Entretenimiento
Marisol Centeno dedica su trabajo al público
La que fuera estrella infantil de Televisa ahora reparte su tiempo entre proyectos en el Séptimo Arte y la pantalla chica
GUADALAJARA, JALISCO (12/MAR/2012).- Marisol Centeno descubrió que la fama que ofrecía la televisión no podría ser tan perfecta como aparentaba.
Crecer como una estrella infantil y juvenil podría sonar a todo un paraíso al que difícilmente renunciarían otros histriones, pero para la actriz era una cadena que le impedía ir a donde ella quería.
A ella no le costó trabajo decirle adiós a la seguridad de la pantalla chica, a los papeles de “niña buena” y las grabaciones eternas en foros. Simplemente se dio la media vuelta y abandonó lo que parecía una prometedora carrera como figura de telenovelas para adentrarse en lo que ha sido su gran pasión desde entonces: El cine. Eso sí, ella niega estar casada con el Séptimo Arte. “Lo que busco son buenos papeles”, asegura con voz suave.
La actriz recién visitó Guadalajara, para acompañar a la directora Kenya Márquez y el resto del elenco (Damián Alcázar y Ana Ofelia Murguia, entre otros) a la presentación de la cinta "Fecha de caducidad", trama de humor negro que ha logrado buenas opiniones, además de ganar reconocimientos en las fiestas fílmicas de Morelia (Premio del Público) y Guadalajara (de la Academia Jalisciense de Cinematografía).
“Siempre que un grupo de jurados te da un premio en un festival se agradece”, afirma la actriz, quien agrega que este tipo de reconocimientos deben tomarse con mesura. “A final de cuentas una película está hecha más para el público y no tanto para darle gusto a la crítica especializada. Yo soy de la idea de que lo más importante para un productor, director o actor, es lograr que la gente se conecte con algo emocional, donde el espectador se pueda proyectar, pasarla bien, sufrir, llorar”.
Trotamundos
“Siempre es bueno tener un lugar para poder presentar tu trabajo, porque ayuda a que otro tipo de público pueda conocer la película y además de que Fecha… está en su etapa de gira de festivales”, afirma Marisol, quien tiene la maleta lista en todo momento, porque sabe que ya sea para actuar o para promover una película, la vida del actor transcurre la mitad en el avión o camión y la otra mitad en el set de filmación. Por ejemplo, de la Perla Tapatía partió a Miami para presentar el largometraje, y luego “a otros lugares, porque no han dejado de surgir invitaciones”.
A la par del filme de Márquez, la actriz presume su trabajo en la serie de Canal Once XY, a la que se sumó con un papel especial. “El elenco base ya estaba bien integrado, pero me encantó ser parte de este proyecto, porque es una serie que yo ya veía, que me gusta, y ser parte de una producción así siempre es un agasajo”.
Con su participación en XY, Centeno derrumba el mito de que no volvería a la pantalla chica. “Hay gente que me dice si abandone la tele. No. Creo que más bien es como se ha ido dando la chamba. Me gustó lo que hice en XY y creo que la pantalla chica está abriendo posibilidades a los artistas y más opciones al público”.
Eso sí, siempre va a preferir los proyectos que sean sólidos y, sobre todo, que se ajusten a su variable agenda cinematográfica. “Tengo cuatro películas en puerta, pero no tengo bien claro la fecha de inicio de ninguna. Para bien o para mal dependemos mucho de cómo suelten los presupuestos Fidecine o Foprocine, entonces estoy en esa etapa de ajustes”.
Marisol tendrá que esperar hasta el mes de abril para saber cómo ajustará su calendario, y confiesa que lo único que le consta es que es probable que todas las películas se filmen en México, aunque en su horizonte se asoma una coproducción entre nuestro país, España y Rusia “porque en ese caso el director es europeo, pero fuera de eso, nada”.
La incertidumbre no le borra la sonrisa. Ella está feliz con la decisión que tomó hace años, cuando puso “pausa” a las telenovelas y encendio el proyector de cine, donde ahora se siente mejor.
El ego, bajo control
Con los ojos cerrados
“Creo que todos los actores, con los egos que tenemos, sufrimos mucho viendo nuestro trabajo (risas), bueno, por lo menos ése es mi caso”. Así habla Marisol Centeno de la dura experiencia que puede resultar para un histrión ver su propia imagen en pantalla.
La actriz asegura que ya vio varias veces "Fecha de caducidad", por lo que este “sufrimiento” poco a poco va disminuyendo, aunque eso no significa que ya se haya ido del todo. “Siempre nos encontramos cosas que decimos ‘me hubiera movido mejor así o hubiera dicho esto de otra forma’. Soy muy crítica con mi trabajo y siempre trato de aprender de lo que veo bien o mal. Las primeras funciones de todas mis películas no las disfruto tanto porque me encuentro cosas de lo que sea (risas)”.
Centeno anota que tampoco se azota con un látigo por su trabajo, porque “sí, me critico mucho, pero con el ánimo de mejorar en cada proyecto”.
Crecer como una estrella infantil y juvenil podría sonar a todo un paraíso al que difícilmente renunciarían otros histriones, pero para la actriz era una cadena que le impedía ir a donde ella quería.
A ella no le costó trabajo decirle adiós a la seguridad de la pantalla chica, a los papeles de “niña buena” y las grabaciones eternas en foros. Simplemente se dio la media vuelta y abandonó lo que parecía una prometedora carrera como figura de telenovelas para adentrarse en lo que ha sido su gran pasión desde entonces: El cine. Eso sí, ella niega estar casada con el Séptimo Arte. “Lo que busco son buenos papeles”, asegura con voz suave.
La actriz recién visitó Guadalajara, para acompañar a la directora Kenya Márquez y el resto del elenco (Damián Alcázar y Ana Ofelia Murguia, entre otros) a la presentación de la cinta "Fecha de caducidad", trama de humor negro que ha logrado buenas opiniones, además de ganar reconocimientos en las fiestas fílmicas de Morelia (Premio del Público) y Guadalajara (de la Academia Jalisciense de Cinematografía).
“Siempre que un grupo de jurados te da un premio en un festival se agradece”, afirma la actriz, quien agrega que este tipo de reconocimientos deben tomarse con mesura. “A final de cuentas una película está hecha más para el público y no tanto para darle gusto a la crítica especializada. Yo soy de la idea de que lo más importante para un productor, director o actor, es lograr que la gente se conecte con algo emocional, donde el espectador se pueda proyectar, pasarla bien, sufrir, llorar”.
Trotamundos
“Siempre es bueno tener un lugar para poder presentar tu trabajo, porque ayuda a que otro tipo de público pueda conocer la película y además de que Fecha… está en su etapa de gira de festivales”, afirma Marisol, quien tiene la maleta lista en todo momento, porque sabe que ya sea para actuar o para promover una película, la vida del actor transcurre la mitad en el avión o camión y la otra mitad en el set de filmación. Por ejemplo, de la Perla Tapatía partió a Miami para presentar el largometraje, y luego “a otros lugares, porque no han dejado de surgir invitaciones”.
A la par del filme de Márquez, la actriz presume su trabajo en la serie de Canal Once XY, a la que se sumó con un papel especial. “El elenco base ya estaba bien integrado, pero me encantó ser parte de este proyecto, porque es una serie que yo ya veía, que me gusta, y ser parte de una producción así siempre es un agasajo”.
Con su participación en XY, Centeno derrumba el mito de que no volvería a la pantalla chica. “Hay gente que me dice si abandone la tele. No. Creo que más bien es como se ha ido dando la chamba. Me gustó lo que hice en XY y creo que la pantalla chica está abriendo posibilidades a los artistas y más opciones al público”.
Eso sí, siempre va a preferir los proyectos que sean sólidos y, sobre todo, que se ajusten a su variable agenda cinematográfica. “Tengo cuatro películas en puerta, pero no tengo bien claro la fecha de inicio de ninguna. Para bien o para mal dependemos mucho de cómo suelten los presupuestos Fidecine o Foprocine, entonces estoy en esa etapa de ajustes”.
Marisol tendrá que esperar hasta el mes de abril para saber cómo ajustará su calendario, y confiesa que lo único que le consta es que es probable que todas las películas se filmen en México, aunque en su horizonte se asoma una coproducción entre nuestro país, España y Rusia “porque en ese caso el director es europeo, pero fuera de eso, nada”.
La incertidumbre no le borra la sonrisa. Ella está feliz con la decisión que tomó hace años, cuando puso “pausa” a las telenovelas y encendio el proyector de cine, donde ahora se siente mejor.
El ego, bajo control
Con los ojos cerrados
“Creo que todos los actores, con los egos que tenemos, sufrimos mucho viendo nuestro trabajo (risas), bueno, por lo menos ése es mi caso”. Así habla Marisol Centeno de la dura experiencia que puede resultar para un histrión ver su propia imagen en pantalla.
La actriz asegura que ya vio varias veces "Fecha de caducidad", por lo que este “sufrimiento” poco a poco va disminuyendo, aunque eso no significa que ya se haya ido del todo. “Siempre nos encontramos cosas que decimos ‘me hubiera movido mejor así o hubiera dicho esto de otra forma’. Soy muy crítica con mi trabajo y siempre trato de aprender de lo que veo bien o mal. Las primeras funciones de todas mis películas no las disfruto tanto porque me encuentro cosas de lo que sea (risas)”.
Centeno anota que tampoco se azota con un látigo por su trabajo, porque “sí, me critico mucho, pero con el ánimo de mejorar en cada proyecto”.
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