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Morrison reencuentra a Carla

La cantante se alista para presentarse en el festival de Coachella; también visitará Guadalajara

GUADALAJARA, JALISCO (18/ENE/2016).- Abre la plática con una sonrisa. Nuevos colores están invadiendo su voz. Emociones diferentes se están sembrando en su alma. Es Carla Morrison en su versión 2016. Transformada. Lista para crecer. Emocionada por la aventura.

Basta con escucharla, aunque sea por teléfono, para darse cuenta que la Carla de hoy es muy diferente a la que irrumpió en los escenarios en 2008. “Me siento emocionada, muy bien. Recibiendo noticias que no esperaba y que me hacen sentir feliz. Creo que eso cuenta”, confiesa.

¿A qué noticias se refiere? A esa de la que todo mundo habla. Que estará el próximo mes de abril en Coachella, uno de los principales festivales de música en Estados Unidos —y para muchos, el mejor— ¿y por qué es importante? Porque en esta edición se vivirá el reencuentro de los Guns N’ Roses. Porque verá la vuelta de LCD Soundsystem. Y porque los invitados mexicanos en cada edición se cuentan con los dedos de una mano. Y uno de esos es Carla.

“Coachella no era una asignatura que sintiera pendiente, pero si se me había escapado. En los años recientes no podía ir ni como fan porque estaba de gira. Y cuando era más joven y trabajaba de secretaria menos, porque no me alcanzaba el dinero (risas). Por eso es mi primera vez, y me emociona mucho”.

A liberar el genio

Morrison subirá al escenario de Coachella el 15 y el 22 de abril (el festival se celebra durante dos fines de semana consecutivos). Inmersa en la emoción de ser una de las selectas invitadas, la hija pródiga de Tecate, Baja California, confiesa que todavía no sabe qué hará sobre el escenario.

“Apenas estoy comenzando con los ensayos. Y será allí cuando veamos (con su equipo de músicos), cómo será el set que presentaremos. Lo que es seguro es que será especial, porque es una oportunidad de llegar a mucha gente que no me conoce”.

La cantante promueve hoy por hoy el disco “Amor supremo”, un material alabado por la crítica, y con el que Carla a reforzado el puente emocional que ha construido a lo largo de su carrera con sus fanáticos.

“Cada que subo al escenario hay una oportunidad de mejorar, de crecer. Hay muchas cosas que he aprendido allí en estos año. A comunicarme, a hacer comunión con la gente. También aprendía relajarme, a tomar las cosas en serio, pero no tanto como para no disfrutarlo”, reflexiona la cantante.

Un mismo latido

Quien haya ido a algún concierto de Carla Morrison, sabe que hay dos cosas seguras: Será emocional y habrá lágrimas. La propia intérprete reconoce que esta avalancha de emociones por momentos puede ser avasalladora. “Valoro mucho cómo la gente reacciona, como relaciona sus experiencias con mis canciones. Ante eso no tengo otra cosa que ofrecer que darles lo mejor, trabajar al máximo mis ideas. Cuando la conexión es perfecta, no hay mejor sensación”.

Coachella le llega en buen momento a la cantante. Afirma que su 2015 fue un año de reflexión. De cosechar un poco de lo mucho que sembró en tiempos recientes y de comenzar a mirar al horizonte. “Me siento bien, tranquila. Me hacía falta una pausa para poner en orden mis ideas. Si tengo que pensar en una palabra que defina los meses más recientes de mi vida, esa sería ‘reencuentro’. Me reencontré conmigo al fin”, remata con una sonrisa.

Con Guadalajara en el corazón

Coachella es importante, pero no es lo único. Carla Morrison también va a venir a reencontrarse con sus fieles tapatíos. La cita es el próximo 26 de febrero en el Teatro Diana (Av. 16 de septiembre 710). “Si no fuera por trabajo, en lugar del Distrito Federal viviría en Guadalajara”, confiesa.

El concierto servirá para recorrer “Amor supremo”, pero también para desempolvar todos esos himnos que ha compuesto en el pasado. “Siempre que voy a Guadalajara me tratan muy bonito. La gente es amable y los recuerdo, los recuerdo muy bien”.

“No olvido como me han seguido desde la primera vez que fui, que me presenté en el Café Bretón (Juan Manuel 175) hasta hoy, siempre, siempre me han tratado hermoso”.

Entre las canciones que se espera que suenen en el Diana están “Un beso”, “Flor que nunca fui”, “Azúcar morena”, “Cercanía”, “Todo pasa” y “Mi secreto”, entre otras. Los boletos están en taquilla del recinto, y van de los $650 a $200 pesos.

Los conceptos de Carla

Inspiración
“Me resulta más sencillo componer cuando estoy de gira o viajando. Me cuesta hacerlo si estoy descansando”.

A quién le canta
“Al amor. Es mi inspiración principal, pero también depende de los momentos que viva”.

La canción con la que se conecta
" 'Yo vivo para ti'. No tanto por lo que dice, sino por el ‘flow’ de lo que habla, de cómo tengo ganas de estar con esa persona, cómo quiero explorar a la mujer que tengo dentro”.

Lo que está leyendo
" 'Yo soy Malala’ me encantó. Estoy descubriendo ‘Los hombres son de Marte y las mujeres de Venus’. Me da mucha risa".
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