Economía
Se esfuma el momento Kodak
La empresa fotográfica se acoge al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos, que le permite negociar mientras sigue trabajando
Kodak fue incapaz de aprovechar la invención de la cámara digital por temor a destruir su principal negocio, el de la venta de película tradicional.
La compañía con sede en Rochester, Nueva York, se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos, lo que le permite negociar con sus acreedores mientras sigue funcionando.
Además, la empresa informó que negoció créditos por 950 millones de dólares con el banco Citigroup, por lo que ''considera que tiene liquidez suficiente para operar su actividad bajo el capítulo 11 y proveer productos y servicios a sus clientes como habitualmente''.
Las filiales de Kodak fuera de Estados Unidos no están incluidas en la solicitud de acogida a la Ley de Quiebras, que fue presentada en un tribunal de Nueva York, por lo que seguirán cumpliendo con sus compromisos financieros con normalidad, aseguró la compañía. De hecho, la fábrica que la empresa tiene en el municipio de Zapopan aseguró que seguirá trabajando con normalidad.
''Kodak está dando un importante paso para permitir que la empresa complete su transformación'', dijo el presidente y consejero delegado de la firma, el español Antonio Pérez, quien aseguró que la compañía ''ya ha salido de manera eficiente de algunas de sus operaciones tradicionales''.
Esa salida ha supuesto desde 2003 el cierre de más de una decena de plantas, un centenar de laboratorios y 47 mil despidos, pero según el máximo responsable de Kodak este proceso supondrá ''completar la transformación al solventar aún más la estructura de costos''.
La firma espera ver su plan de reestructuración aprobado por la Justicia de su país para volver a un funcionamiento normal después de 2013.
Con activos por cinco mil 100 millones de dólares y una deuda que asciende a seis mil 800 millones, la compañía fundada por George Eastman se ha visto obligada a declararse en suspensión de pagos después de sumar tres ejercicios fiscales consecutivos de pérdidas.
CRONOLOGÍA
3 de enero
La Bolsa de Valores de Nueva York advierte a Kodak que sus acciones serán retiradas de la lista de emisoras si el precio permanece abajo de un dólar.
4 de enero
The Wall Street Journal reporta que Kodak se prepara para acogerse a la Ley de Bancarrota.
11 de enero
La compañía anuncia un cambio en su estructura de negocio con el que busca acelerar su transformación en una empresa digital.
CLAVES
Un ícono empresarial en la historia estadounidense
1 George Eastman, un estudiante que abandonó la preparatoria en el Norte del Estado de Nueva York, sería el fundador de Kodak en 1880. Para poner en marcha su negocio gastó 125 dólares.
2 En ocho años, el nombre de Kodak se convirtió en una marca. La compañía había introducido la máquina fotográfica manual al igual que un rollo de película, convirtiéndose en un el fabricante dominante.
3 Kodak desarrolló cámaras manuales vendidas a precios populares y proveía la película que mantenía a los consumidores comprando productos de la firma e inyectando dinero a la compañía.
4 Casi un siglo después de la fundación de Kodak, el astronauta Neil Armstrong usó una cámara de la empresa del tamaño de una caja de zapatos para captar imágenes mientras se convertía en 1969 en el primer hombre en caminar en la Luna.
5 Seis años después de la caminata de Armstrong, y no mucho tiempo después de que el músico Paul Simon dijo a su madre que “no le quitara su Kodachrome”, Kodak inventó la cámara digital.
6 En 1994, Kodak escindió un negocio de químicos, Eastman Chemical Co, que demostró ser más exitoso.
7 La frase “un momento Kodak”, clásica de los anuncios de la empresa, es conocida en varios países del mundo.
TELÓN DE FONDO
Una caída en cámara lenta
Tras la quiebra de Kodak todos dirán que la empresa fotográfica no supo adaptarse a la era digital a la que ella misma dio a luz con la invención de la primera cámara de este tipo en 1975.
Y puede ser una verdad que toma el rostro de la ironía, pues el miedo a que el nuevo dispositivo destruyera su lucrativo negocio de película tradicional para cámaras de carrete hizo que la firma no sacase provecho del invento de uno de sus ingenieros, Steven Sasson. Un error con el que Kodak empezó a cavar su propia tumba.
No fue el único, pues los analistas financieros afirman que las empresas japonesas supieron aprovechar mejor el terreno en el que Kodak era el mandamás: Fuji se posicionó con fuerza en el negocio de los carretes tradicionales mientras las también niponas Canon y Sony comenzaban a explorar las amplias posibilidades que traía consigo la cámara digital que Kodak decidió desechar.
Pero la empresa fotográfica aún tiene una oportunidad. El préstamo y la protección por bancarrota de los acreedores comerciales estadounidenses podría proporcionar a Kodak el tiempo que necesita para encontrar compradores para sus mil 100 patentes digitales, casi lo único de valor que le queda, ya que las patentes pueden ser vendidas durante el proceso de bancarrota.
La compañía ha pasado de tener 64 mil empleados en 2003 a 17 mil el año pasado, al tiempo que sus ingresos se han reducido a la mitad, pues en 2003 superaban los 13 mil millones de dólares y en 2011 se redujeron a seis mil millones.
Su descenso ha llevado a un desplome en bolsa de 90% en los últimos 12 meses, por el que incluso dejará de cotizar en la bolsa de Nueva York (NYSE), a la que llegó en 1905, ya que el organismo regulador ha pedido la suspensión inmediata de la negociación de sus acciones.
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