Entretenimiento
Entregados a sus “bajos” instintos
una jornada dedicada a la adoración del instrumento y los sonidos que de él salen
GUADALAJARA, JALISCO (11/DIC/2013).- El Día del Bajo, iniciativa instituida por el
GDL Bass Club, no tenía como intención el crear una jornada dedicada a la mera adoración de este instrumento. No pretendía convertir la pieza de madera, metal, cuerdas y plástico en un tótem al cual rendirle culto. Lo que busca demostrar es que al talento, la dedicación y amor por la música que caracteriza a quienes dominan este elemento sonoro, se agrega una cualidad poco común en el gremio sonoro: La generosidad.
De uno en uno y en orden. Dispuestos a enseñar la técnica, o aprenderla. A compartir anécdotas, chistes, pifias en el escenario o hazañas de la última gira. Así se fueron reuniendo los bajistas en su día. Su fiesta. Desde las 16:00 horas comenzaron a llegar al Bar Leyendas del Rock. Por cincuenta pesos, tenían acceso a las clínicas y homenajes, lo oficial. Pero también a un ambiente de camaradería y colaboración.
Esas cosas que no se promueven en los volantes, ni el programa, pero que están allí.
En punto de las 16:30, un nervioso, pero también satisfecho Pepe Vázquez, dio la bienvenida a los que se dieron cita. Todos, testigos de la primera edición de esta fiesta sonora. Con una cerveza bien fría de por medio, y una plática animada siempre, buena parte de los bajistas que se dieron cita en el recinto de avenida México se encargaron de quitarle lo solemne a este evento. Todos iban con el chip de divertirse.
En la terraza del bar, aprovechando los últimos raros de luz de la tarde, se llevó a cabo la clínica de Víctor Hugo “Chumino” Guardado, bajista de trayectoria consolidada a nivel local, y quien actualmente toca con Los Afro Brothers, banda que acaba de presentar su disco más reciente.
Allí, los asistentes clavaron sus ojos en el instrumento del músico, siguiendo sus palabras con absoluta atención y respeto.
“Lo que tenemos entre los bajistas es algo que no se suele ver en otros géneros musicales: Sentimiento de unión, hermandad”, había declarado horas antes del encuentro Pepe Vázquez, en entrevista con EL INFORMADOR.
Y este discurso fue repetido casi palabra por palabra por otros asistentes, como Francisco “Coco” Ramírez, bajistas de largo aliento, integrante de la legendaria banda local Fosforo Club, y quien resaltó que para tocar este instrumento, amén del talento, se requiere una cualidad invisible para los ojos, pero necesaria para el funcionamiento de todo grupo que jacte de ser grande: Solidaridad.
Para saber más
Premiados
Durante el primer Día del Bajo, se reconoció la trayectoria de varias figuras en este instrumento. Entre los nombres destacados se encuentran Hiram Gómez, Hipólito Ramírez (contrabajo de la Orquesta Filarmónica del Estado), Richie Arreola, Abraham Bustos, César Corona y Carlos Avilez. Al ser la primera edición, fueron más de 25 los premiados, pero en los próximos años, la idea es disminuir el número a solamente 3.
De uno en uno y en orden. Dispuestos a enseñar la técnica, o aprenderla. A compartir anécdotas, chistes, pifias en el escenario o hazañas de la última gira. Así se fueron reuniendo los bajistas en su día. Su fiesta. Desde las 16:00 horas comenzaron a llegar al Bar Leyendas del Rock. Por cincuenta pesos, tenían acceso a las clínicas y homenajes, lo oficial. Pero también a un ambiente de camaradería y colaboración.
Esas cosas que no se promueven en los volantes, ni el programa, pero que están allí.
En punto de las 16:30, un nervioso, pero también satisfecho Pepe Vázquez, dio la bienvenida a los que se dieron cita. Todos, testigos de la primera edición de esta fiesta sonora. Con una cerveza bien fría de por medio, y una plática animada siempre, buena parte de los bajistas que se dieron cita en el recinto de avenida México se encargaron de quitarle lo solemne a este evento. Todos iban con el chip de divertirse.
En la terraza del bar, aprovechando los últimos raros de luz de la tarde, se llevó a cabo la clínica de Víctor Hugo “Chumino” Guardado, bajista de trayectoria consolidada a nivel local, y quien actualmente toca con Los Afro Brothers, banda que acaba de presentar su disco más reciente.
Allí, los asistentes clavaron sus ojos en el instrumento del músico, siguiendo sus palabras con absoluta atención y respeto.
“Lo que tenemos entre los bajistas es algo que no se suele ver en otros géneros musicales: Sentimiento de unión, hermandad”, había declarado horas antes del encuentro Pepe Vázquez, en entrevista con EL INFORMADOR.
Y este discurso fue repetido casi palabra por palabra por otros asistentes, como Francisco “Coco” Ramírez, bajistas de largo aliento, integrante de la legendaria banda local Fosforo Club, y quien resaltó que para tocar este instrumento, amén del talento, se requiere una cualidad invisible para los ojos, pero necesaria para el funcionamiento de todo grupo que jacte de ser grande: Solidaridad.
Para saber más
Premiados
Durante el primer Día del Bajo, se reconoció la trayectoria de varias figuras en este instrumento. Entre los nombres destacados se encuentran Hiram Gómez, Hipólito Ramírez (contrabajo de la Orquesta Filarmónica del Estado), Richie Arreola, Abraham Bustos, César Corona y Carlos Avilez. Al ser la primera edición, fueron más de 25 los premiados, pero en los próximos años, la idea es disminuir el número a solamente 3.
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