Entretenimiento
Noche de pop
Uno de los conciertos con mejor producción en las Fiestas de Octubre
Vestida en color azul y luciendo su larga cabellera rubia, la hija de Susana Dosamantes apareció en el ruedo en punto de las 00:20 horas. La entrada no era la mejor (3 mil personas, lo que significa que el palenque estaba a media capacidad), pero la entrega que la interprete ofreció en el escenario fue absoluta, desquitando el boleto de cada uno de los fieles que se dio cita en el recinto de Periférico Norte.
Y es que Paulina Rubio sabe que detrás de toda la parafernalia que rodea a su imagen (escándalos, chismes, relaciones amorosas y peleas con otros integrantes de la farándula), lo que el público realmente quería ver en el palenque era su faceta como artista. La Paulina que canta, la que siente la música y la que recorre todo el escenario de forma furiosa. Y eso fue lo que ofreció.
"Causa y efecto" fue el tema con el que abrió el recital, acompañada por sus músicos y por una producción que resaltó comparada a lo que han ofrecido otros artistas en el mismo recinto.
Cañones de humo, luces de colores y su grupo de artistas arroparon a Rubio a lo largo del espectáculo, quien después de tres canciones lanzó el saludo tradicional: “¡Buenas noches, Guadalajara! ¿Cómo están?”.
“Que lindo que me hayan invitado a estas fiestas. Que lujo tenerlos esta noche. Me encanta estar aquí esta noche, con tantos y tantos amigos, porque hace mucho no nos vemos. ¿Están listos? Nosotros venimos dispuestos a todo esta noche, ¡obvio!”, remató con su peculiar acento, para dar paso a "Yo no soy esa mujer".
La velada demostró que Paulina cuenta con una base de fanáticos fieles en Guadalajara. Cierto, no llenaron el palenque, pero los presentes estuvieron en todo momento de pie, grabando el concierto con sus celulares, coreando cada tema y animando a su estrella. Y claro, la cantante se dejó querer en todo momento.
EL INFORMADOR / Juan Francisco González Rodríguez
Síguenos en