Entretenimiento
La paternidad sacude a Julio Camejo
El actor agradece la hospitalidad que México le ha brindado y desea que su hijo nazca en el país
Mientras tanto, el feliz padre sigue en México trabajando en la obra teatral Perfume de Gardenia y simultáneamente en su carrera musical, con la que lleva una serie de presentaciones en el país y en verano próximo estará lanzando su nuevo disco de música urbana.
En lo que respecta al montaje de cabaret, que este fin de semana se presentó en Guadalajara, Camejo interpreta a un personaje homosexual espontáneo y divertido, Freddy, a quien ya tiene más de un año dando vida y cosechando cuantiosas risas y cálidos aplausos.
— ¿Tienes alguna costumbre antes de subir al escenario?
— Cuando estaba más chamaco le pedía a Dios que me acompañara a cada cosa que hacía, a medida que fui creciendo te das cuenta que hay gente que le faltan muchas cosas y uno pide por cosas que a veces son innecesarias y, desde entonces, cada vez que voy a dar una función, cada vez que voy a dar un concierto o a entrar en escena, miro pa’ arriba, le doy agracias a Dios por darme la oportunidad y le digo “mírame bien porque voy a dar mi mejor esfuerzo” y más que pedirle, se lo dedico.
— En este año y medio que llevas en la obra ¿te ha enseñado algo “Freddy”?
— Es un personaje muy arriesgado porque no tenía un punto de partida, mi educación fue en Cuba y había una discriminación férrea contra los homosexuales. Cuando comencé a abordar este personaje me di cuenta que tenía muchas barreras de todo, pero empecé a trabajar en ello y ahora me siento mejor dándole vida.
— ¿Qué tanto han cambiado tus planes con la noticia de que vas a ser papá?
— Todo y nada, porque finalmente sigo siendo la misma persona, pero ya con otras aspiraciones, con otra manera de ver la vida, sigo viendo la vida desde el mismo punto de vista pero al mismo tiempo te cambian muchas cosas. Ahorita mi chica tiene cinco meses (…) cuando me dijo que estaba esperando un bebé mío, inconscientemente empecé a manejar mucho más despacio, a mirar cuatro veces al cruzar la calle, a frenar en todos los semáforos, cuando lo hice consciente le dije a mi papá “ahora te entiendo porque ya viene mi bebé”.
— Tu novia está en Brasil y tú en México, ¿dónde nacerá tu hija?
— Mi mujer quiere que nazca en Brasil pero yo estoy luchando porque sea aquí (en México). Cuba fue la tierra que me dio la vida, pero México fue el país que me hizo un hombre, que me ha dado todo lo que tengo, por el que soy lo que soy, creo que le debo mucho y trato día con día ser recíproco con ese cariño que me ha brindado.
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