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Olga Kurylenko ilumina la pantalla con ''Oblivion, el tiempo del olvido''
Su historia cinematográfica comienza con unas vacaciones en Moscú y el intento de trasladarse usando el metro de esa ciudad
La película de ciencia ficción futurista con tintes apocalípticos, atrapó durante el pasado fin de semana la atención de los espectadores, en buena medida gracias a su trama retorcida, coreográficas batallas y giros inesperados en el guión. Pero la historia de cómo Olga Kurylenko llegó al mundo de la farándula no le pide nada a cualquier ficción. Incluso al de Oblivion.
Nacida en Ucrania en 1979, Olga supo desde joven que quería ser algo más que una chica de Berdyansk, una ciudad mediana de Ucrania. A los 15 años, durante unas vacaciones en Moscú, su sueño de trascender se cumplió en el lugar menos imaginado.
"Yo me encontraba en una estación de trenes de Moscú -recuerda-, que son lugares atestados de gente a todas horas. Y la ciudad en sí es una de las más pobladas de Europa. Sin embargo, en ese mar de personas, una mujer que cazaba talentos para una agencia de modelos de fijó en mí, y allí comenzó mi carrera en las pasarelas, que terminó por traerme al cine".
"Durante mucho tiempo he pensado en lo que pasó en esa estación de tren. Es algo que piensas 'eso sólo ocurre en los libros o las películas', y si, puede ser casi milagroso. Pero también puedo decir con orgullo que tuve la fortuna de que me sucediera", remata Kurylenko.
El golpe de suerte con el que comenzó su carrera le abrió una puerta al mundo del modelaje, pero a partir de allí, ha sido el trabajo, el esfuerzo y el vencer sus temores, lo que la ha convertido en lo que es hoy: Una de las actrices más cotizadas en la industria cinematográfica más poderosa del planeta.
EL INFORMADOR / Juan Francisco González Rodríguez
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