Entretenimiento
Abre el FICG con animación para todos
El filme Otra película de huevos y un pollo inicia su travesía en las carteleras mexicanas a partir de hoy
GUADALAJARA, JALISCO.- El filme de los hermanos Riva Palacio, Otra película de huevos y un pollo, abrió la edición número 24 del Festival Internacional de Cine en Guadalajara y no sólo eso, si no que con un arranque luminario en el Auditorio Telmex ayer en la noche, llega hoy a un total de mil 100 salas comerciales, para que el público pueda verla. Ésta, es la saga de un primer filme que nació chiquito y logró un éxito comercial inusitado para el asunto de cine de animación en nuestro país. Sus personajes, maestros del doble sentido, son muy México.
El filme con albur o sin albur, está direccionado a todo tipo de público. Los Riva Palacio lo hicieron bien en la primera entrega y aseguran, con micrófono en mano, que segundas partes sí son mejores. Hay que destacar que se habla de una película de animación, lo que hace que el caso de los irreverentes hermanos creativos, sea particular.
La verdad no fue fácil. Todo empezó como un juego en la web (www.huevocartoon.com) donde el internauta podía acceder a un sitio lleno de chistes mexicanotes, donde sus autores usaban sin censura y sin vergüenza la palabra “huevo” y palabras derivadas y no sólo eso si no que hicieron personajes visiblemente virtuales y con cara de huevo. El sitio de internet rompió récord de audiencia y luego se metieron en el cine con una historia sencilla; un huevo como cualquiera, quería ser un pollo como cualquiera. Por supuesto hubo que pulir el guión, cambiar la estrategia, intentar ser lo más familiar posible, lo lograron. Ahora la marca huevocartoons se importa hacia otras latitudes.
Gabriel y Rodolfo Rivapalacio son los directores del filme y es éste último quien afirmó durante la rueda de prensa ofrecida ayer por la tarde que “esta película en concreto, también refleja la cultura mexicana desde varios aspectos”. Destacó la inclusión de personajes de la comedia nacional como Carlos Espejel, Darío T. Pie, Angélica Vale, Bruno Bichir y Lucila Mariscal, quien vuelve al cine hecha una hueva.
Todos ellos “han aportado tanto a la cultura mexicana. (…) De qué otra forma podemos hacer una película de ‘huevitos’, no hay forma si no es a través de la animación” señaló Rodolfo. Lucila Mariscal por su parte, cuenta con su propio personaje y ella, como actriz, se siente rescatada al participar con este equipo al que ella califica de jóvenes.
El costo de la película fue de 40 millones de pesos, según dijo Paco Arriagada y el proceso de producción tuvo una duración de 19 meses. La realización fue en 3D pero el costo fue de 2D, según señalaron. En todo el trabajo colaboraron alrededor de 400 personas. Hoy día se planea llegar a otros países de Latinoamérica, luego de haber concluido el proceso de inclusión en los Estados Unidos.
Promueven la industria
Inevitable. Sobre el cuestionamiento de por qué una película tan evidentemente comercial abre el Festival Internacional de Cine en Guadalajara, para los Riva Palacio -y su trabajo es muestra de ello- si sólo se producen trabajos de búsqueda no se puede mantener o pretender tener una industria. En esta producción -superior a la primera entrega- participaron Huevocartoon Producciones, Elisa Salinas y Carlos Zepeda.
Otra película de huevos y un pollo es también “cine de autor, (porque) lo que nosotros hacemos no lo hace nadie, para que exista una industria tiene que tener una base comercial y me encanta que el festival mande ese mensaje”, destacó Rodolfo.
Aunque el filme animado maneja en su discurso el interés de ser accesible a todo tipo de público, los albures y el doble sentido no se ausentan del trabajo. Asimismo, hay que recordar que la marca también ha incursionado ya en teatro, donde por ser como son estos huevos, la mejor forma de desarrollarse ha sido dentro del género del cabaret, donde se enfocan a un público adulto cien por ciento.
“Estos muchachos son jóvenes, (...) a pesar de haber hecho cine anteriormente, es como mi primera vez”, dijo Mariscal, “me siento padre, nueva… rescatada. Esto va a traer consecuencias, pues yo les auguro a todos estos muchachitos jóvenes que tienen tanto que dar”. Así pues, con la presencia de la figuras de la comedia y la televisión mexicana, los Riva Palacio llegan y abren el festival con sus huevitos, y dan el banderazo a la serie de actividades, proyecciones, festejos, conferencias y homenajes que se tienen preparados. Así pues, todo estuvo puesto y anoche en el Auditorio Telmex se dijo “acción”.
* que prestó sus voces a los personajes dieron el banderazo de salida de su segundo largometraje animado.
El filme con albur o sin albur, está direccionado a todo tipo de público. Los Riva Palacio lo hicieron bien en la primera entrega y aseguran, con micrófono en mano, que segundas partes sí son mejores. Hay que destacar que se habla de una película de animación, lo que hace que el caso de los irreverentes hermanos creativos, sea particular.
La verdad no fue fácil. Todo empezó como un juego en la web (www.huevocartoon.com) donde el internauta podía acceder a un sitio lleno de chistes mexicanotes, donde sus autores usaban sin censura y sin vergüenza la palabra “huevo” y palabras derivadas y no sólo eso si no que hicieron personajes visiblemente virtuales y con cara de huevo. El sitio de internet rompió récord de audiencia y luego se metieron en el cine con una historia sencilla; un huevo como cualquiera, quería ser un pollo como cualquiera. Por supuesto hubo que pulir el guión, cambiar la estrategia, intentar ser lo más familiar posible, lo lograron. Ahora la marca huevocartoons se importa hacia otras latitudes.
Gabriel y Rodolfo Rivapalacio son los directores del filme y es éste último quien afirmó durante la rueda de prensa ofrecida ayer por la tarde que “esta película en concreto, también refleja la cultura mexicana desde varios aspectos”. Destacó la inclusión de personajes de la comedia nacional como Carlos Espejel, Darío T. Pie, Angélica Vale, Bruno Bichir y Lucila Mariscal, quien vuelve al cine hecha una hueva.
Todos ellos “han aportado tanto a la cultura mexicana. (…) De qué otra forma podemos hacer una película de ‘huevitos’, no hay forma si no es a través de la animación” señaló Rodolfo. Lucila Mariscal por su parte, cuenta con su propio personaje y ella, como actriz, se siente rescatada al participar con este equipo al que ella califica de jóvenes.
El costo de la película fue de 40 millones de pesos, según dijo Paco Arriagada y el proceso de producción tuvo una duración de 19 meses. La realización fue en 3D pero el costo fue de 2D, según señalaron. En todo el trabajo colaboraron alrededor de 400 personas. Hoy día se planea llegar a otros países de Latinoamérica, luego de haber concluido el proceso de inclusión en los Estados Unidos.
Promueven la industria
Inevitable. Sobre el cuestionamiento de por qué una película tan evidentemente comercial abre el Festival Internacional de Cine en Guadalajara, para los Riva Palacio -y su trabajo es muestra de ello- si sólo se producen trabajos de búsqueda no se puede mantener o pretender tener una industria. En esta producción -superior a la primera entrega- participaron Huevocartoon Producciones, Elisa Salinas y Carlos Zepeda.
Otra película de huevos y un pollo es también “cine de autor, (porque) lo que nosotros hacemos no lo hace nadie, para que exista una industria tiene que tener una base comercial y me encanta que el festival mande ese mensaje”, destacó Rodolfo.
Aunque el filme animado maneja en su discurso el interés de ser accesible a todo tipo de público, los albures y el doble sentido no se ausentan del trabajo. Asimismo, hay que recordar que la marca también ha incursionado ya en teatro, donde por ser como son estos huevos, la mejor forma de desarrollarse ha sido dentro del género del cabaret, donde se enfocan a un público adulto cien por ciento.
“Estos muchachos son jóvenes, (...) a pesar de haber hecho cine anteriormente, es como mi primera vez”, dijo Mariscal, “me siento padre, nueva… rescatada. Esto va a traer consecuencias, pues yo les auguro a todos estos muchachitos jóvenes que tienen tanto que dar”. Así pues, con la presencia de la figuras de la comedia y la televisión mexicana, los Riva Palacio llegan y abren el festival con sus huevitos, y dan el banderazo a la serie de actividades, proyecciones, festejos, conferencias y homenajes que se tienen preparados. Así pues, todo estuvo puesto y anoche en el Auditorio Telmex se dijo “acción”.
* que prestó sus voces a los personajes dieron el banderazo de salida de su segundo largometraje animado.
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