Entretenimiento
Ofrecen misa por aniversario luctuoso de José Alfredo Jiménez
El compositor y actor mexicano es recordado a 41 años de su muerte
José Alfredo Jiménez se reunieron la tarde de este domingo en el Panteón Municipal, en Dolores Hidalgo, para presenciar una misa, por el 41 aniversario luctuoso del también actor.
A esta reunión que duró una hora, además de señores vestidos de charros, niños y jóvenes, entre otros, también acudió la familia del intérprete, entre los que se encontraron su hijo José Alfredo Jiménez Jr., sus sobrinos José (director del museo del compositor) y María Teresa Azanza Jiménez, Iván Revueltas y su primo Juan Antonio Revueltas.
Frente a la tumba del cantautor, que exhibe un enorme sombrero y un zarape con los nombres de sus canciones, se colocó un pequeño escenario en el que se el padre Fernando Arellano ordenó la misa, acompañado de la música del mariachi Oro de México, compuesto por ocho integrantes guanajuatenses.
Al finalizar la ceremonia eucarística, José Alfredo Jiménez Jr. se acercó al público para saludarlo, tomarse fotografías y firmarles pósters y algunos libros.
Por su parte, María Teresa Azanza Jiménez declaró, que siente gusto que mucha gente siga queriendo a su tío.
"Se merece todo el cariño de la gente, fue un gran compositor, un día vi a un joven argentino que estudiaba antropología social, venía preguntar por José Alfredo, porque escuchó decir a José Saramago: 'que me perdone Octavio Paz, que el mejor poeta es José Alfredo Jiménez'.
"Fue un hombre muy sencillo, cariñoso con todos, nos da gusto que lo quieran" aseveró Azanza, de 77 años de edad, quien además informó que
"la Casa de Cultura de este municipio acaba de cumplir 20 años de haberse inaugurado y me llevé la sorpresa del año, porque al auditorio de este lugar le pusieron mi nombre" concluyó.
DOLORES HIDALGO, GUANAJATO (23/NOV/2014).- Cientos de fans del cantautor mexicano
A esta reunión que duró una hora, además de señores vestidos de charros, niños y jóvenes, entre otros, también acudió la familia del intérprete, entre los que se encontraron su hijo José Alfredo Jiménez Jr., sus sobrinos José (director del museo del compositor) y María Teresa Azanza Jiménez, Iván Revueltas y su primo Juan Antonio Revueltas.
Frente a la tumba del cantautor, que exhibe un enorme sombrero y un zarape con los nombres de sus canciones, se colocó un pequeño escenario en el que se el padre Fernando Arellano ordenó la misa, acompañado de la música del mariachi Oro de México, compuesto por ocho integrantes guanajuatenses.
Al finalizar la ceremonia eucarística, José Alfredo Jiménez Jr. se acercó al público para saludarlo, tomarse fotografías y firmarles pósters y algunos libros.
Por su parte, María Teresa Azanza Jiménez declaró, que siente gusto que mucha gente siga queriendo a su tío.
"Se merece todo el cariño de la gente, fue un gran compositor, un día vi a un joven argentino que estudiaba antropología social, venía preguntar por José Alfredo, porque escuchó decir a José Saramago: 'que me perdone Octavio Paz, que el mejor poeta es José Alfredo Jiménez'.
"Fue un hombre muy sencillo, cariñoso con todos, nos da gusto que lo quieran" aseveró Azanza, de 77 años de edad, quien además informó que
"la Casa de Cultura de este municipio acaba de cumplir 20 años de haberse inaugurado y me llevé la sorpresa del año, porque al auditorio de este lugar le pusieron mi nombre" concluyó.
Síguenos en