Entretenimiento
Géneros alternativos exploran sonidos bailables
La respuesta del público es mayor en el escenario destinado al rock
GUADALAJARA, JALISCO (06/ABR/2013).- Para sacar los mejores pasos de baile, el escenario de música electrónica fue la mejor opción para aquellos amantes de los ritmos liderados por los beats y los efectos especiales durante la Fiesta de la Música de este sábado en Avenida Chapultepec.
Muestra de ello es el ambiente que se generó entre los asistentes que disfrutaron de una buena dosis del género alternativo al cruce de la calle José Gpe. Montenegro, que desde las 17:00 horas dio inicio con la participación de Alejandro Hugarin, quien poco a poco atrajo la atención de los melómanos más jóvenes.
Después, John Ugalde hizo lo suyo tras entretener al público con una serie de sonidos hipnóticos, que con la llegada de noche, se acompañó con un juego de luces que adornaron el escenario decorado con unos bloques de plástico que cambiaban de tonalidad al correr de la música.
El festival musical siguió con Lennon, que de igual forma, alentó al público a ejecutar movimientos acelerados bajo un concepto modernista e innovador de piezas largas y entremeses sorpresa de ritmos 100% electrónicos.
En la recta final de la velada sonora, Calambrin se presentó a los asistentes demostrando como la corriente alternativa cuenta con un gran grupo de seguidores, quienes no dejaron de aplaudir a la espera del gran estelar The Mindnight.
No obstante, la respuesta del público fue mayor en el escenario destinado al rock, pues de manera puntual, las bandas invitadas dieron inicio con un recorrido musical más estridente con guitarrazos y ritmos underground con la agrupación Imposible y Blacksmith, cuales durante más de dos horas mostraron el talento sonoro de Guadalajara.
Pero fue la agrupación Marlento la que levantó aun más los ánimos del público con un repertorio de canciones potentes con algunas líricas en inglés. De esta forma, la banda originaria de la Perla Tapatía hizo gala de un set que abordaron distintas corrientes sonoras desde el new wave, el post punk y el folk melancólico.
Posteriormente, la banda Caballero apareció con un concepto totalmente instrumental en el que las voces al micrófono no fueron necesarias para que el público las colocara como una de las agrupaciones más aplaudidas de la noche.
Luego de un episodio de sonoros más psicodélico, Cherry Stryke tomó la batuta del escenario con un ambiente enchufado a la irreverencia y rebeldía, con la intención de motivar más al público que estaba a la espera de la banda de honor, Los Románticos de Zacatecas, encabezados por Jesús Manzanares Jr. (voz y guitarra), "Guichis" (guitarra), Gerbis (bajo eléctrico) y Tony Montes (batería), quienes en breve presentarían parte de su primer disco de estudio, "Muchacha", y nuevas piezas con tendencias de garage punk.
Aunque la respuesta fue lenta, en el escenario de música Clásica y regional, los asistentes disfrutaron de sonidos experimentales y de influencias fusión con la presencia de Jaivika y el guitarrista Luis Javier Ochoa.
Al transcurrir la noche, el Cuarteto de cuerdas del maestro Ramón Becerra se encargó de transportar a los escuchas a un ambiente bohemio y armonioso durante una hora, para que en breve el Ensamble Ceferino compartiera un momento más campirano y festivo.
El relajado escenario dio bienvenida a Maraventho, que con una interacción de cuerdas e instrumentos de viento anunciaban el cierre del escenario de género clásico y regional con la llegada del acto final con Ampersan.
EL INFORMADOR / NORMA GUTIÉRREZ
Muestra de ello es el ambiente que se generó entre los asistentes que disfrutaron de una buena dosis del género alternativo al cruce de la calle José Gpe. Montenegro, que desde las 17:00 horas dio inicio con la participación de Alejandro Hugarin, quien poco a poco atrajo la atención de los melómanos más jóvenes.
Después, John Ugalde hizo lo suyo tras entretener al público con una serie de sonidos hipnóticos, que con la llegada de noche, se acompañó con un juego de luces que adornaron el escenario decorado con unos bloques de plástico que cambiaban de tonalidad al correr de la música.
El festival musical siguió con Lennon, que de igual forma, alentó al público a ejecutar movimientos acelerados bajo un concepto modernista e innovador de piezas largas y entremeses sorpresa de ritmos 100% electrónicos.
En la recta final de la velada sonora, Calambrin se presentó a los asistentes demostrando como la corriente alternativa cuenta con un gran grupo de seguidores, quienes no dejaron de aplaudir a la espera del gran estelar The Mindnight.
No obstante, la respuesta del público fue mayor en el escenario destinado al rock, pues de manera puntual, las bandas invitadas dieron inicio con un recorrido musical más estridente con guitarrazos y ritmos underground con la agrupación Imposible y Blacksmith, cuales durante más de dos horas mostraron el talento sonoro de Guadalajara.
Pero fue la agrupación Marlento la que levantó aun más los ánimos del público con un repertorio de canciones potentes con algunas líricas en inglés. De esta forma, la banda originaria de la Perla Tapatía hizo gala de un set que abordaron distintas corrientes sonoras desde el new wave, el post punk y el folk melancólico.
Posteriormente, la banda Caballero apareció con un concepto totalmente instrumental en el que las voces al micrófono no fueron necesarias para que el público las colocara como una de las agrupaciones más aplaudidas de la noche.
Luego de un episodio de sonoros más psicodélico, Cherry Stryke tomó la batuta del escenario con un ambiente enchufado a la irreverencia y rebeldía, con la intención de motivar más al público que estaba a la espera de la banda de honor, Los Románticos de Zacatecas, encabezados por Jesús Manzanares Jr. (voz y guitarra), "Guichis" (guitarra), Gerbis (bajo eléctrico) y Tony Montes (batería), quienes en breve presentarían parte de su primer disco de estudio, "Muchacha", y nuevas piezas con tendencias de garage punk.
Aunque la respuesta fue lenta, en el escenario de música Clásica y regional, los asistentes disfrutaron de sonidos experimentales y de influencias fusión con la presencia de Jaivika y el guitarrista Luis Javier Ochoa.
Al transcurrir la noche, el Cuarteto de cuerdas del maestro Ramón Becerra se encargó de transportar a los escuchas a un ambiente bohemio y armonioso durante una hora, para que en breve el Ensamble Ceferino compartiera un momento más campirano y festivo.
El relajado escenario dio bienvenida a Maraventho, que con una interacción de cuerdas e instrumentos de viento anunciaban el cierre del escenario de género clásico y regional con la llegada del acto final con Ampersan.
EL INFORMADOR / NORMA GUTIÉRREZ
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