Economía
Senadores cuestionan a Cofetel por fallas en 'apagón analógico'
Preocupa a senadora que señalaran a elecciones como razón para la suspensión de la transición
CIUDAD DE MÉXICO (13/JUN/2013).- Las comisiones unidas de Radio, Televisión y Cinematografía; Comunicaciones y Transportes del Senado cuestionaron a funcionarios de la Cofetel las fallas en planeación y la suspensión del “apagón analógico” en Tijuana, y el hecho de que los televisores analógicos sigan en venta en el país.
La presidenta de la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía, Alejandra Barrales Magdaleno, consideró preocupante que el “apagón analógico” se haya pospuesto debido a las elecciones que se llevarán a cabo en Baja California.
En el marco de la comparecencia del pleno de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), encabezado por Mony de Swaan, indicó que "resulta increíble" que tras haberse planeado desde hace casi 10 años, no se haya podido lograr la transición en la primera ciudad propuesta.
Además, la senadora del Partido de la Revolución Democrática (PRD) subrayó que "nos preocupa que haya sido el tema electoral que se haya señalado como la razón para la propuesta de suspensión".
"Nos preocupa porque además en el caso de Tijuana, en donde tenemos reportado un padrón, una lista nominal de un millón 214 mil ciudadanos, como está determinado, hay una población de 30 mil habitantes que serían los sujetos de participar en este proceso electoral, y donde la cobertura o más bien el faltante de cobertura sería de 2.6 por ciento de quienes integran este listado", expuso.
Sobre el tema, el presidente de la Comisión de Comunicaciones y Transportes del Senado, Javier Lozano Alarcón, expresó que el "apagón analógico" es una política pública que permitirá mayor diversidad, calidad y competencia en cuanto a los servicios de radiodifusión.
Sin embargo, afirmó que hay "muchas" dudas en cuanto a su planeación, programación e implementación, luego de que se suscitó una serie de problemas que causaron que se modificara la fecha para realizarlo.
"Queremos saber ¿qué pasó en esa entidad?, ¿Cómo se corregirá la situación?, ¿Cómo se le va a hacer para el resto del país?", precisó.
Lozano Alarcón recalcó su disposición para que el Senado de la República encauce el proceso de esta política, a fin de que la liberación del espectro radioeléctrico se realice de manera exitosa.
A su vez, a senadora priista Marcela Guerra cuestionó a los comisionados de la Cofetel porqué se sigue permitiendo la venta de "televisiones arqueológicas" en las cadenas comerciales, cuando se realiza ya un gasto público para que los ciudadanos transiten hacia una nueva tecnología.
"Y en ese sentido es ¿qué está pasando también con la Norma Oficial Mexicana, es la número 192, por qué hasta ahorita se está procesando?" añadió la legisladora del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El senador Gerardo Flores, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), opinó que la venta de aparatos analógicos "es una puñalada por la espalda para los hogares mexicanos", ya que en 2011 se vendieron 1.5 millones de televisores de ese tipo y 1.4 millones digitales.
Criticó que aunque se sabía la fecha del apagón no se hayan tomado las medidas suficientes para evitar que las familias, sobre todo las de menores recursos económicos, siguieran comprando televisiones que sólo captan señales analógicas.
La presidenta de la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía, Alejandra Barrales Magdaleno, consideró preocupante que el “apagón analógico” se haya pospuesto debido a las elecciones que se llevarán a cabo en Baja California.
En el marco de la comparecencia del pleno de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), encabezado por Mony de Swaan, indicó que "resulta increíble" que tras haberse planeado desde hace casi 10 años, no se haya podido lograr la transición en la primera ciudad propuesta.
Además, la senadora del Partido de la Revolución Democrática (PRD) subrayó que "nos preocupa que haya sido el tema electoral que se haya señalado como la razón para la propuesta de suspensión".
"Nos preocupa porque además en el caso de Tijuana, en donde tenemos reportado un padrón, una lista nominal de un millón 214 mil ciudadanos, como está determinado, hay una población de 30 mil habitantes que serían los sujetos de participar en este proceso electoral, y donde la cobertura o más bien el faltante de cobertura sería de 2.6 por ciento de quienes integran este listado", expuso.
Sobre el tema, el presidente de la Comisión de Comunicaciones y Transportes del Senado, Javier Lozano Alarcón, expresó que el "apagón analógico" es una política pública que permitirá mayor diversidad, calidad y competencia en cuanto a los servicios de radiodifusión.
Sin embargo, afirmó que hay "muchas" dudas en cuanto a su planeación, programación e implementación, luego de que se suscitó una serie de problemas que causaron que se modificara la fecha para realizarlo.
"Queremos saber ¿qué pasó en esa entidad?, ¿Cómo se corregirá la situación?, ¿Cómo se le va a hacer para el resto del país?", precisó.
Lozano Alarcón recalcó su disposición para que el Senado de la República encauce el proceso de esta política, a fin de que la liberación del espectro radioeléctrico se realice de manera exitosa.
A su vez, a senadora priista Marcela Guerra cuestionó a los comisionados de la Cofetel porqué se sigue permitiendo la venta de "televisiones arqueológicas" en las cadenas comerciales, cuando se realiza ya un gasto público para que los ciudadanos transiten hacia una nueva tecnología.
"Y en ese sentido es ¿qué está pasando también con la Norma Oficial Mexicana, es la número 192, por qué hasta ahorita se está procesando?" añadió la legisladora del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El senador Gerardo Flores, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), opinó que la venta de aparatos analógicos "es una puñalada por la espalda para los hogares mexicanos", ya que en 2011 se vendieron 1.5 millones de televisores de ese tipo y 1.4 millones digitales.
Criticó que aunque se sabía la fecha del apagón no se hayan tomado las medidas suficientes para evitar que las familias, sobre todo las de menores recursos económicos, siguieran comprando televisiones que sólo captan señales analógicas.
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