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Lupita D’Alessio, como en casa

La artista presenta sus mejores éxitos de la mano de su hijo Ernesto, quien por primera vez se presenta en un Palenque

GUADALAJARA, JALISCO.- Las canciones de Lupita D’Alessio podrán tacharse de muchas maneras, menos de falsas. Esa autenticidad convierte a la apodada “Leona dormida” en una mujer vulnerable sobre el escenario, aunque esto sea paradójico.

Y es que la dureza con la que le canta a los hombres tiene como contraste lo solidaria que llega a ser con otros, como las que ayer en la madrugada fueron palenque de las Fiestas de Octubre, que vivió una velada de “duro contra ellos”.

Ante una regular entrada, que apenas rebasó la mitad la capacidad del recinto, la cantante nativa de Tijuana demostró porqué es considerada como una de las mejores voces de la escena nacional. Con un vestido negro entallado, se paseó por la plataforma de luces y de inmediato sacó la “artillería pesada” de temas como Mudanzas, Mentiras, Te pareces tanto a mí, Qué ganas de no verte nunca más, Ese hombre y otras con la que sus fanáticas corearon con una mezcla de alegría y coraje.

Tras una hora de interpretar varios de sus éxitos, la cantante se despidió, para que al filo de la una de la madrugada su hijo Ernesto D’Alessio de apoderara del escenario.

Y aunque el joven hijo de la cantante ha construido sus tablas musicales en el teatro, la experiencia del Palenque parece que todavía es algo que deberá perfeccionar, en especial si canta con su mamá, que le dejó un escenario erizado por temas de desamor, traiciones y venganzas y que el cantante retomó con canciones más “ligeras”, aunque su tema de despedida fue el cover de El triste, original de José José.

Lupita regresó después, agradeció al público su paciencia y fidelidad, regalando como despedida un popurrí de temas, aunque destacó la interpretación completa de Mudanzas, con la que logró una ovación de pie.

Buenos recuerdos


Previo al recital, Lupita y Ernesto D’Alessio se encontraron con los medios. Allí, la interprete afirmó que Guadalajara es una ciudad que tiene un lugar muy especial en su corazón, pues “aquí pasé las mejores vacaciones de mi vida, tres años en los que viví por la Calzada Independencia, a la altura del Estadio Jalisco”, cosa que recordó posteriormente en el show, agregando un “arriba el Atlas”.

La cantante destacó que su salud ha mejorado a causa de una serie de dietas y disciplina de ejercicio a los que se ha sometido en los últimos meses. En ese sentido, señaló que no se someterá a ninguna operación para mejorar su apariencia, y envío sus mejores deseos a su colega Alejandra Guzmán.

Por su lado, Ernesto señaló que la presentación del domingo por la madrugada en el Palenque de las Fiestas de Octubre marca la primera de lo que será la gira al lado de su madre, un proyecto que por diversas razones no se había dado en el pasado, y apuntó que esto abre una etapa llena de sorpresas para ambos. Lo cierto es que a lo largo del show cada uno tuvo su espacio, por lo que no hubo lugar para ningún dueto.
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