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Daniel Sada se hace con el Premio Herralde

“Casi nunca” es un obra de tintes autobiográficos en la que retrata, sin olvidarse del humor, un triángulo amoroso

GUADALAJARA, JALISCO.- Para el escritor y periodista mexicano Daniel Sada, la obtención de la vigésima sexta edición del Premio Herralde de novela con la obra Casi nunca "es como recibir un frasco de vitaminas". Así lo expresó ayer el autor nacido en 1953 en Mexicali tras conocer el fallo del jurado de este galardón convocado por la editorial Anagrama y al que este año han concurrido un total de 244 novelas, 43 más que en 2007.

Sada, a quien el fallecido Roberto Bolaño admiraba y calificó de autor barroco, a la misma altura que Lezama Lima, ha sido elegido ganador del Premio Herralde de novela por unanimidad del jurado, que ha proclamado finalista la obra Un lugar llamado Oreja de Perro, del peruano Iván Thays.

Casi nunca, presentada bajo el seudónimo de G.D Fanance, se trata, de acuerdo con el autor, de una obra de tintes autobiográficos en la que retrata, sin olvidarse del humor, una relación amorosa a tres bandas entre un ingeniero agrónomo, una prostituta y una ilustre señorita.

Tras reconocer que le costó encontrar el punto de vista del narrador, el escritor mexicano indicó que algunos de los personajes del libro todavía viven. "No sé qué ocurrirá cuando lean la obra", añadió.

Sada advirtió que, de todas maneras, ha cambiado muchas cosas de la historia real en la que se basó para escribir la novela, trasladando la acción al México de los años 40, donde desplazarse era muy costoso, sin apenas carreteras y con lentos coches de caballo circulando por los caminos. "Quería escribir una novela cercana al pudor exacerbado, donde el deseo creciera y se engrandeciera, con un contrapunto de perversión inaudito. Y manejarme en esos dos extremos, sin que el nivel de intriga decreciera", explicó.

También el humor incide en el argumento y, según Sada, "tiene que tener un desarrollo dramático para que sea eficaz, no solo debe ser a base de chascarrillos".

Periodista de formación, aunque apenas ha ejercido como tal, Daniel Sada es autor de otros 15 libros, entre los que figura Una de dos, trasladado al cine, y ha ganado varios premios nacionales. Reconocido como uno de los escritores más brillantes del país, él admite estar un poco al margen del "batiburrillo literario" y trabajar un tipo de literatura "no muy acorde con los tiempos actuales", interesándose por la cadencia en la prosa o en la escritura de una novela con octosílabos, al estilo de los romances.

El editor Jorge Herralde ha destacado el "lujo" que supone para el premio que Sada, "un enamorado de la forma, que ha renovado la narrativa mexicana," hubiera concurrido al mismo.
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