Entretenimiento
Mala Rodríguez presenta nuevo álbum
La artista de 31 años disfruta de la simplicidad de su casa y de las tareas domésticas
MIAMI, FLORIDA (13/OCT/2010).- La inspiración puede llegar en cualquier momento, pero la rapera española Mala Rodríguez está convencida de que la tranquilidad de su casa la ayuda a atraer los “fantasmas” que le dictan melodías y canciones.
“En el lavadero me la paso muy bien. Cuando estoy lavando y doblando la ropa me inspiro”, manifestó Rodríguez en una entrevista realizada en Miami.
“Me gusta porque me siento sola, y es ahí cuando normalmente me vienen los fantasmas y me dicen las cosas”, expresó la cantautora andaluza.
Lejos de las luces de los escenarios, de los ruidos y las multitudes, la artista de 31 años disfruta de la simplicidad de su casa y de las tareas domésticas. “Me parece que cuidar de tu entorno es lo mejor que hay y no hay nada como valorar eso mismo, el hacer un café, el preparar una comida y que la gente que la coma diga ‘qué rico’, o tener linda tu casa”, manifestó Mala, cuyo verdadero nombre es María Rodríguez.
“No me parece para nada una tarea horrible y desagradable. Es puro agradecimiento a la vida. Me encanta, disfruto mucho estando en casa”, dijo minutos después de haber pedido a los técnicos que prepararon el estudio de la entrevista que quitaran una luz lila porque le recordaba a las telenovelas.
Mujer introspectiva
De hablar pausado y mirada fija, Rodríguez aseguró que su más reciente álbum, Dirty bailarina, representa un cambio con respecto a sus tres discos anteriores.
“He tomado conciencia de muchas cosas, y de alguna manera la mirada no está tan hacia afuera sino que está más hacia adentro”, dijo la cantante, que se describe como una mujer introspectiva, observadora, variable, lunática, familiar e impulsiva.
El nombre del disco, producido por DJ Griffi y Focus, evoca a una persona que se ensucia haciendo su arte, explicó.
“La bailarina, tan bella y exquisita, con toda esa suciedad, que quieras o no nos rodea siempre en algunos momentos”, explicó Rodríguez, que en la portada del álbum aparece sentada como mirándose a sí misma, hacia abajo.
El dato
La producción debutó en marzo en España, se lanzó a finales de septiembre en Argentina, Colombia y México y llegó a Estados Unidos en octubre de manera digital. Está postulada al Latin Grammy al Mejor álbum urbano, y su tema No pidas perdón a Mejor canción urbana.
“En el lavadero me la paso muy bien. Cuando estoy lavando y doblando la ropa me inspiro”, manifestó Rodríguez en una entrevista realizada en Miami.
“Me gusta porque me siento sola, y es ahí cuando normalmente me vienen los fantasmas y me dicen las cosas”, expresó la cantautora andaluza.
Lejos de las luces de los escenarios, de los ruidos y las multitudes, la artista de 31 años disfruta de la simplicidad de su casa y de las tareas domésticas. “Me parece que cuidar de tu entorno es lo mejor que hay y no hay nada como valorar eso mismo, el hacer un café, el preparar una comida y que la gente que la coma diga ‘qué rico’, o tener linda tu casa”, manifestó Mala, cuyo verdadero nombre es María Rodríguez.
“No me parece para nada una tarea horrible y desagradable. Es puro agradecimiento a la vida. Me encanta, disfruto mucho estando en casa”, dijo minutos después de haber pedido a los técnicos que prepararon el estudio de la entrevista que quitaran una luz lila porque le recordaba a las telenovelas.
Mujer introspectiva
De hablar pausado y mirada fija, Rodríguez aseguró que su más reciente álbum, Dirty bailarina, representa un cambio con respecto a sus tres discos anteriores.
“He tomado conciencia de muchas cosas, y de alguna manera la mirada no está tan hacia afuera sino que está más hacia adentro”, dijo la cantante, que se describe como una mujer introspectiva, observadora, variable, lunática, familiar e impulsiva.
El nombre del disco, producido por DJ Griffi y Focus, evoca a una persona que se ensucia haciendo su arte, explicó.
“La bailarina, tan bella y exquisita, con toda esa suciedad, que quieras o no nos rodea siempre en algunos momentos”, explicó Rodríguez, que en la portada del álbum aparece sentada como mirándose a sí misma, hacia abajo.
El dato
La producción debutó en marzo en España, se lanzó a finales de septiembre en Argentina, Colombia y México y llegó a Estados Unidos en octubre de manera digital. Está postulada al Latin Grammy al Mejor álbum urbano, y su tema No pidas perdón a Mejor canción urbana.
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