Entretenimiento
La Quinta Estación hace vibrar a su público
La banda consiguió que sus seguidores se convirtieran en fieles cómplices de una velada romántica
GUADALAJARA, JALISCO.- Más allá de la lluvia y del congestionamiento vial en los alrededores del Auditorio Telmex, y buena parte de La Zona Metropolitana, los fanáticos de la
Quinta Estación recordarán la noche de ayer sábado como un encuentro lleno de anécdotas, recuerdos y romance.
Con fuego y un ánimo por todo lo alto, Natalia Jiménez y Ángel Reyero convirtieron la húmeda noche tapatía en una travesía de pop y baladas románticas como parte de la gira Sin frenos.
“Es la primera vez que nos presentamos aquí, estamos muy nerviosos”, afirmó una delgada y sensual Natalia, que se movió con cadencia sobre el escenario, enfundada primero en un vestido muy corto que dejaba ver su bien torneada figura, mientras su compañero, el guitarrista Ángel, prefirió ser más discreto y efectivo.
Mención aparte es la que merece la vocalista ibérica, que saltó, animó y brindó porras al público, con la firme intención de que más que su coro, se convirtieran en sus cómplices. Y lo cierto es que su sonido caló fuerte con toques de rock, baladas sensuales, mariachi y hasta un coqueteo con la marimba veracruzana.
Trompetas, acordeones, efectos especiales, un juego de luces acorde a cada canción y la potencia vocal de Natalia fueron la constante a lo largo de temas como Qué te quería, Algo más, Daría, Niña, Flores de alquiler, Recuérdame, Tu peor error, El Sol no regresa y una de las más esperadas, Me muero.
Tras dos horas de música, Natalia agradeció la entrega del público asistente, y prometió que la banda volverá a la ciudad, para seguirlos transportando a su Quinta Estación.
* El detalle: Un breve homenaje que la banda hace a Michael Jackson, al tocar el guitarreo característico de la canción Beat It a la mitad del show.
Con fuego y un ánimo por todo lo alto, Natalia Jiménez y Ángel Reyero convirtieron la húmeda noche tapatía en una travesía de pop y baladas románticas como parte de la gira Sin frenos.
“Es la primera vez que nos presentamos aquí, estamos muy nerviosos”, afirmó una delgada y sensual Natalia, que se movió con cadencia sobre el escenario, enfundada primero en un vestido muy corto que dejaba ver su bien torneada figura, mientras su compañero, el guitarrista Ángel, prefirió ser más discreto y efectivo.
Mención aparte es la que merece la vocalista ibérica, que saltó, animó y brindó porras al público, con la firme intención de que más que su coro, se convirtieran en sus cómplices. Y lo cierto es que su sonido caló fuerte con toques de rock, baladas sensuales, mariachi y hasta un coqueteo con la marimba veracruzana.
Trompetas, acordeones, efectos especiales, un juego de luces acorde a cada canción y la potencia vocal de Natalia fueron la constante a lo largo de temas como Qué te quería, Algo más, Daría, Niña, Flores de alquiler, Recuérdame, Tu peor error, El Sol no regresa y una de las más esperadas, Me muero.
Tras dos horas de música, Natalia agradeció la entrega del público asistente, y prometió que la banda volverá a la ciudad, para seguirlos transportando a su Quinta Estación.
* El detalle: Un breve homenaje que la banda hace a Michael Jackson, al tocar el guitarreo característico de la canción Beat It a la mitad del show.
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