Entretenimiento
La Oreja de Van Gogh se enamora de la música
El quinteto español pisa tierras jaliscienses con bríos renovados y presentando A las cinco en el Astoria, su más reciente disco
GUADALAJARA, JALISCO.-
La Oreja de Van Gogh ha sobrevivido a lo que para muchos grupos sería una catástrofe descomunal. La salida de su vocalista por más de una década, Amaia Montero, presagiaba los peores temores para una banda: Se habían quedado afónicos.
Muchas agrupaciones no sobreviven sin su vocalista, un miembro que suele ser considerado como “el alma” de un conjunto musical. Entonces la pregunta es, ¿cómo logró una banda a punto de la disolución levantarse y salir de gira nuevamente?
Con una amplía sonrisa dibujada en el rostro, el quinteto formado en San Sebastián, España, despeja éstas y otras dudas durante una charla con EL INFORMADOR. Lejos de estar abatidos, se sienten recargados, con ellos ahora todo es novedad, con un nuevo disco llamado A las cinco en el Astoria, una nueva gira promocional y una nueva vocalista, Leire Martínez. El secreto, afirma Xavi, se resume en una idea: “Ser valientes, no dejar que las circunstancias nos superaran”. Pablo, Haritz y Álvaro asienten con la cabeza, saben que a La Oreja de Van Gogh todavía le quedan muchos lienzos musicales que pintar.
Hace un año se quedan sin vocalista, sin disco, sin gira, nada. ¿Cómo están ahora?
Xavi: “Ha sido un año completo, especial. Con la partida de Amaia decidimos que teníamos que continuar con el grupo. La amistad que nos une desde la Universidad a todos fue algo que no se perdió, todo eso sigue intacto, así que decidimos continuar. Las canciones ya estaban y Leire nos complementó cuando entró”.
¿A qué suena La Oreja de Van Gogh con “A las cinco en el Astoria”?
Xavi: “Mucha gente ahora nos dice que suena a nuestras raíces, a los primeros discos. Es algo que no nos esperábamos, especialmente si partimos del punto que ahora tenemos otra vocalista. Creo que nos hemos reencontrado con los principios esenciales del grupo y estas circunstancias adversas han hecho que tengamos que ponernos en ‘modo reto’, hemos vuelto a ser novatos”.
Pablo: “Cada canción que componíamos nos hacía sentir una obligación mayor a lanzar el disco. Era la munición que necesitábamos para seguir adelante”.
Si en la Oreja de Van Gogh se sienten como novatos con más de 10 años de carrera se debe especialmente a ti Leire, pero ¿tú cómo te sientes con ellos?
Leire: “Siento que ellos se han vuelto locos (risas). Soy muy afortunada de que entre toda la gente que audicionó fuera yo la elegida. No fue algo buscado, vino un poco caído del cielo, con casualidad, me siento privilegiada, además de que me tratan increíble, soy la niña mimada (risas)”.
En la respuesta mencionas que esta oportunidad fue como ‘caída del cielo’, a pesar de que tienes tablas, participaste en un “reality show” en España y venciste en un cásting a otras aspirantes, ¿le darías crédito a la suerte?
Leire: “Es complicado. El destino no fabrica talento…”
Xavi: “Perdón que me meta. Hay una frase que dice ‘la suerte es para aquellos que no la necesitan’, creo que eso le sucede a Leire”.
Leire: “Sí, ‘se nace o se hace’ sería otra. Y yo se que no soy la que mejor cantó en el cásting ni la más guapa, creo que reunía los elementos que hacían falta, ellos buscaban a alguien que entendiera la filosofía de grupo”.
Pablo: “Cuando comenzamos a buscar a una nueva vocalista, francamente no sabíamos cómo hacerlo. Una cosa llevó a la otra. Leire canta muy bien, pero además tiene un plus de interpretación, la forma en que trabaja nos permitía volver a ser cinco personas, no tener a una cantante que trabajara por hora. La clave para que ella esté con nosotros no fue una, sino 100 millones”.
Cuando sale Amaia se manejan muchas teorías de por qué se iba, y luego se empezó a hablar de muchas posibles sustitutas, incluyendo el nombre de Paulina Rubio…
Xavi: “Sí hombre, eso fue hasta divertido (lo de Paulina), hasta gracioso resulta. La verdad es que los motivos de la salida de Amaia fueron artísticos, no era un problema personal y no nos quedó más remedio que aceptarla y desearle suerte. De todas las teorías de su salida, la más aburrida fue la real, no hubo pelea”.
¿No les preocupó que con todos los rumores sobre la banda e incluso la llegada de una nueva vocalista el disco quedara en segundo plano?
Xavi: “Con nuestra música siempre hemos tratado de huir de la ‘rumorología’ y evitar que las cosas se enfoquen en nuestra vida privada, creo que somos demasiado normales para tener fuerza mediática. Por eso grabamos el disco casi en secreto y lo presentamos hasta el final, para evitar ese tipo de chismes. El mensaje es: ‘Aquí está la nueva vocalista, pero sobre todo, está el nuevo disco’”.
Para ustedes, ¿qué frase es la que actualmente enmarca a la banda?
Pablo: “Bueno”.
Álvaro: “Oye (dirigiéndose a Pablo) las frases suelen tener sujeto y predicado (risas)”.
Pablo: “Muy bueno… es muy bueno, ¿no es una frase?”
Xavi: (Luego de que todos voltearan a los lados pensando en una frase) “Es el premio de haber sido muy valientes, las cosas eran muy complicadas, se nos había ido la cantante y aquí estamos. Hemos recordado por qué hacíamos canciones”.
Muchas agrupaciones no sobreviven sin su vocalista, un miembro que suele ser considerado como “el alma” de un conjunto musical. Entonces la pregunta es, ¿cómo logró una banda a punto de la disolución levantarse y salir de gira nuevamente?
Con una amplía sonrisa dibujada en el rostro, el quinteto formado en San Sebastián, España, despeja éstas y otras dudas durante una charla con EL INFORMADOR. Lejos de estar abatidos, se sienten recargados, con ellos ahora todo es novedad, con un nuevo disco llamado A las cinco en el Astoria, una nueva gira promocional y una nueva vocalista, Leire Martínez. El secreto, afirma Xavi, se resume en una idea: “Ser valientes, no dejar que las circunstancias nos superaran”. Pablo, Haritz y Álvaro asienten con la cabeza, saben que a La Oreja de Van Gogh todavía le quedan muchos lienzos musicales que pintar.
Hace un año se quedan sin vocalista, sin disco, sin gira, nada. ¿Cómo están ahora?
Xavi: “Ha sido un año completo, especial. Con la partida de Amaia decidimos que teníamos que continuar con el grupo. La amistad que nos une desde la Universidad a todos fue algo que no se perdió, todo eso sigue intacto, así que decidimos continuar. Las canciones ya estaban y Leire nos complementó cuando entró”.
¿A qué suena La Oreja de Van Gogh con “A las cinco en el Astoria”?
Xavi: “Mucha gente ahora nos dice que suena a nuestras raíces, a los primeros discos. Es algo que no nos esperábamos, especialmente si partimos del punto que ahora tenemos otra vocalista. Creo que nos hemos reencontrado con los principios esenciales del grupo y estas circunstancias adversas han hecho que tengamos que ponernos en ‘modo reto’, hemos vuelto a ser novatos”.
Pablo: “Cada canción que componíamos nos hacía sentir una obligación mayor a lanzar el disco. Era la munición que necesitábamos para seguir adelante”.
Si en la Oreja de Van Gogh se sienten como novatos con más de 10 años de carrera se debe especialmente a ti Leire, pero ¿tú cómo te sientes con ellos?
Leire: “Siento que ellos se han vuelto locos (risas). Soy muy afortunada de que entre toda la gente que audicionó fuera yo la elegida. No fue algo buscado, vino un poco caído del cielo, con casualidad, me siento privilegiada, además de que me tratan increíble, soy la niña mimada (risas)”.
En la respuesta mencionas que esta oportunidad fue como ‘caída del cielo’, a pesar de que tienes tablas, participaste en un “reality show” en España y venciste en un cásting a otras aspirantes, ¿le darías crédito a la suerte?
Leire: “Es complicado. El destino no fabrica talento…”
Xavi: “Perdón que me meta. Hay una frase que dice ‘la suerte es para aquellos que no la necesitan’, creo que eso le sucede a Leire”.
Leire: “Sí, ‘se nace o se hace’ sería otra. Y yo se que no soy la que mejor cantó en el cásting ni la más guapa, creo que reunía los elementos que hacían falta, ellos buscaban a alguien que entendiera la filosofía de grupo”.
Pablo: “Cuando comenzamos a buscar a una nueva vocalista, francamente no sabíamos cómo hacerlo. Una cosa llevó a la otra. Leire canta muy bien, pero además tiene un plus de interpretación, la forma en que trabaja nos permitía volver a ser cinco personas, no tener a una cantante que trabajara por hora. La clave para que ella esté con nosotros no fue una, sino 100 millones”.
Cuando sale Amaia se manejan muchas teorías de por qué se iba, y luego se empezó a hablar de muchas posibles sustitutas, incluyendo el nombre de Paulina Rubio…
Xavi: “Sí hombre, eso fue hasta divertido (lo de Paulina), hasta gracioso resulta. La verdad es que los motivos de la salida de Amaia fueron artísticos, no era un problema personal y no nos quedó más remedio que aceptarla y desearle suerte. De todas las teorías de su salida, la más aburrida fue la real, no hubo pelea”.
¿No les preocupó que con todos los rumores sobre la banda e incluso la llegada de una nueva vocalista el disco quedara en segundo plano?
Xavi: “Con nuestra música siempre hemos tratado de huir de la ‘rumorología’ y evitar que las cosas se enfoquen en nuestra vida privada, creo que somos demasiado normales para tener fuerza mediática. Por eso grabamos el disco casi en secreto y lo presentamos hasta el final, para evitar ese tipo de chismes. El mensaje es: ‘Aquí está la nueva vocalista, pero sobre todo, está el nuevo disco’”.
Para ustedes, ¿qué frase es la que actualmente enmarca a la banda?
Pablo: “Bueno”.
Álvaro: “Oye (dirigiéndose a Pablo) las frases suelen tener sujeto y predicado (risas)”.
Pablo: “Muy bueno… es muy bueno, ¿no es una frase?”
Xavi: (Luego de que todos voltearan a los lados pensando en una frase) “Es el premio de haber sido muy valientes, las cosas eran muy complicadas, se nos había ido la cantante y aquí estamos. Hemos recordado por qué hacíamos canciones”.
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