Entretenimiento
Gerardo Naranjo entusiasma con el escapismo y la rebeldía de ''Voy a explotar''
El largometraje se estrenará el 3 de abril en México después de haber pasado por varios festivales de cine
BERLÍN, ALEMANIA.- La rebeldía adolescente y los sueños de huida de los protagonistas de la mexicana "
Voy a explotar" entusiasmaron hoy al público del Festival de Cine de Berlín, que aplaudió durante varios minutos al término de la proyección.
El largometraje de Gerardo Naranjo, que se exhibió en la sección juvenil de Generation, narra el fallido viaje a ninguna parte de Román y Maru, dos jóvenes soñadores y algo particulares enfrentados con el resto del mundo.
"Antes de hacerme mayor quería hacer una película desde el punto de vista de un niño", explicó a Efe el cineasta, de 37 años, que ha contado con el apoyo de Canana Films, la productora creada por los actores Diego Luna y Gael García Bernal.
Para ello ambienta la acción en su Guanajuato natal y toma como protagonistas a dos jóvenes poco convencionales e inadaptados al sistema que intentan rebelarse contra el conservadurismo tradicional.
El peso de la película recae en esa joven pareja, interpretada por Juan Pablo de Santiago y María Deschamps, que tenían 15 años durante el rodaje de la película y fueron escogidos de entre 3 mil aspirantes y tras un proceso de selección de más de seis meses.
"Mi intención era mostrar la idiotez y la decadencia moral de los adultos y cuestionar la rebeldía de los jóvenes", explicó Naranjo.
A su modo de ver, "Voy a explotar", en la que también intervienen actores más veteranos como Daniel Giménez Cacho y Rebecca Jones supone para el cineasta la "despedida a mi infancia".
El realizador no oculta que esa sublevación "contra no se sabe qué", que en el caso de Maru y Román termina teniendo consecuencias autodestructivas, se inspira en experiencias autobiográficas. "Yo también crecí peleándome con los adultos y portándome mal", explicó.
A lo largo del filme, los dos jóvenes huyen, regresan y vuelven a huir, se pelean y se reconcilian y viven sus primeras experiencias con el sexo y con el alcohol, en lo que el cineasta define como una exposición de la "imperfección" de la adolescencia.
Los primeros escarceos sexuales de Maru y Román y el enfoque que debían darles los protagonistas fue una fuente de preocupación para Naranjo, más interesado en inmortalizar la torpeza de esos encuentros que su erotismo.
"Iba a darles una charla sobre sexo pero no tenía ni idea de qué iba a decirles. Hasta que me di cuenta de que ellos sabían más que yo a su edad", explicó.
Pese al éxito reciente del cine mexicano en el extranjero, Naranjo considera que la industria cinematográfica del país "está en mala forma" pues resulta difícil atraer a las salas a un público "hipnotizado por la basura que echan en televisión".
"Los cineastas mexicanos somos muy apreciados fuera, pero en nuestro país la gente quiere ver telenovelas", apuntó.
"Voy a explotar" que ya ha pasado por festivales como los de Venecia, Toronto, Nueva York y Mar de Plata se estrenará el 3 de abril en México y ya ha cerrado contratos para su distribución en Estados Unidos, Inglaterra y Francia.
El largometraje de Gerardo Naranjo, que se exhibió en la sección juvenil de Generation, narra el fallido viaje a ninguna parte de Román y Maru, dos jóvenes soñadores y algo particulares enfrentados con el resto del mundo.
"Antes de hacerme mayor quería hacer una película desde el punto de vista de un niño", explicó a Efe el cineasta, de 37 años, que ha contado con el apoyo de Canana Films, la productora creada por los actores Diego Luna y Gael García Bernal.
Para ello ambienta la acción en su Guanajuato natal y toma como protagonistas a dos jóvenes poco convencionales e inadaptados al sistema que intentan rebelarse contra el conservadurismo tradicional.
El peso de la película recae en esa joven pareja, interpretada por Juan Pablo de Santiago y María Deschamps, que tenían 15 años durante el rodaje de la película y fueron escogidos de entre 3 mil aspirantes y tras un proceso de selección de más de seis meses.
"Mi intención era mostrar la idiotez y la decadencia moral de los adultos y cuestionar la rebeldía de los jóvenes", explicó Naranjo.
A su modo de ver, "Voy a explotar", en la que también intervienen actores más veteranos como Daniel Giménez Cacho y Rebecca Jones supone para el cineasta la "despedida a mi infancia".
El realizador no oculta que esa sublevación "contra no se sabe qué", que en el caso de Maru y Román termina teniendo consecuencias autodestructivas, se inspira en experiencias autobiográficas. "Yo también crecí peleándome con los adultos y portándome mal", explicó.
A lo largo del filme, los dos jóvenes huyen, regresan y vuelven a huir, se pelean y se reconcilian y viven sus primeras experiencias con el sexo y con el alcohol, en lo que el cineasta define como una exposición de la "imperfección" de la adolescencia.
Los primeros escarceos sexuales de Maru y Román y el enfoque que debían darles los protagonistas fue una fuente de preocupación para Naranjo, más interesado en inmortalizar la torpeza de esos encuentros que su erotismo.
"Iba a darles una charla sobre sexo pero no tenía ni idea de qué iba a decirles. Hasta que me di cuenta de que ellos sabían más que yo a su edad", explicó.
Pese al éxito reciente del cine mexicano en el extranjero, Naranjo considera que la industria cinematográfica del país "está en mala forma" pues resulta difícil atraer a las salas a un público "hipnotizado por la basura que echan en televisión".
"Los cineastas mexicanos somos muy apreciados fuera, pero en nuestro país la gente quiere ver telenovelas", apuntó.
"Voy a explotar" que ya ha pasado por festivales como los de Venecia, Toronto, Nueva York y Mar de Plata se estrenará el 3 de abril en México y ya ha cerrado contratos para su distribución en Estados Unidos, Inglaterra y Francia.
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