Entretenimiento
Develan Lagrimita y Costel sus huellas en el DF
Lagrimita señaló que son pocos los exponentes payasos que se dedican a la música
CIUDAD DE MÉXICO (30/JUL/2011).- El dueto de payasos Lagrimita y Costel develaron las huellas de sus manos en el Paseo de las Luminarias, donde hicieron reír y cantar al público que se dio cita en la plaza comercial.
En entrevista reconocieron que su oficio como payasos es la que les ha dado un lugar en el mundo artístico, incluso con alcances de popularidad internacional, al lograr un programa de televisión en Los Angeles, California, con un "rating" superior al de algunos noticiarios de espectáculos como el del "Gordo y la Flaca".
"Nosotros le debemos nuestra vida al arte de la payasada, sobre todo yo que soy hijo de uno de los mejores cara pitada de México como Lagrimita, que pocos conocen con su nombre verdadero Guillermo Cienfuegos", detalló Costel.
El joven cantante aseguró que el mundo grupero donde se desempeña le ha dado la enorme oportunidad de trascender fronteras, con propuestas frescas que le dan un sentido distinto a la música regional mexicana.
"Somos payasos, pero también somos músicos y hemos compaginado ambas facetas de manera importante, al grado de no poder hacer una sin la otra, así como tampoco vernos separados mi padre y yo con carreras distintas", señaló Costel.
Por su parte, Lagrimita destacó que le debe todo al payaso, porque desde los seis años se enamoró de este género, y desde entonces lo explota.
"Con mi hijo he descubierto otras capacidades para hacer reír al público, somos el uno para el otro, y entre los dos podemos llegar a un "target" de población que va desde niños de dos años hasta adultos de la tercera edad".
Lagrimita agradeció a los organizadores de Plaza de las Estrellas por concederles el honor de tener sus primeras huellas en bronce, y permanecer eternamente en el gusto de la gente que visite la plaza.
A la pregunta de si en algún momento de sus carreras como cantantes gruperos han súfrido violencia, Lagrimita subrayó que afortunadamente el público al que se dirigen es tan juvenil que nada tiene que ver con el ambiente de los corridos. "Nuestra gente es mucho más sana que aquellos que escuchan la música fuerte de los corridos".
Por último Lagrimita señaló que son pocos los exponentes payasos que se dedican a la música, por lo que mandó un saludo a sus amigos de íQué payasos!, concepto que surgió junto con ellos, pero en el rock.
En entrevista reconocieron que su oficio como payasos es la que les ha dado un lugar en el mundo artístico, incluso con alcances de popularidad internacional, al lograr un programa de televisión en Los Angeles, California, con un "rating" superior al de algunos noticiarios de espectáculos como el del "Gordo y la Flaca".
"Nosotros le debemos nuestra vida al arte de la payasada, sobre todo yo que soy hijo de uno de los mejores cara pitada de México como Lagrimita, que pocos conocen con su nombre verdadero Guillermo Cienfuegos", detalló Costel.
El joven cantante aseguró que el mundo grupero donde se desempeña le ha dado la enorme oportunidad de trascender fronteras, con propuestas frescas que le dan un sentido distinto a la música regional mexicana.
"Somos payasos, pero también somos músicos y hemos compaginado ambas facetas de manera importante, al grado de no poder hacer una sin la otra, así como tampoco vernos separados mi padre y yo con carreras distintas", señaló Costel.
Por su parte, Lagrimita destacó que le debe todo al payaso, porque desde los seis años se enamoró de este género, y desde entonces lo explota.
"Con mi hijo he descubierto otras capacidades para hacer reír al público, somos el uno para el otro, y entre los dos podemos llegar a un "target" de población que va desde niños de dos años hasta adultos de la tercera edad".
Lagrimita agradeció a los organizadores de Plaza de las Estrellas por concederles el honor de tener sus primeras huellas en bronce, y permanecer eternamente en el gusto de la gente que visite la plaza.
A la pregunta de si en algún momento de sus carreras como cantantes gruperos han súfrido violencia, Lagrimita subrayó que afortunadamente el público al que se dirigen es tan juvenil que nada tiene que ver con el ambiente de los corridos. "Nuestra gente es mucho más sana que aquellos que escuchan la música fuerte de los corridos".
Por último Lagrimita señaló que son pocos los exponentes payasos que se dedican a la música, por lo que mandó un saludo a sus amigos de íQué payasos!, concepto que surgió junto con ellos, pero en el rock.
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