Entretenimiento
Jennifer Aniston regresa a la comedia
Sus mayores éxitos de taquilla han sido siempre las comedias románticas con final feliz
CIUDAD DE MÉXICO (05/SEP/2013).-
Jennifer Aniston regresa a lo que mejor sabe hacer: la comedia. Aunque ha conseguido buenos trabajos en filmes independientes como “Friends with money”, los mayores éxitos de taquilla de Jennifer han sido siempre en las comedias románticas con final feliz.
En esta ocasión aparece en “¿Quién *&$%! son los Miller?”, en la que interpreta a un hilarante personaje que se mueve con naturalidad entre ser una madre de familia y una bailarina exótica.
En la película, David Burke es un traficante de mariguana al que le roban su mercancía y su dinero. Eso significa que no podrá pagar a su jefe, un mafioso de nombre Brad. Para salvarse a él y a su familila, David decide convertirse en un contrabandista de drogas. Para eso tiene que viajar a México para recoger un cargamento.
Entonces se inventa una familia falsa: una esposa, dos hijos, y una casa rodante. Eso es la familia Miller que emprende un viaje en el que sobran sombreros de charro y alusiones al estereotipo del mexicano. Para Jennifer Aniston fue la oportunidad para convertirse en una chica sexy y mala.
Y lo disfrutó, según ha dicho ella misma. Aunque también sufrió algunas escenas: “Tenía una tanga y dos pares de ropa interior. Pensé que eso ayudaría a proteger cualquier cosa de mí. Ahora veo que eso es ridículo”.
En esta ocasión aparece en “¿Quién *&$%! son los Miller?”, en la que interpreta a un hilarante personaje que se mueve con naturalidad entre ser una madre de familia y una bailarina exótica.
En la película, David Burke es un traficante de mariguana al que le roban su mercancía y su dinero. Eso significa que no podrá pagar a su jefe, un mafioso de nombre Brad. Para salvarse a él y a su familila, David decide convertirse en un contrabandista de drogas. Para eso tiene que viajar a México para recoger un cargamento.
Entonces se inventa una familia falsa: una esposa, dos hijos, y una casa rodante. Eso es la familia Miller que emprende un viaje en el que sobran sombreros de charro y alusiones al estereotipo del mexicano. Para Jennifer Aniston fue la oportunidad para convertirse en una chica sexy y mala.
Y lo disfrutó, según ha dicho ella misma. Aunque también sufrió algunas escenas: “Tenía una tanga y dos pares de ropa interior. Pensé que eso ayudaría a proteger cualquier cosa de mí. Ahora veo que eso es ridículo”.
Síguenos en