Entretenimiento
La magia del clown invade al Diana
Presentan el espectáculo Slava's Snowshow, abriendo una temporada corta en la Perla Tapatía
GUADALAJARA, JALISCO (13/JUN/2013).- El espectáculo Slava's Snowshow es un evento consentido de los tapatíos, siempre que regresa genera sensaciones que nunca se fueron y que quedaron guardadas hasta el momento de encararse nuevamente entre ellos y los singulares personajes de la propuesta creativa del ruso Slava Polunin.
Y es que cuando la magia es la protagonista, difícilmente se puede olvidar una gala donde caben la aventura, los sueños, las tristezas y la amistad.
El arte del clown abrió abrió en el Teatro Diana una corta temporada que termina el próximo lunes, pero que cuenta con varias funciones.
La interacción con la audiencia fue la constante de la función. Los cuatro elementos de la naturaleza se mantuvieron durante la hora y media del espectáculo, el agua, el aire, el viento y la tierra provocaron una atmósfera de hermandad y ternura entre los siete payasos protagonistas y los espectadores, que estuvieron pendientes de cada uno de los movimientos de los místicos personajes.
También hubo tiempo para la melancolía y la soledad. Los payasos de mirada triste movían todos y cada uno de los sentimientos a su antojo, pero siempre desde la perspectiva del buen humor.
Las travesías por las que pasaban las peculiares figuras enfrentaban las tempestades del clima como la tormenta y la nieve, con música que inspiraba a la reflexión y a la sana convivencia.
Extrañas criaturas, telarañas, humo y movimientos sincronizados al compás de las melodías, formaban dinámicas de interpretación magistralmente hechas por parte del montaje escénico.
Finalizado el espectáculo los payasos salieron a dar las gracias soltando pelotas de colores, que el público las rebotaba con las manos; ellos, los estelares de la noche, se deleitaban viendo las emociones de los tapatíos al tomarse fotografías y compartir el instante con sus familiares y amigos.
EL INFORMADOR / ENRIQUE ESPARZA
Y es que cuando la magia es la protagonista, difícilmente se puede olvidar una gala donde caben la aventura, los sueños, las tristezas y la amistad.
El arte del clown abrió abrió en el Teatro Diana una corta temporada que termina el próximo lunes, pero que cuenta con varias funciones.
La interacción con la audiencia fue la constante de la función. Los cuatro elementos de la naturaleza se mantuvieron durante la hora y media del espectáculo, el agua, el aire, el viento y la tierra provocaron una atmósfera de hermandad y ternura entre los siete payasos protagonistas y los espectadores, que estuvieron pendientes de cada uno de los movimientos de los místicos personajes.
También hubo tiempo para la melancolía y la soledad. Los payasos de mirada triste movían todos y cada uno de los sentimientos a su antojo, pero siempre desde la perspectiva del buen humor.
Las travesías por las que pasaban las peculiares figuras enfrentaban las tempestades del clima como la tormenta y la nieve, con música que inspiraba a la reflexión y a la sana convivencia.
Extrañas criaturas, telarañas, humo y movimientos sincronizados al compás de las melodías, formaban dinámicas de interpretación magistralmente hechas por parte del montaje escénico.
Finalizado el espectáculo los payasos salieron a dar las gracias soltando pelotas de colores, que el público las rebotaba con las manos; ellos, los estelares de la noche, se deleitaban viendo las emociones de los tapatíos al tomarse fotografías y compartir el instante con sus familiares y amigos.
EL INFORMADOR / ENRIQUE ESPARZA
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