Entretenimiento
Lloran las 'nenas' en Argentina por la muerte de Sandro de América
Sandro convirtió en clásicos canciones como 'Dame fuego', 'Rosa, Rosa', 'Ese es mi amigo el puma' y 'Porque yo te amo'
Sandro, quien fuera una leyenda del rock en América Latina, murió hoy a los 64 años luego de que su cuerpo no resistiera el trasplante de corazón y pulmones al que fue sometido el pasado 20 de noviembre.
La muerte de Roberto Sánchez, su verdadero nombre, desató una conmoción en Argentina, ya que era uno de sus artistas populares vivos más queridos y admirados, incluso por rockeros de las nuevas generaciones.
A lo largo de su exitosa carrera, Sandro convirtió sus eróticos movimientos en el escenario en un sello personal que enloqueció durante décadas a miles de mujeres que siempre, sin importar el paso de los años, se mantuvieron como sus fieles admiradoras.
'Mis nenas', así bautizó el cantante a las fervientes fanáticas que fueron envejeciendo con él y que cada 19 de agosto iban a su casa a desearle feliz cumpleaños y a recordar la época dorada de los conciertos en los que le aventaban ropa interior al escenario.
Con interpretaciones exageradas y a veces cargadas de dramatismo, Sandro convirtió en clásicos canciones como 'Dame fuego', 'Rosa, Rosa', 'Ese es mi amigo el puma' y 'Porque yo te amo'.
El 'Elvis de América', como también fue conocido, vendió ocho millones de copias de sus 52 discos y se convirtió también en un ídolo de la pantalla a través de 16 películas en las que se consolidó como el galán más importante de su época.
Este éxito no se lo pudo haber imaginado Roberto Sánchez cuando a fines de la década de los 50, siendo adolescente, se bautizó artísticamente como Sandro, nombre que a sus padres no les permitieron registrar cuando nació porque no era 'cristiano'.
Bajo la influencia del rock estadunidense, este joven nacido en 1945 tuvo un breve comienzo musical como solista, pero a principios de los 60 formó la banda Sandro y Los de Fuego, y desató el furor con sus interpretaciones cargadas de erotismo.
Luego de impulsar el rock argentino, el cantante retomó a fines de la década su carrera individual y modificó su estilo para avocarse a la balada romántica, aunque nunca abandonó su estilo provocativo y abiertamente sexual arriba del escenario.
En los años 70, vio aumentar su popularidad con las películas 'Gitano' y 'Muchacho', y en abril de ese año hizo historia al convertirse en el primer artista latino en actuar y llenar el mítico Madison Square Garden de Nueva York.
Sandro grabó su último álbum en 1980, pero siguió dando conciertos a sala llena en Buenos Aires hasta que en 2004 ya no pudo más, afectado por una enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
Este fue el caro precio que tuvo que pagar el artista por una adicción que lo llevó a fumar 60 cigarros por día y que, incluso, lo obligó a cantar acompañado de un respirador artificial.
Enfermo, Sandro eligió llevar una vida discreta en su casa de Banfield, un popular barrio de Buenos Aires, pero el 13 de abril de 2007 sorprendió a todos al casarse, por primera vez a los 61 años, con Olga, la ex secretaria de su representante.
Desde entonces su enfermedad se agudizó y el año pasado la dependencia oficial encargada de los transplantes en Argentina confirmó que Sandro estaba en lista de espera de un corazón y dos pulmones para poder vivir.
Luego del trasplante al que se sometió el 20 de noviembre, los médicos se mostraron optimistas, pero el artista comenzó a sufrir una serie de altibajos, con traqueotomías de emergencias y neumonías intermitentes que al final no pudo superar.
BUENOS AIRES, ARGENTINA.- El cantante argentino
La muerte de Roberto Sánchez, su verdadero nombre, desató una conmoción en Argentina, ya que era uno de sus artistas populares vivos más queridos y admirados, incluso por rockeros de las nuevas generaciones.
A lo largo de su exitosa carrera, Sandro convirtió sus eróticos movimientos en el escenario en un sello personal que enloqueció durante décadas a miles de mujeres que siempre, sin importar el paso de los años, se mantuvieron como sus fieles admiradoras.
'Mis nenas', así bautizó el cantante a las fervientes fanáticas que fueron envejeciendo con él y que cada 19 de agosto iban a su casa a desearle feliz cumpleaños y a recordar la época dorada de los conciertos en los que le aventaban ropa interior al escenario.
Con interpretaciones exageradas y a veces cargadas de dramatismo, Sandro convirtió en clásicos canciones como 'Dame fuego', 'Rosa, Rosa', 'Ese es mi amigo el puma' y 'Porque yo te amo'.
El 'Elvis de América', como también fue conocido, vendió ocho millones de copias de sus 52 discos y se convirtió también en un ídolo de la pantalla a través de 16 películas en las que se consolidó como el galán más importante de su época.
Este éxito no se lo pudo haber imaginado Roberto Sánchez cuando a fines de la década de los 50, siendo adolescente, se bautizó artísticamente como Sandro, nombre que a sus padres no les permitieron registrar cuando nació porque no era 'cristiano'.
Bajo la influencia del rock estadunidense, este joven nacido en 1945 tuvo un breve comienzo musical como solista, pero a principios de los 60 formó la banda Sandro y Los de Fuego, y desató el furor con sus interpretaciones cargadas de erotismo.
Luego de impulsar el rock argentino, el cantante retomó a fines de la década su carrera individual y modificó su estilo para avocarse a la balada romántica, aunque nunca abandonó su estilo provocativo y abiertamente sexual arriba del escenario.
En los años 70, vio aumentar su popularidad con las películas 'Gitano' y 'Muchacho', y en abril de ese año hizo historia al convertirse en el primer artista latino en actuar y llenar el mítico Madison Square Garden de Nueva York.
Sandro grabó su último álbum en 1980, pero siguió dando conciertos a sala llena en Buenos Aires hasta que en 2004 ya no pudo más, afectado por una enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
Este fue el caro precio que tuvo que pagar el artista por una adicción que lo llevó a fumar 60 cigarros por día y que, incluso, lo obligó a cantar acompañado de un respirador artificial.
Enfermo, Sandro eligió llevar una vida discreta en su casa de Banfield, un popular barrio de Buenos Aires, pero el 13 de abril de 2007 sorprendió a todos al casarse, por primera vez a los 61 años, con Olga, la ex secretaria de su representante.
Desde entonces su enfermedad se agudizó y el año pasado la dependencia oficial encargada de los transplantes en Argentina confirmó que Sandro estaba en lista de espera de un corazón y dos pulmones para poder vivir.
Luego del trasplante al que se sometió el 20 de noviembre, los médicos se mostraron optimistas, pero el artista comenzó a sufrir una serie de altibajos, con traqueotomías de emergencias y neumonías intermitentes que al final no pudo superar.
Síguenos en