Entretenimiento
“Los grabados tienen magia”, Cornelio García
El Museo de la Ciudad ofrece un recorrido por 40 años de trayectoria artística del grabador, músico y promotor cultural.
GUADALAJARA.- Tal vez cuando hacía sus primeros dibujos en un cuaderno, recostado sobre la cama de su cuarto en Tenamaxtlán,
Cornelio García no sabía que en el futuro se convertiría en grabador; quizá fue hasta que un par de profesores en Los Ángeles comenzaron a alentarlo, que empezó a ver el arte como una forma de vida.
Lo cierto es que desde chico desarrolló un gusto especial por el dibujo, la pintura, el color y la música; incluso cuenta que su primer concierto lo dio a los 11 años en el traslado hacia la frontera, el nuevo hogar que lo encaminaría hacia lo que es hoy: un grabador de hueso colorado, amante profundo de ése al que se considera el “patito feo de las artes plásticas”, pero además, un incansable promotor de la música tradicional y la riqueza cultural de los pueblos jaliscienses.
Aunque sus primeros años en la plástica hayan sido en el expresionismo abstracto, copiando obras de pintores como Franz Klein -“me estaba fusilando a los abstractos, puros bueno”, recuerda-, poco a poco fue encontrando su propio camino, retomando las imágenes de su niñez: “si vives a los 10 años tragedias, no te queda más que expresarlas, aunque sea a través del dibujo”.
Pero la obra de Cornelio García es mucho más rica, está cargada de emociones y aunque no tengan todas las piezas elementos de color, sí hay un sinfín de historias y viajes que se captan al ponerse frente a cada cuadro.
“Los grabados no tienen color, pero tienen magia. El grabado es tan maravilloso y poético que no lo puedes describir”, advierte García y añade que aunque la gráfica siga siendo el “patito feo”, ha jugado un papel muy importante en la plástica.
Honores
Es por esa fuerza como artista plástico que el Museo de la Ciudad (Independencia 684) ha decidido rendirle un homenaje por más de 40 años de trayectoria, con la exposición Tiempos que se fueron, que se inaugura este viernes a las 20:30 horas, y en la que se exhiben 45 grabados que atraviesan diversas etapas en la creación del artista, desde 1965 hasta 2008.
Patricia Urzúa, directora del espacio museográfico, detalla que además se dará cabida a otra faceta de Cornelio García: la de músico, pues durante la apertura de la muestra -que permanecerá en exhibición durante dos meses y medio- estará el Mariachi Tradicional Arredondo, agrupación a la que pertenece el también promotor cultural.
La recomendación de Cornelio García es llegar puntual, pues apenas hayan pasado 30 minutos después de las ocho de la noche, se comenzará con la velada musical que concluirá una hora después, pues uno de los músicos tiene un compromiso y debe marcharse.
Lo cierto es que desde chico desarrolló un gusto especial por el dibujo, la pintura, el color y la música; incluso cuenta que su primer concierto lo dio a los 11 años en el traslado hacia la frontera, el nuevo hogar que lo encaminaría hacia lo que es hoy: un grabador de hueso colorado, amante profundo de ése al que se considera el “patito feo de las artes plásticas”, pero además, un incansable promotor de la música tradicional y la riqueza cultural de los pueblos jaliscienses.
Aunque sus primeros años en la plástica hayan sido en el expresionismo abstracto, copiando obras de pintores como Franz Klein -“me estaba fusilando a los abstractos, puros bueno”, recuerda-, poco a poco fue encontrando su propio camino, retomando las imágenes de su niñez: “si vives a los 10 años tragedias, no te queda más que expresarlas, aunque sea a través del dibujo”.
Pero la obra de Cornelio García es mucho más rica, está cargada de emociones y aunque no tengan todas las piezas elementos de color, sí hay un sinfín de historias y viajes que se captan al ponerse frente a cada cuadro.
“Los grabados no tienen color, pero tienen magia. El grabado es tan maravilloso y poético que no lo puedes describir”, advierte García y añade que aunque la gráfica siga siendo el “patito feo”, ha jugado un papel muy importante en la plástica.
Honores
Es por esa fuerza como artista plástico que el Museo de la Ciudad (Independencia 684) ha decidido rendirle un homenaje por más de 40 años de trayectoria, con la exposición Tiempos que se fueron, que se inaugura este viernes a las 20:30 horas, y en la que se exhiben 45 grabados que atraviesan diversas etapas en la creación del artista, desde 1965 hasta 2008.
Patricia Urzúa, directora del espacio museográfico, detalla que además se dará cabida a otra faceta de Cornelio García: la de músico, pues durante la apertura de la muestra -que permanecerá en exhibición durante dos meses y medio- estará el Mariachi Tradicional Arredondo, agrupación a la que pertenece el también promotor cultural.
La recomendación de Cornelio García es llegar puntual, pues apenas hayan pasado 30 minutos después de las ocho de la noche, se comenzará con la velada musical que concluirá una hora después, pues uno de los músicos tiene un compromiso y debe marcharse.
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