Entretenimiento
Loret brinca del periodismo a los documentales
¡De panzazo! hace un análisis de la realidad que enfrentan alumnos, maestros y políticos en cuestiones de aprendizaje
MORELIA (23/OCT/2011).- La educación es la base de todas las virtudes que puede tener una nación, pero también puede ser el origen de todos sus problemas. Ésa fue la lógica que motivó a Carlos Loret de Mola y a Juan Carlos Rulfo para dar forma al documental ¡De panzazo!, una radiografía cruda que expone las carencias y deficiencias del sistema de enseñanza en México, centrándose en tres grandes protagonistas de la problemática: estudiantes, maestros y padres de familia.
¡De panzazo! había presentado hace un año una primera versión del documental en el Festival Internacional de Cine de Morelia y ayer sábado regresó al mismo foro para proyectar un versión, que sin ser la definitiva, expone los puntos esenciales que Rulfo y Loret buscaron tocar en este proyecto.
Aunque más conocido por su trabajo en televisión como conductor de Primero Noticias, Loret confesó que el trabajar en el documental le abrió varias puertas. “El salto del periodismo al documental me resultó ciertamente muy extraño, casi como un salto al vacío, pero a la vez con un muy buen paracaídas que fue Juan Carlos Rulfo y un maravilloso equipo de edición”.
Durante la cinta, Juan Carlos Rulfo le dio cámaras a varios niños para que grabaran lo que sucede en en salón en secreto. Las tomas muestran regaños y apatía de los maestros, así como el desorden de los propios estudiantes, quienes muchas veces deben estudiar en aulas en malas condiciones. “Las partes que más me gustan de la película son las que no hicimos nosotros. Las cámaras que metieron los alumnos muestran el corazón de los salones de clases en México”, señala Loret, quien explica que ha visto “más de 100 veces el documental y me sigue dando risas y escalofrío”.
Asume el reto
Carlos Loret explicó durante una charla con los medios de comunicación que “tenía la inquietud de hacer una película, veía que otros admirados colegas lo habían hecho y me resultaba muy atractivo no tener que combatir contra el entorno de un noticiero, donde la gente desayuna, come, se prepara para ir a trabajar y en realidad no te pone atención. En cambio en el cine sé que no habrá ningún factor que distraiga a la gente, y eso hace que el mensaje llegue de forma mucho más clara”.
¡De panzazo!, que llegará a los cines en febrero del próximo año, tomó “tres años de trabajo continuo”, señaló Juan Carlos Rulfo, quien agregó que el oficio que hay en un documental es maravilloso, porque te permite meterte en la cabeza y en la casa de cualquier persona, así como lo hicimos entrando en lugares difíciles como las casas y escuelas. Tenemos 250 horas de rodaje, sin contar que nos tomó un año de calificación y de edición todo el material”.
Por su parte, David Calderón, uno de los productores de la obra, señalo que con ¡De panzazo! “tenemos un punto de partida para discutir la responsabilidad que tenemos todos en la educación de nuestro país. Con este proyecto se trató de ponerle rostro a la situación de la educación en México, darle voz a las historias de estos muchachos y maestros”.
El equipo de producción del documental señaló que la película “no ataca a los maestros, sino que señala lo inservible que es actualmente el sistema bajo el que laboran y que no permite que a los buenos se les premie, ni castigue a los que no son útiles”.
EL INFORMADOR / Juan Francisco González Rodríguez
''El oficio que hay en un documental es maravilloso, porque te permite meterte en la cabeza y en la casa de cualquier persona.''
Juan Carlos Rulfo, director de cine documental.
''Las cámaras que metieron los alumnos (a las aulas) muestran el corazón de los salones de clases en México.''
Carlos Loret de Mola, periodista.
¡De panzazo! había presentado hace un año una primera versión del documental en el Festival Internacional de Cine de Morelia y ayer sábado regresó al mismo foro para proyectar un versión, que sin ser la definitiva, expone los puntos esenciales que Rulfo y Loret buscaron tocar en este proyecto.
Aunque más conocido por su trabajo en televisión como conductor de Primero Noticias, Loret confesó que el trabajar en el documental le abrió varias puertas. “El salto del periodismo al documental me resultó ciertamente muy extraño, casi como un salto al vacío, pero a la vez con un muy buen paracaídas que fue Juan Carlos Rulfo y un maravilloso equipo de edición”.
Durante la cinta, Juan Carlos Rulfo le dio cámaras a varios niños para que grabaran lo que sucede en en salón en secreto. Las tomas muestran regaños y apatía de los maestros, así como el desorden de los propios estudiantes, quienes muchas veces deben estudiar en aulas en malas condiciones. “Las partes que más me gustan de la película son las que no hicimos nosotros. Las cámaras que metieron los alumnos muestran el corazón de los salones de clases en México”, señala Loret, quien explica que ha visto “más de 100 veces el documental y me sigue dando risas y escalofrío”.
Asume el reto
Carlos Loret explicó durante una charla con los medios de comunicación que “tenía la inquietud de hacer una película, veía que otros admirados colegas lo habían hecho y me resultaba muy atractivo no tener que combatir contra el entorno de un noticiero, donde la gente desayuna, come, se prepara para ir a trabajar y en realidad no te pone atención. En cambio en el cine sé que no habrá ningún factor que distraiga a la gente, y eso hace que el mensaje llegue de forma mucho más clara”.
¡De panzazo!, que llegará a los cines en febrero del próximo año, tomó “tres años de trabajo continuo”, señaló Juan Carlos Rulfo, quien agregó que el oficio que hay en un documental es maravilloso, porque te permite meterte en la cabeza y en la casa de cualquier persona, así como lo hicimos entrando en lugares difíciles como las casas y escuelas. Tenemos 250 horas de rodaje, sin contar que nos tomó un año de calificación y de edición todo el material”.
Por su parte, David Calderón, uno de los productores de la obra, señalo que con ¡De panzazo! “tenemos un punto de partida para discutir la responsabilidad que tenemos todos en la educación de nuestro país. Con este proyecto se trató de ponerle rostro a la situación de la educación en México, darle voz a las historias de estos muchachos y maestros”.
El equipo de producción del documental señaló que la película “no ataca a los maestros, sino que señala lo inservible que es actualmente el sistema bajo el que laboran y que no permite que a los buenos se les premie, ni castigue a los que no son útiles”.
EL INFORMADOR / Juan Francisco González Rodríguez
''El oficio que hay en un documental es maravilloso, porque te permite meterte en la cabeza y en la casa de cualquier persona.''
Juan Carlos Rulfo, director de cine documental.
''Las cámaras que metieron los alumnos (a las aulas) muestran el corazón de los salones de clases en México.''
Carlos Loret de Mola, periodista.
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