Economía
Starbucks venderá café proveniente de Chiapas
Se trata de un grano cien por ciento mexicano, que enaltece la labor de caficultores
CIUDAD DE MÉXICO (10/MAR/2016).- Como parte de su apuesta por el café premium, y el impulso a los productos mexicanos, Starbucks México anunció el lanzamiento de
Starbucks Reserve México Finca Nueva Esperanza, que formará parte de su línea Reserve.
Se trata de un grano cien por ciento mexicano, que enaltece la labor de los caficultores chiapanecos y nos acerca a la cultura del café desde una experiencia totalmente nueva, con un sabor único de notas cítricas de limón y un toque de almendra", señaló la directora de Mercadotecnia de Starbucks México, Daniela Ortiz Lezama.
Explicó en un comunicado que se trata de una edición limitada de mil 800 bolsas de este grano, que los clientes podrán disfrutar a partir de este 10 de marzo y hasta agotar existencias, en las tiendas Arcos Bosques, Masaryk Spencer y Moliere 222.
Ortiz Lezama comentó que la experiencia de este nuevo grano cien por ciento mexicano comienza con la historia de la finca Nueva Esperanza, ubicada en La Concordia, Chiapas, un área natural de selva tropical al suroeste del país que produce café orgánico desde 1960.
"Para mí y mi familia es un gran orgullo que nuestra tradición y amor al café siga floreciendo después de 56 años, que fue cuando iniciamos con Finca Nueva Esperanza. Detrás de cada taza de café hay un esfuerzo de mucha gente, más de 60 personas en época de cosecha. Producir café con el equilibrio entre acidez, aroma y cuerpo es nuestro objetivo día a día", señaló Celia Moreno, propietaria de Finca Nueva Esperanza.
Starbucks Reserve México Finca Nueva Esperanza es el segundo café mexicano catalogado en el programa Starbucks Reserve, por su calidad y origen; el primero fue Starbucks Reserve Finca Nuevo México, originario de la Sierra Madre de Chiapas que debutó en 2014.
Finca Nueva Esperanza, ubicada a cuatro horas de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, fue comprada por Ricardo Baumann Brenner y su esposa Celia Moreno en 1960.
Tras el fallecimiento de Ricardo, trece años después, Celia dio continuidad a la producción de un café de gran calidad, con un meticuloso manejo en todos los procesos, desde la plantación de semilleros, creación de un vivero, cultivo, recolección y procesamiento de secado.
Actualmente, Celia y su hijo Alan son los responsables de continuar con esta tradición que suma más de 50 años de historia.
Se trata de un grano cien por ciento mexicano, que enaltece la labor de los caficultores chiapanecos y nos acerca a la cultura del café desde una experiencia totalmente nueva, con un sabor único de notas cítricas de limón y un toque de almendra", señaló la directora de Mercadotecnia de Starbucks México, Daniela Ortiz Lezama.
Explicó en un comunicado que se trata de una edición limitada de mil 800 bolsas de este grano, que los clientes podrán disfrutar a partir de este 10 de marzo y hasta agotar existencias, en las tiendas Arcos Bosques, Masaryk Spencer y Moliere 222.
Ortiz Lezama comentó que la experiencia de este nuevo grano cien por ciento mexicano comienza con la historia de la finca Nueva Esperanza, ubicada en La Concordia, Chiapas, un área natural de selva tropical al suroeste del país que produce café orgánico desde 1960.
"Para mí y mi familia es un gran orgullo que nuestra tradición y amor al café siga floreciendo después de 56 años, que fue cuando iniciamos con Finca Nueva Esperanza. Detrás de cada taza de café hay un esfuerzo de mucha gente, más de 60 personas en época de cosecha. Producir café con el equilibrio entre acidez, aroma y cuerpo es nuestro objetivo día a día", señaló Celia Moreno, propietaria de Finca Nueva Esperanza.
Starbucks Reserve México Finca Nueva Esperanza es el segundo café mexicano catalogado en el programa Starbucks Reserve, por su calidad y origen; el primero fue Starbucks Reserve Finca Nuevo México, originario de la Sierra Madre de Chiapas que debutó en 2014.
Finca Nueva Esperanza, ubicada a cuatro horas de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, fue comprada por Ricardo Baumann Brenner y su esposa Celia Moreno en 1960.
Tras el fallecimiento de Ricardo, trece años después, Celia dio continuidad a la producción de un café de gran calidad, con un meticuloso manejo en todos los procesos, desde la plantación de semilleros, creación de un vivero, cultivo, recolección y procesamiento de secado.
Actualmente, Celia y su hijo Alan son los responsables de continuar con esta tradición que suma más de 50 años de historia.
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