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Había perdido la fe en mí: Lila Downs
Describe a su hijo como la mayor bendición de su vida
"Había perdido la fe en mí", recuerda en una entrevista sobre sus fallidos intentos por alcanzar una maternidad que logró en 2010, cuando adoptó junto a su esposo, el músico Paul Cohen, a un niño llamado Benito Dxuladi.
Los exvotos mexicanos, pequeñas pinturas dedicadas a un santo para agradecer la concesión de un milagro, también juegan un papel muy importante en un CD que recientemente alcanzó la calificación de disco de platino.
De todos estos cuadros fueron los de Alfredo Vilchis los que más impresionaron a la mexicana, especialmente por sus representaciones "modernas" de asuntos como la infidelidad, el atentado de las Torres Gemelas o el cambio de sexo.
Composiciones de José Alfredo Jiménez y Marco Antonio Solís comparten en "Pecados y Milagros" protagonismo con temas propios de Lila Downs, para los que se inspiró en "hechos reales" y en temas tradicionales de México que antes no le llamaban la atención pero ahora aparecen reflejados en "Cruz de olvido" y "Dios nunca muere".
"Siento que ahorita estamos en ese diálogo con algo que algunos de nosotros llamamos Dios", explica antes de reconocer que "quería crear un disco que tuviera que ver con emociones positivas" en contraste con la situación actual de su país.
"Tú misma te preguntas qué significa ser mexicana", comenta la vocalista, a quien le preocupa el clima de violencia de lugares como Ciudad Juárez, aunque allí haya decrecido en los últimos tiempos.
"Nuestra historia es compleja, es muy fácil señalar con el dedo y decir: ustedes son los que causan la violencia. Creo que no es así", zanja.
Hija del cineasta Allen Downs y la cantante Anita Sánchez, Downs recuerda que en la adolescencia no le motivaba la idea de dedicarse a la música, razón por la cual estudió Antropología en la Universidad de Minnesota.
Fue durante la elaboración de su tesis cuando descubrió a la artista que transformó su carrera. "Jamás había oído un instrumento como el de Mercedes Sosa, ahí me cambió la vida", cuenta de una mujer de la que aprendió que podía cantar con convicción, además de hacerlo con propósito artístico y estético.
En la actualidad, la cantante compatibiliza su carrera en solitario con la interpretación en películas como "Mariachi gringo", estrenada recientemente en EU; y la composición de la banda sonora del musical "Como agua para chocolate", basado en el libro homónimo de su compatriota Laura Esquivel.
Orgullosa de representar por todo el mundo a un país de la gran variedad étnica del suyo, la mexicana iniciará su gira española el 23 de marzo en Barcelona y continuará el 24 en Alcobendas (Madrid), el 26 en Valencia, el 27 en Zaragoza, el 29 en Burgos y el 31 en Cádiz.
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