Economía
Sismo 'remata' economía de Japón
Las pérdidas superarían los 100 mil millones de dólares; los seguros tendrán que pagar hasta 34 mil 600 millones por los daños
TOKIO, JAPÓN (14/MAR/2011).- Automóviles yacen esparcidos en un puerto, una planta petrolera cercana arroja nubes de humo y varias fábricas arden en el Norte de Japón. Son los testimonios del duro golpe que la economía del país nipón está sufriendo a consecuencia del devastador sismo y del posterior tsunami, que han matado a miles de personas.
El terremoto de magnitud 9.0 que sobrevino el viernes desató una pared de olas que se tragó pueblos enteros. Plantas nucleares quedaron desactivadas y una de ellas corría el riesgo de que se fusionara su núcleo.
La destrucción pudiera quedar reflejada hoy en la bolsa de valores de Tokio el lunes. A primera hora de este lunes, el índice accionario japonés Nikkei abrió con una baja de 2.05% a 10 mil 044.17 puntos, mientras que el índice más amplio Topix retrocedía 2.06% por ciento a 896.68 unidades.
La economía de Japón, que el año pasado perdió su lugar como segunda en el mundo ante China, está ya en frágil estado. Ha pasado por dificultades durante 20 años, apenas consiguiendo débiles crecimientos entre períodos de baja, lastrada por una enorme deuda pública que equivale a 200% del producto interno bruto.
Koetsu Aizawa, profesor de economía de la Universidad de Saima, dice que serán necesarios decenas de miles de millones de dólares para reconstruir viviendas, caminos y otra infraestructura requiriendo gastos públicos que aumentarán la deuda nacional.
“A corto plazo, el mercado seguramente va a sufrir y las acciones se van a desplomar. La gente pudiera pensar que un debilitado Japón, eclipsado por China, ha recibido el golpe final por este terremoto”.
De hecho, el Banco de Japón ya anunció la mayor inyección de liquidez de su historia al poner hoy en el mercado siete billones de yenes (61 mil 400 millones de euros, 85 mil 700 millones de dólares).
“Estamos tomando todas las medidas posibles, incluyendo la aportación de liquidez, para garantizar la estabilidad de los mercados financieros y facilitar las operaciones”, declaró un portavoz del banco central nipón.
El alcance de los daños provocados por el sismo, el mayor en la historia de Japón, sigue sin conocerse con exactitud, pero el Gobierno ya ha advertido de que se trata de la peor crisis en el país tras la II Guerra Mundial.
Presiones al petróleo y metales
Los mercados de energía estarán bajo presión, según analistas, que coinciden en que Japón necesitará más energía para reemplazar la generación nuclear perdida, pero dudan que su dañada infraestructura pueda aumentar las importaciones con rapidez.
El país está luchando para evitar una fusión del núcleo en tres reactores, tras el desastre que ha dejado a más de un millón sin agua ni energía.
“Los precios del petróleo a corto plazo bajarán porque Japón es uno de los mayores importadores mundiales de petróleo y la economía japonesa será impactada de forma severa y negativa”, dijo Andrew Moorfield, jefe de la división de petróleo y gas del grupo bancario Lloyds.
“Los precios del petróleo a largo plazo subirán cuando la economía japonesa se recupere y la demanda de mercados emergentes continúe creciendo”.
Los mercados de energía subieron el mes pasado por un paro total de las exportaciones de petróleo libio y preocupaciones de que los disturbios se propaguen al mayor exportador mundial de petróleo, Arabia Saudita.
“Si bien el desastre japonés es de importancia significativa, el impacto inmediato sobre los precios del dependerá igual de la situación en Oriente Medio”.
Harry Tchilinguirian de BNP Paribas dijo que en el corto plazo, la paralización de industrias, transportes y viajes de Japón generarán un impacto negativo sobre la demanda de productos ligeros del petróleo.
“Una vez que la reconstrucción comience y la actividad industrial se normalice, podemos esperar un aumento de la demanda de destilados, pero también de la gasolina con una reanudación de los viajes por carretera”.
RADIOGRAFÍA
Parálisis industrial
Canon dijo que estaba discutiendo si era posible reiniciar la producción en tres plantas levemente afectadas por el sismo, una que fabrica lentes, otra que produce impresoras de inyección de tinta y otra que produce equipos para la fabricación de pantallas LCD.
-Honda Motor Co mantendrá cerradas sus plantas hoy, a excepción de una de motocicletas en la sureña isla de Kyushu. Honda fabricó en enero 69 mil 170 autos en Japón, donde genera 22% de su producción automotriz.
-Nissan Motor Co paralizó la producción en sus cuatro plantas de ensamblaje de automóviles en Japón y no reiniciará sus operaciones. Lo que suceda de hoy en adelante dependerá de si pueden asegurar un abastecimiento de piezas así como de recintos de reparación, indicó la firma. Nissan construyó en enero 81 mil 851 vehículos en Japón, donde realiza 22% de sus máquinas.
-Panasonic Corp indicó que las constantes réplicas le impide revisar dos plantas al norte del país, en una de ellas realiza lentes ópticos y otras partes electrónicas y otra en fabrica cámaras digitales y equipos. Un portavoz indicó que los dos sitios carecían de suministros adecuados de energía y agua.
-Sony Corp dijo que suspenderá operaciones hoy en ocho fábricas del Noreste de Japón. Una de ellas, que produce películas ópticas, fue inundada y mil trabajadores quedaron atrapados allí durante la noche.
-Toshiba señaló que su producción se detuvo en Iwate, donde realiza procesadores System LSI, los que son usados en microprocesadores y sensores de imágenes. La compañía comenzó a trabajar para volver a operar, pero no se sabe cuánto podrá demorar.
-Toyota Motor Co dijo que paralizó la producción en sus 12 plantas de Japón y que no ha podido realizar inspecciones en las áreas afectadas. La producción no será reiniciada este lunes. En enero Toyota construyó 234 mil 045 vehículos en Japón, donde hace 38% de su producción.
ANÁLISIS
Pronóstico de superávit comercial
Por Marco Corona Duran
En septiembre de 2004, México y Japón firmaron un acuerdo bilateral de comercio y cooperación económica: el Acuerdo de Asociación Económica (AAE) que entro en vigor en abril de 2005.
El principal objetivo de este acuerdo fue consolidar y fortalecer los ancestrales lazos comerciales de México con Japón. Una de los potenciales beneficios del AAE para México es el acceso preferencial al tercer mercado más grande del mundo, después de Estados Unidos y del bloque de la Unión Europea.
Como país, Japón posee la segunda economía del mundo, con un Producto Interno Bruto (PIB) nominal de 4.3 billones de dólares.
De acuerdo con la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 2003, Japón ocupó la segunda posición a nivel mundial como exportador al registrar un monto de 469.78 mil millones de dólares y el cuarto como importador, al alcanzar un total de 381.23 mil millones de dólares.
Japón es el cuarto socio comercial de México. De hecho, el intercambio entre México y Japón ha crecido 49% entre 2001 y 2009 al pasar de ocho mil 706 millones de dólares (MMDD) a 13 mil 004 MMDD lo que representa una tasa media anual de crecimiento de cinco por ciento.
El 55% de las exportaciones mexicanas a Japón son manufacturas, principalmente automóviles y celulares, así como plata. Mientras que 21% de las exportaciones son alimentos, principalmente carne de la especie porcina. El 94% de las importaciones mexicanas provenientes de Japón son manufacturas, principalmente autos y autopartes, 61% de las mismas corresponden a importaciones de insumos (bienes intermedios) que se utilizan para la producción de bienes finales de exportación.
Esto implica que existe una alta contribución de los insumos importados de Japón al potencial exportador del país.
Sin embargo, el saldo de la Balanza Comercial de México respecto a Japón ha sido históricamente deficitario: en 2008 se exportaron dos mil 068.10 millones de dólares y se importaron 16 mil 326.20 millones de dólares; en 2006 se exportaron mil 594 millones de dólares y se importaron 15 mil 295.2 millones de dólares; en 2004 se exportaron mil 190.5 millones de dólares se importaron 10 mil 583.4 millones de dólares.
Al cierre de 2009 México registró un déficit de nueve mil 790 millones de dólares.
Los eventos sísmicos acaecidos en los últimos días en Japón han causado un clima de incertidumbre que se espera se circunscriban únicamente en el corto y el mediano plazo.
Definitivamente es de esperarse que la mayoría de los proyectos de inversión japonesa en México sean pospuestos y se presente una reducción en el volumen de las exportaciones de productos manufacturados (especialmente automóviles) por lo que se anticipa una reducción en las compras industriales y en el empleo del sector manufacturero automotriz.
En particular, las exportaciones mexicanas del sector industrial a Japón tendrán una significativa contracción que podría durar hasta nueve meses.
Como contraparte y específicamente, los sectores materiales de construcción y agropecuario nacional tendrán un inusitado incremento en sus pedidos de exportaciones por la mayor demanda de alimentos y otros productos relacionados que habrá en el muy corto plazo, para compensar la pérdida de cosechas y alimentos por la contaminación por radioactividad que habrá en parte del territorio japonés.
Así, en términos agregados la Balanza Comercial mexicana con Japón podría experimentar un repentino aunque temporal superávit comercial.
Marco Corona Duran/ doctor en Economía.
Secretaría de Economía
Ven oportunidad para exportar
CIUDAD DE MÉXICO.- La relación comercial entre México y Japón está basada en productos agropecuarios e industriales que podrían tener mayor demanda tras el terremoto y el tsunami que azotó al país asiático.
Para México, Japón es uno de los mercados más grandes y atractivos del mundo en materia comercial, al igual que Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea.
México es su primer proveedor de mango, melón, espárrago y garbanzo, ya que Japón es un país con pocos recursos naturales, por lo cual importan casi 80% de sus alimentos, lo que significa una gran oportunidad de negocio para el sector agropecuario mexicano.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) reveló que cerca de 75% de las exportaciones agropecuarias de México a Japón se concentran en carne de cerdo, aguacates, carne de bovino, atún, melón, mango y café.
Tras los daños naturales en Japón, Bruno Ferrari, titular de la Secretaría de Economía, dijo que podría representar una oportunidad para México y una forma de apoyar a los ciudadanos japoneses.
El terremoto de magnitud 9.0 que sobrevino el viernes desató una pared de olas que se tragó pueblos enteros. Plantas nucleares quedaron desactivadas y una de ellas corría el riesgo de que se fusionara su núcleo.
La destrucción pudiera quedar reflejada hoy en la bolsa de valores de Tokio el lunes. A primera hora de este lunes, el índice accionario japonés Nikkei abrió con una baja de 2.05% a 10 mil 044.17 puntos, mientras que el índice más amplio Topix retrocedía 2.06% por ciento a 896.68 unidades.
La economía de Japón, que el año pasado perdió su lugar como segunda en el mundo ante China, está ya en frágil estado. Ha pasado por dificultades durante 20 años, apenas consiguiendo débiles crecimientos entre períodos de baja, lastrada por una enorme deuda pública que equivale a 200% del producto interno bruto.
Koetsu Aizawa, profesor de economía de la Universidad de Saima, dice que serán necesarios decenas de miles de millones de dólares para reconstruir viviendas, caminos y otra infraestructura requiriendo gastos públicos que aumentarán la deuda nacional.
“A corto plazo, el mercado seguramente va a sufrir y las acciones se van a desplomar. La gente pudiera pensar que un debilitado Japón, eclipsado por China, ha recibido el golpe final por este terremoto”.
De hecho, el Banco de Japón ya anunció la mayor inyección de liquidez de su historia al poner hoy en el mercado siete billones de yenes (61 mil 400 millones de euros, 85 mil 700 millones de dólares).
“Estamos tomando todas las medidas posibles, incluyendo la aportación de liquidez, para garantizar la estabilidad de los mercados financieros y facilitar las operaciones”, declaró un portavoz del banco central nipón.
El alcance de los daños provocados por el sismo, el mayor en la historia de Japón, sigue sin conocerse con exactitud, pero el Gobierno ya ha advertido de que se trata de la peor crisis en el país tras la II Guerra Mundial.
Presiones al petróleo y metales
Los mercados de energía estarán bajo presión, según analistas, que coinciden en que Japón necesitará más energía para reemplazar la generación nuclear perdida, pero dudan que su dañada infraestructura pueda aumentar las importaciones con rapidez.
El país está luchando para evitar una fusión del núcleo en tres reactores, tras el desastre que ha dejado a más de un millón sin agua ni energía.
“Los precios del petróleo a corto plazo bajarán porque Japón es uno de los mayores importadores mundiales de petróleo y la economía japonesa será impactada de forma severa y negativa”, dijo Andrew Moorfield, jefe de la división de petróleo y gas del grupo bancario Lloyds.
“Los precios del petróleo a largo plazo subirán cuando la economía japonesa se recupere y la demanda de mercados emergentes continúe creciendo”.
Los mercados de energía subieron el mes pasado por un paro total de las exportaciones de petróleo libio y preocupaciones de que los disturbios se propaguen al mayor exportador mundial de petróleo, Arabia Saudita.
“Si bien el desastre japonés es de importancia significativa, el impacto inmediato sobre los precios del dependerá igual de la situación en Oriente Medio”.
Harry Tchilinguirian de BNP Paribas dijo que en el corto plazo, la paralización de industrias, transportes y viajes de Japón generarán un impacto negativo sobre la demanda de productos ligeros del petróleo.
“Una vez que la reconstrucción comience y la actividad industrial se normalice, podemos esperar un aumento de la demanda de destilados, pero también de la gasolina con una reanudación de los viajes por carretera”.
RADIOGRAFÍA
Parálisis industrial
Canon dijo que estaba discutiendo si era posible reiniciar la producción en tres plantas levemente afectadas por el sismo, una que fabrica lentes, otra que produce impresoras de inyección de tinta y otra que produce equipos para la fabricación de pantallas LCD.
-Honda Motor Co mantendrá cerradas sus plantas hoy, a excepción de una de motocicletas en la sureña isla de Kyushu. Honda fabricó en enero 69 mil 170 autos en Japón, donde genera 22% de su producción automotriz.
-Nissan Motor Co paralizó la producción en sus cuatro plantas de ensamblaje de automóviles en Japón y no reiniciará sus operaciones. Lo que suceda de hoy en adelante dependerá de si pueden asegurar un abastecimiento de piezas así como de recintos de reparación, indicó la firma. Nissan construyó en enero 81 mil 851 vehículos en Japón, donde realiza 22% de sus máquinas.
-Panasonic Corp indicó que las constantes réplicas le impide revisar dos plantas al norte del país, en una de ellas realiza lentes ópticos y otras partes electrónicas y otra en fabrica cámaras digitales y equipos. Un portavoz indicó que los dos sitios carecían de suministros adecuados de energía y agua.
-Sony Corp dijo que suspenderá operaciones hoy en ocho fábricas del Noreste de Japón. Una de ellas, que produce películas ópticas, fue inundada y mil trabajadores quedaron atrapados allí durante la noche.
-Toshiba señaló que su producción se detuvo en Iwate, donde realiza procesadores System LSI, los que son usados en microprocesadores y sensores de imágenes. La compañía comenzó a trabajar para volver a operar, pero no se sabe cuánto podrá demorar.
-Toyota Motor Co dijo que paralizó la producción en sus 12 plantas de Japón y que no ha podido realizar inspecciones en las áreas afectadas. La producción no será reiniciada este lunes. En enero Toyota construyó 234 mil 045 vehículos en Japón, donde hace 38% de su producción.
ANÁLISIS
Pronóstico de superávit comercial
Por Marco Corona Duran
En septiembre de 2004, México y Japón firmaron un acuerdo bilateral de comercio y cooperación económica: el Acuerdo de Asociación Económica (AAE) que entro en vigor en abril de 2005.
El principal objetivo de este acuerdo fue consolidar y fortalecer los ancestrales lazos comerciales de México con Japón. Una de los potenciales beneficios del AAE para México es el acceso preferencial al tercer mercado más grande del mundo, después de Estados Unidos y del bloque de la Unión Europea.
Como país, Japón posee la segunda economía del mundo, con un Producto Interno Bruto (PIB) nominal de 4.3 billones de dólares.
De acuerdo con la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 2003, Japón ocupó la segunda posición a nivel mundial como exportador al registrar un monto de 469.78 mil millones de dólares y el cuarto como importador, al alcanzar un total de 381.23 mil millones de dólares.
Japón es el cuarto socio comercial de México. De hecho, el intercambio entre México y Japón ha crecido 49% entre 2001 y 2009 al pasar de ocho mil 706 millones de dólares (MMDD) a 13 mil 004 MMDD lo que representa una tasa media anual de crecimiento de cinco por ciento.
El 55% de las exportaciones mexicanas a Japón son manufacturas, principalmente automóviles y celulares, así como plata. Mientras que 21% de las exportaciones son alimentos, principalmente carne de la especie porcina. El 94% de las importaciones mexicanas provenientes de Japón son manufacturas, principalmente autos y autopartes, 61% de las mismas corresponden a importaciones de insumos (bienes intermedios) que se utilizan para la producción de bienes finales de exportación.
Esto implica que existe una alta contribución de los insumos importados de Japón al potencial exportador del país.
Sin embargo, el saldo de la Balanza Comercial de México respecto a Japón ha sido históricamente deficitario: en 2008 se exportaron dos mil 068.10 millones de dólares y se importaron 16 mil 326.20 millones de dólares; en 2006 se exportaron mil 594 millones de dólares y se importaron 15 mil 295.2 millones de dólares; en 2004 se exportaron mil 190.5 millones de dólares se importaron 10 mil 583.4 millones de dólares.
Al cierre de 2009 México registró un déficit de nueve mil 790 millones de dólares.
Los eventos sísmicos acaecidos en los últimos días en Japón han causado un clima de incertidumbre que se espera se circunscriban únicamente en el corto y el mediano plazo.
Definitivamente es de esperarse que la mayoría de los proyectos de inversión japonesa en México sean pospuestos y se presente una reducción en el volumen de las exportaciones de productos manufacturados (especialmente automóviles) por lo que se anticipa una reducción en las compras industriales y en el empleo del sector manufacturero automotriz.
En particular, las exportaciones mexicanas del sector industrial a Japón tendrán una significativa contracción que podría durar hasta nueve meses.
Como contraparte y específicamente, los sectores materiales de construcción y agropecuario nacional tendrán un inusitado incremento en sus pedidos de exportaciones por la mayor demanda de alimentos y otros productos relacionados que habrá en el muy corto plazo, para compensar la pérdida de cosechas y alimentos por la contaminación por radioactividad que habrá en parte del territorio japonés.
Así, en términos agregados la Balanza Comercial mexicana con Japón podría experimentar un repentino aunque temporal superávit comercial.
Marco Corona Duran/ doctor en Economía.
Secretaría de Economía
Ven oportunidad para exportar
CIUDAD DE MÉXICO.- La relación comercial entre México y Japón está basada en productos agropecuarios e industriales que podrían tener mayor demanda tras el terremoto y el tsunami que azotó al país asiático.
Para México, Japón es uno de los mercados más grandes y atractivos del mundo en materia comercial, al igual que Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea.
México es su primer proveedor de mango, melón, espárrago y garbanzo, ya que Japón es un país con pocos recursos naturales, por lo cual importan casi 80% de sus alimentos, lo que significa una gran oportunidad de negocio para el sector agropecuario mexicano.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) reveló que cerca de 75% de las exportaciones agropecuarias de México a Japón se concentran en carne de cerdo, aguacates, carne de bovino, atún, melón, mango y café.
Tras los daños naturales en Japón, Bruno Ferrari, titular de la Secretaría de Economía, dijo que podría representar una oportunidad para México y una forma de apoyar a los ciudadanos japoneses.
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