Economía
Urge combatir cambio climático
Ante los líderes del G8 y G5, el Presidente Felipe Calderón expuso la necesidad de crear un mecanismo de financiamiento en la lucha contra el calentamiento global
L’AQUILA, Italia.- Reunido con los líderes de las principales economías desarrolladas y emergentes del mundo, el Presidente de México, Felipe Calderón, promovió su propuesta del Fondo Verde para contrarrestar los efectos del cambio climático.
Durante la sesión del foro de las principales economías sobre energía y cambio climático, expresó también su preocupación porque la recesión pueda inhibir un acuerdo sobre reducciones de carbono.
Calderón expresó: “No sé si llegaremos a Copenhague con un acuerdo sobre reducción de carbono. Estoy preocupado por el hecho de que la recesión pudiera inhibir su cumplimiento”. Hizo ver, sin embargo, que “un viaje de mil millas empieza por el primer paso”.
El Mandatario mexicano dio una amplia explicación de su propuesta para integrar un Fondo Verde, y sugirió iniciarlo con mil millones de dólares “para probarlo”, o con “cualquier cantidad que decidamos”.
El Fondo Verde, expuso, es un mecanismo de financiamiento en la lucha contra el cambio climático, en el que todos los países harán contribuciones, al igual que hacen organismos internacionales como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y otros.
Planteó que ello significa aplicar el principio de responsabilidad diferenciada, de acuerdo con las capacidades diferentes de cada país.
Ante los líderes del G8 y G5, el Presidente Calderón dijo que ya se han hecho “varios simulacros”, y en el caso de Estados Unidos, que tiene un alto nivel de ingreso per cápita y de emisiones, tendría una cuota de entre 15% y 20% de la cantidad total del fondo.
Indicó que ésa sería una cantidad similar a la que aportarían los países de la Unión Europea (UE), “pero lo que es importante es que en este fondo todos contribuiremos”.
En el caso de México, dijo, tendría acceso a 0.6% del fondo a nivel global; y la mayoría de los países en desarrollo tendrían una contribución de menos de 0.5 por ciento.
Aclaró que todos los países tendrán acceso al fondo, pues no se trata de recibir donativos o de un programa de beneficencia, sino de tener beneficios a través del hecho de reducir emisiones de carbono.
El titular del Ejecutivo mexicano propuso asignar una cuota por cada tonelada de carbono que se deje de emitir a la atmósfera.
Expuso que, por ejemplo, en México con la implementación de un programa de sustitución de lámparas incandescentes en los hogares, se ahorrarán 20 millones de toneladas de carbono emitidas al año, con lo que podría recibir 20 millones de dólares anuales.
Hizo ver que el Fondo Verde puede ser administrado por un banco o una organización multinacional, es decir que no generaría más burocracia.
Subrayó: “El manejo del fondo debe ser transparente. No propongo ninguna otra institución burocrática, creo que ya tenemos suficientes, incluso que deberíamos remplazar algunas de ellas”.
Sostuvo que apoyar esta propuesta permitirá llegar a Copenhague, Dinamarca, a la Cumbre sobre Cambio Climático, con una herramienta financiera para iniciar su trabajo.
Durante la sesión del foro de las principales economías sobre energía y cambio climático, expresó también su preocupación porque la recesión pueda inhibir un acuerdo sobre reducciones de carbono.
Calderón expresó: “No sé si llegaremos a Copenhague con un acuerdo sobre reducción de carbono. Estoy preocupado por el hecho de que la recesión pudiera inhibir su cumplimiento”. Hizo ver, sin embargo, que “un viaje de mil millas empieza por el primer paso”.
El Mandatario mexicano dio una amplia explicación de su propuesta para integrar un Fondo Verde, y sugirió iniciarlo con mil millones de dólares “para probarlo”, o con “cualquier cantidad que decidamos”.
El Fondo Verde, expuso, es un mecanismo de financiamiento en la lucha contra el cambio climático, en el que todos los países harán contribuciones, al igual que hacen organismos internacionales como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y otros.
Planteó que ello significa aplicar el principio de responsabilidad diferenciada, de acuerdo con las capacidades diferentes de cada país.
Ante los líderes del G8 y G5, el Presidente Calderón dijo que ya se han hecho “varios simulacros”, y en el caso de Estados Unidos, que tiene un alto nivel de ingreso per cápita y de emisiones, tendría una cuota de entre 15% y 20% de la cantidad total del fondo.
Indicó que ésa sería una cantidad similar a la que aportarían los países de la Unión Europea (UE), “pero lo que es importante es que en este fondo todos contribuiremos”.
En el caso de México, dijo, tendría acceso a 0.6% del fondo a nivel global; y la mayoría de los países en desarrollo tendrían una contribución de menos de 0.5 por ciento.
Aclaró que todos los países tendrán acceso al fondo, pues no se trata de recibir donativos o de un programa de beneficencia, sino de tener beneficios a través del hecho de reducir emisiones de carbono.
El titular del Ejecutivo mexicano propuso asignar una cuota por cada tonelada de carbono que se deje de emitir a la atmósfera.
Expuso que, por ejemplo, en México con la implementación de un programa de sustitución de lámparas incandescentes en los hogares, se ahorrarán 20 millones de toneladas de carbono emitidas al año, con lo que podría recibir 20 millones de dólares anuales.
Hizo ver que el Fondo Verde puede ser administrado por un banco o una organización multinacional, es decir que no generaría más burocracia.
Subrayó: “El manejo del fondo debe ser transparente. No propongo ninguna otra institución burocrática, creo que ya tenemos suficientes, incluso que deberíamos remplazar algunas de ellas”.
Sostuvo que apoyar esta propuesta permitirá llegar a Copenhague, Dinamarca, a la Cumbre sobre Cambio Climático, con una herramienta financiera para iniciar su trabajo.
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