Entretenimiento
'Little Boy', cine para sanar las heridas
Eduardo Verástegui habla sobre cómo llegó a involucrarse en esta película
GUADALAJARA, JALISCO (08/MAY/2015).-
Eduardo Verástegui confiesa que se hizo productor de cine cuando los proyectos que le caían a sus manos no le llenaban por completo y así fue que se asoció con Alejandro Monteverde (director) para crear una compañía de la que primero salió "Bella" y ahora el siguiente filme, "Little Boy" que se estrena este 15 de mayo en las salas mexicanas.
"Cuando termino la gira de la película 'Bella', estaba buscando con lupa cuál sería mi siguiente producción y no encontraba nada que me convenciera o que me llenara, hasta que llegó Alejandro Monteverde y Pepe Portillo, los guionistas de 'Gran pequeño' y cuando me muestran el guión, me conmueve, me toca, me enciende, me prende, me hace llorar y me prende el corazón y ahí me quedó claro que mi siguiente película sería 'Little Boy'".
La cinta ofrece una mirada al bullying, la discriminación y el odio, aspectos que Verástegui quiso mostrar en una película esperanzadora donde la fe mueve montañas, un cine que sane las heridas, que no divida.
"Y (hacer) está película fue un reto muy interesante porque es una cinta de época, de la Segunda Guerra Mundial, construir un set de cero, un pueblito... Todo eso iba a salir y muy caro y además un niño de siete años para que esto fuera ya imposible, sin embargo había una voz que me decía que mejor hiciera otro proyecto, 'consigue un guión más moderno, una película más sencilla', porque recaudar fondos como cineasta independiente es muy difícil".
La cinta costó 26 millones de dólares y en ella Eduardo también hace una participación especial como "El padre Crispín", un sacerdote que encenderá la llama de "Little Boy" por creer y saber que los sueños se pueden lograr, pues el de él es que su padre regrese de la guerra.
"Esta película nos habla de soñar con lo imposible, así es me dije: 'me voy a tirar de las montañas si alas para ver hasta donde llego' y bueno, siete meses de tocar puertas en diferentes partes de México di con familias que dieron en el proyecto y gracias a ellos ya nuestros inversionistas la película existe y puede ver la luz del día".
EL INFORMADOR / KIKE ESPARZA
"Cuando termino la gira de la película 'Bella', estaba buscando con lupa cuál sería mi siguiente producción y no encontraba nada que me convenciera o que me llenara, hasta que llegó Alejandro Monteverde y Pepe Portillo, los guionistas de 'Gran pequeño' y cuando me muestran el guión, me conmueve, me toca, me enciende, me prende, me hace llorar y me prende el corazón y ahí me quedó claro que mi siguiente película sería 'Little Boy'".
La cinta ofrece una mirada al bullying, la discriminación y el odio, aspectos que Verástegui quiso mostrar en una película esperanzadora donde la fe mueve montañas, un cine que sane las heridas, que no divida.
"Y (hacer) está película fue un reto muy interesante porque es una cinta de época, de la Segunda Guerra Mundial, construir un set de cero, un pueblito... Todo eso iba a salir y muy caro y además un niño de siete años para que esto fuera ya imposible, sin embargo había una voz que me decía que mejor hiciera otro proyecto, 'consigue un guión más moderno, una película más sencilla', porque recaudar fondos como cineasta independiente es muy difícil".
La cinta costó 26 millones de dólares y en ella Eduardo también hace una participación especial como "El padre Crispín", un sacerdote que encenderá la llama de "Little Boy" por creer y saber que los sueños se pueden lograr, pues el de él es que su padre regrese de la guerra.
"Esta película nos habla de soñar con lo imposible, así es me dije: 'me voy a tirar de las montañas si alas para ver hasta donde llego' y bueno, siete meses de tocar puertas en diferentes partes de México di con familias que dieron en el proyecto y gracias a ellos ya nuestros inversionistas la película existe y puede ver la luz del día".
EL INFORMADOR / KIKE ESPARZA
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