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Michelle Williams se mete en la piel de Marilyn Monroe

Señala que es una mujer más natural, a la que no le interesa tanto el maquillaje, la ropa y los accesorios

Michelle Williams se mete en la piel de Marilyn Monroe
NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS (22/NOV/2011).- La relación entre el trabajo como actriz de Michelle Williams y su vida personal es tan fuerte que incluso ella se confunde a veces.

Participar en "Blue Valentine" el año pasado, en la que se muestra el doloroso derrumbe de un joven matrimonio, le parece un recuerdo tan intenso que a veces Williams lo siente como si fuera verdadero.

"Cuando pienso en mi vida y en las relaciones o en algo, mi mente mezcla esos recuerdos de las relaciones reales que he tenido en mi vida", dijo la actriz. "Me tengo que detener y decir: 'No tú no te casaste ni te divorciaste de Ryan Gosling'''.

En cuanto a su más reciente película "My Week With Marilyn", está claro que Williams pasó por un cambio. Tras años de películas mucho más sencillas, casi en crudo, como "Wendy and Lucy" y "Blue Valentine" en "My Week With Marilyn", se ve glamurosa y radiante. Eso también habla de una evolución en el interior de Williams.

"Una cosa que me ha costado trabajo, y que me ha interesado a mis 31 años en este mundo, es estar conforme conmigo misma", dijo Williams. "He necesitado mucho tiempo para conocer a esa persona y lograr que me guste, así que no he querido distanciarme de esa mujer con gafas, como el pelo, el maquillaje y la ropa".

"Marilyn", que se estrena el 23 de noviembre, le ha valido a Williams algunas de las mejores críticas en su carrera, y la ha puesto en la contienda por el Oscar a la mejor actriz. La actuación de Williams logra evocar a una persona de carne y hueso, sin caer en una caricaturización. Es un retrato de muchas facetas sobre Monroe: una figura pública gloriosa, una actriz vulnerable en lo privado y una chica del espectáculo como en "The Prince and the Showgirl".

De hecho, la película relata la producción de esa cinta de 1957 en la que Laurence Olivier fue director y protagonista con Monroe. Los dos sacaron chispas, era una mezcla de agua y aceite del teatro británico clásico y las estrellas del cine estadounidense.

"Era un gran reto en el plano técnico, que ella logró sin esfuerzos, de una manera sencilla", dijo Kenneth Branagh, quien interpreta a Olivier.

En el ojo del huracán
Williams se veía refrescantemente inocente durante la entrevista. Parecía elegante pero sin perder la sencillez con un vestido blanco y negro y su rubio cabello corto, el cual ha dicho es un tributo a Heath Ledger, su ex pareja y el padre de su hija de seis años Matilda, a quien le gusta el cabello corto.

Cuando Ledger murió en 2008 (pocos meses después de que él y Williams se separaran), la atención de los medios se centró en Williams, quien desde entonces ha sido perseguida por los paparazzi. Pero ella no parece muy afectada por esto y responde las preguntas con amabilidad.

Sus inicios
La carrera de Williams comenzó cuando era muy joven, se independizó de sus padres cuando era una quinceañera y dos años más tarde fue elegida para el elenco de "Dawson's Creek", la serie de WB que duró seis temporadas y la catapultó a la fama.

Ha trabajado en dos ocasiones con el director Kelly Reichardt en películas de bajo presupuesto caracterizadas por su realismo "Wendy and Lucy" de 2008, una película sobre una mujer pobre que vive en un auto con su perro y "Meek's Cutoff" una descripción cruda de la vida en el desierto de Oregon en 1845, que se estrenará este año. Williams durmió en el auto de su personaje para "Wendy and Lucy" y aprendió a manejar ganado para "Meek's Cutoff".

"Realmente le gusta aprovechar las oportunidades para esconderse y ser otra persona", dijo Reichardt. "Esas películas le han dado la oportunidad de trabajar y poderse mezclar en el mundo de una forma que quizá es más difícil".

Williams dice que desde hace mucho tiempo ha sentido interés en el "naturalismo, nada de brillo, nada pulido, nada de barniz".

Quiere ser la mejor actriz
"Lo que deseo es tener la menor separación entre el personaje que estoy interpretando y la audiencia, nada que haga que el personaje se sienta a la distancia", dijo la actriz. "Con 'Wendy and Lucy' estaba... no sé si fue la culminación, pero definitivamente creo que era lo que estaba buscando".

Mientras que para "Wendy and Lucy" sólo tenía que levantarse de la cama para empezar a actuar en "My Week With Marilyn" necesitaba tres horas para que la peinaran y la maquillaran cada día.

"En la película hay una especie de contraste entre el interior estadounidense, la forma psicológica de trabajar y el exterior inglés, la forma teatral de trabajar", dijo el director Simon Curtis. "Pero Michelle logró el personaje de Marilyn en ambas direcciones".
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