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“Kung Fu Panda” le pone color al verano

“Nuestra meta fue crear una película que trascendiera el tiempo quisimos hacer más que una producción que sólo entretuviera” John Stevenson, director.

En busca del poder interior

Entre puños y patadas, el oso más popular de la temporada llega este viernes a las pantallas mexicanas con el mejor aprendizaje oriental

Cuando llega el momento en que las leyendas se encuentren ante la lucha entre el bien y el mal, y cuando es el Valle de la Paz se encuentre en la encrucijada de perder su tranquilidad, llega el momento de llamar al Guerrero Dragón para proteger a su gente... el problema viene cuando dicho guerrero es más un cómico y peludo ciudadano que un auténtico gladiador.

En la historia que este viernes la casa de animación DreamWorks trae a México se ponen en juego aprendizajes de vida como la tolerancia, el respeto, la perseverancia y el poder interior.

Los directores de la cinta animada, John Stevenson y Mark Osborne, son muy claros en el objetivo trazado para la película, sobre todo porque ellos tienen hijos pequeños. “Quisimos realizar una película con un mensaje que les pareciera interesante:

‘Sé tu propio héroe’, lo cual significa que la respuesta está dentro de nosotros mismos. No esperemos que los demás arreglen las cosas. Podemos lograr cualquier cosa que nos propongamos si nos decidimos. Sé lo mejor que puedes ser”.

“Para nosotros era muy importante,” continúa Osborne, “que Kung Fu Panda tuviera un tema, un mensaje positivo en el que realmente creyéramos. Quisimos que fuera una experiencia divertida, llena de comedia y acción pero que también tuviera un buen mensaje”.

El ingrediente correcto

Luego de encontrar la personalidad de los Cinco Furiosos, maestros del Kung Fu, la tarea vino en encontrar las voces correctas para dar la fuerza a cada personaje aún con el marco de comedia que todos poseen, y así completar el cuadro con emblemas de la fauna asiática: Tigresa (Angelina Jolie), Grulla (David Cross), Mantis (Seth Rogen) Víbora (Lucy Liu) y Mono (Jackie Chan).

Sin embargo el verdadero conflicto se desarrolla entre el maestro Shifu (Dustin Hoffman) y Po (Jack Black) pues ambos energías que corren en la misma dirección, ambos aman el kung fu, sin embargo el maestro tiene una cuenta pendiente como mentor luego de que Tai Lung intentara incluso matarlo, y Po desea un cambio de vida, pues a pesar de que sus días transcurren tranquilos junto a su padre (un ganso) en el restaurante de fideos, su vida ha estado acompañada de burlas y sin sabores por su aspecto, por lo que encuentra junto a Shifu una oportunidad de descubrir quién es realmente.

Para el director la combinación de personajes y ambientes orientales no minan la posibilidad de convertir a Kung Fu Panda en una historia de trascendencia mundial. “A pesar que el relato está ambientado en nuestra versión de la China milenaria, la historia no se aplica únicamente a los personajes de esa era. Quisimos que Po y sus aventuras, junto con el resto de atractivos personajes e imágenes ingeniosas fuera mucho más que una producción que sólo entretuviera”. Y el objetivo se cumple pues no sólo es una historia cargada de conflictos internos por resolver, sino una comedia a carcajada abierta.

Enseñanzas con humor

Famoso por su trabajo en comedias, Jack Black hace de Po un icono para este verano, un panda que persigue sus sueños, y es esta premisa la que cautivó al actor protagonista de cintas como Nacho Libre a incorporarse al equipo. “Al padre de Po le encantan los fideos”, explica Black, “pero Po sueña con ser un maestro del kung fu. No quiere hablarle a su padre de esto, porque sabe que él desea que su hijo siga sus pasos, así que lo mantiene en secreto. Además, Po piensa que no posee lo que se necesita para ser un maestro del kung fu y que se burlarían de él”.

Para su versión en español, Omar Chaparro coincide con algunas ideas con Black. “Participar en el doblaje ha sido como sembrar una semilla y hacer otras cosas. De entrada, mi hijo (que tiene tres años) ya me dice papá Kung Fu Panda. Es increíble, eso es lo importante, que algún día cuando tenga 25, 40 ó 50 años, diga: ‘Ese que habla en la película es mi papá’. Cuando hice el doblaje, tomé la decisión de llevarlo y mientras yo estaba haciéndolo, él también tiraba patadas, hacía ruidos como yo, y eso me conmovió”.

De qué se trata

Cuando la furia de Tai Lung, un fuerte guerrero que ha vivido en prisión por 20 años se desata, el Valle de la Paz se ve amenazado y llega el momento de encontrar al Guerrero Dragón para que acabe con la fuerza maligna; sin embargo la búsqueda resulta más desalentadora de lo que parece, pues el corazón del guerrero pertenece a un panda bonachón que sorteará la profecía y encontrará que la verdadera fuerza de un maestro Kung Fu no está en sus puños.
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