades que no terminará nunca.
“El día que la fama o los 'flashes' perturben esa parte artística creo que sería el primero en dejarlo. Cuando me siento a componer, sigue siendo una necesidad, algo que nace de dentro con ilusión, con ganas de transmitir, y no hay nada que perturbe eso”.
Alborán está consciente de que la música es una industria cambiante que se está adaptando a nuevos modelos y que así como él triunfa hoy, mañana estarán otros valores con el mismo ímpetu por forjar una carrera. “Tengo las mismas ganas de seguir conociendo y sorprenderme de muchas cosas porque mi vida es normal, me gusta mantener los pies en el suelo. Que se hayan abierto las puertas para tener este logro es un paso más para seguir motivado y ofrecer lo mejor, pero continúo con la ilusión de aquel chaval que comenzó hace apenas unos años”.
Nuevos sonidos
“Terral”, disco que incluye una colaboración con Ricky Martín, le da permiso a Pablo de jugar un poco con los sonidos, como en “Pasos de cero” que es una rumba muy ligera que se conjuga con la balada. “Ahora saben que hago otra cosa que no sea cantar al amor todo el día con la guitarrita”.
Alborán también se estrena como coproductor musical en la placa, pues comparte que la visión de un artista debe ampliarse. “Las canciones en este disco se van transformando, cada vez que subo al escenario no hay pizca de monotonía o rutina, es algo que fluye y puedo jugar con las canciones, hay una libertad de hacer varias cosas en el escenario, dando una gran dinámica a las presentaciones en vivo”.
Señala que en su proceso como artista ha tenido que entender a la industria musical. “La gente está volviendo a tener ese rollo fetichista con los discos, con el material; yo soy de comprar muchos discos y eso es fantástico para cualquier músico”.
Pablo, quien llegó a la Perla Tapatía hace unos años con un perfil bajo, no imaginaba toda la fama que ahora tiene al ser un referente de la música contemporánea en Hispanoamérica; con apenas 25 años, el músico es hoy día una de las fichas más importantes de la industria del entretenimiento.
El cantante reconoce que México para cualquier artista es una plataforma importante cuando se trata de consolidar una carrera, por ello sus ganas de presentarse en suelo azteca. “México es un clavo en la carrera de cualquier artista, especialmente por la cultura musical que tiene la gente, cuando uno llega a este país percibe que el público está escuchando, analizando y esperando a ser sorprendido”.
El intérprete dijo que a diferencia de sus anteriores presentaciones, esta vez en su gira por las ciudades más importantes de la República se volcará por ofrecer un “espectáculo” en toda la extensión de la palabra y dejar un poco la parte acústica que también le encanta a su público.
A pesar del camino recorrido y de que cumple un sueño al cantar en vivo para los mexicanos, no deja de sentirse nervioso. “Lo único que puedo decir es que lo que hago me sale del corazón”.
Lejos de sentirse halagado con la fama de la que hoy goza, Pablo no quita los pies del suelo, sabe que una carrera musical no sólo se basa en tener éxito, sino en la lucha constante y que él sigue trabajando porque hace lo que más le gusta: cantar y componer, porque estas dos actividades para él siguen siendo necesidades que no terminará nunca.
“El día que la fama o los 'flashes' perturben esa parte artística creo que sería el primero en dejarlo. Cuando me siento a componer, sigue siendo una necesidad, algo que nace de dentro con ilusión, con ganas de transmitir, y no hay nada que perturbe eso”.
Alborán está consciente de que la música es una industria cambiante que se está adaptando a nuevos modelos y que así como él triunfa hoy, mañana estarán otros valores con el mismo ímpetu por forjar una carrera. “Tengo las mismas ganas de seguir conociendo y sorprenderme de muchas cosas porque mi vida es normal, me gusta mantener los pies en el suelo. Que se hayan abierto las puertas para tener este logro es un paso más para seguir motivado y ofrecer lo mejor, pero continúo con la ilusión de aquel chaval que comenzó hace apenas unos años”.
Nuevos sonidos
“Terral”, disco que incluye una colaboración con Ricky Martín, le da permiso a Pablo de jugar un poco con los sonidos, como en “Pasos de cero” que es una rumba muy ligera que se conjuga con la balada. “Ahora saben que hago otra cosa que no sea cantar al amor todo el día con la guitarrita”.
Alborán también se estrena como coproductor musical en la placa, pues comparte que la visión de un artista debe ampliarse. “Las canciones en este disco se van transformando, cada vez que subo al escenario no hay pizca de monotonía o rutina, es algo que fluye y puedo jugar con las canciones, hay una libertad de hacer varias cosas en el escenario, dando una gran dinámica a las presentaciones en vivo”.
Señala que en su proceso como artista ha tenido que entender a la industria musical. “La gente está volviendo a tener ese rollo fetichista con los discos, con el material; yo soy de comprar muchos discos y eso es fantástico para cualquier músico”.
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