Entretenimiento
Famosos hablan de sus enfermedades mentales
Pero no sólo la bipolaridad afecta a los famosos. La depresión también ha afectado las vidas de estrellas como Hugh Laurie y la fallecida Elizabeth Taylor
CIUDAD DE MÉXICO (15/OCT/2011).- La bipolaridad “es un desorden que afecta a millones de personas y yo soy una de ellas. Si al haber revelado que soy bipolar estoy animando a otra persona a buscar ayuda, entonces vale la pena”, declaró Catherine Zeta Jones.
La actriz hizo público su problema cuando el cáncer de su marido Michael Douglas, los problemas legales de su hijastro, y su rol como madre se juntaron en una misma temporada, generándole un estrés muy grande.
La intención de Zeta Jones de animar a otros a través de su propio ejemplo, parece tener un respaldo empírico, según explica la doctora Xóchitl Álvarez.
“Para desestigmatizar la enfermedad, es bueno que las personas públicas hagan referencia a ellas. Sin embargo en México aún tenemos unas cargas muy fuertes de ignorancia sobre las enfermedades mentales”, puntualiza Álvarez, quien tiene a su cargo los proyectos de ayuda y atención de la Organización Nacional de Trastorno Bipolar.
Otros famosos que han revelado su bipolaridad son: Ben Stiller, Jim Carrey, Britney Spears y recientemente, la cantante Selena Gómez.
“Que acepten su enfermedad es positivo porque al reconocerlo puedes tomar conciencia y buscar ayuda; además, son personas muy valientes, porque aceptan su vulnerabilidad”, dice Xóchitl Álvarez.
Más enfermedades
Pero no sólo la bipolaridad afecta a los famosos. La depresión también ha afectado las vidas de estrellas como Hugh Laurie y la fallecida Elizabeth Taylor.
Para Laurie, cada episodio es un problema, porque sólo puede pensar en los errores cometidos y se siente mal por ello.
Por otro lado, Uma Thurman padeció del trastorno dismórfico corporal, que consiste en una preocupación fuera de lo normal por algún defecto físico. Su angustia era debido a su gran estatura, pues mide 1.83, desde que tenía 13 años.
Mientras que Daniel Radcliffe tiene dispraxia, enfermedad que hace sus movimientos lentos y le dificulta llevar a cabo tareas de la vida diaria como abrocharse los zapatos.
Estas estrellas han salido adelante gracias al apoyo de su familia y de un tratamiento cuidadoso de su enfermedad.
A su salida de su rehabilitación, Demi Lovato se tatuó en las muñecas “Be Strong” (Mantente fuerte). Ari Telch ha participado en conferencias y apoya a la Fundación Bipolar Libre.
Este tipo de enfermedades son “tratables, las enfermedades mentales no se curan definitivamente. Los síntomas se controlan y tienen una vida normal”, finalizó Xóchitl Álvarez.
La actriz hizo público su problema cuando el cáncer de su marido Michael Douglas, los problemas legales de su hijastro, y su rol como madre se juntaron en una misma temporada, generándole un estrés muy grande.
La intención de Zeta Jones de animar a otros a través de su propio ejemplo, parece tener un respaldo empírico, según explica la doctora Xóchitl Álvarez.
“Para desestigmatizar la enfermedad, es bueno que las personas públicas hagan referencia a ellas. Sin embargo en México aún tenemos unas cargas muy fuertes de ignorancia sobre las enfermedades mentales”, puntualiza Álvarez, quien tiene a su cargo los proyectos de ayuda y atención de la Organización Nacional de Trastorno Bipolar.
Otros famosos que han revelado su bipolaridad son: Ben Stiller, Jim Carrey, Britney Spears y recientemente, la cantante Selena Gómez.
“Que acepten su enfermedad es positivo porque al reconocerlo puedes tomar conciencia y buscar ayuda; además, son personas muy valientes, porque aceptan su vulnerabilidad”, dice Xóchitl Álvarez.
Más enfermedades
Pero no sólo la bipolaridad afecta a los famosos. La depresión también ha afectado las vidas de estrellas como Hugh Laurie y la fallecida Elizabeth Taylor.
Para Laurie, cada episodio es un problema, porque sólo puede pensar en los errores cometidos y se siente mal por ello.
Por otro lado, Uma Thurman padeció del trastorno dismórfico corporal, que consiste en una preocupación fuera de lo normal por algún defecto físico. Su angustia era debido a su gran estatura, pues mide 1.83, desde que tenía 13 años.
Mientras que Daniel Radcliffe tiene dispraxia, enfermedad que hace sus movimientos lentos y le dificulta llevar a cabo tareas de la vida diaria como abrocharse los zapatos.
Estas estrellas han salido adelante gracias al apoyo de su familia y de un tratamiento cuidadoso de su enfermedad.
A su salida de su rehabilitación, Demi Lovato se tatuó en las muñecas “Be Strong” (Mantente fuerte). Ari Telch ha participado en conferencias y apoya a la Fundación Bipolar Libre.
Este tipo de enfermedades son “tratables, las enfermedades mentales no se curan definitivamente. Los síntomas se controlan y tienen una vida normal”, finalizó Xóchitl Álvarez.
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