Economía
Recomiendan no abusar de las compras a meses sin intereses
Bajo este esquema, los expertos sólo aconsejan comprar bienes prioritarios cuya vida útil sea mayor al plazo del crédito
Los plazos van desde los tres hasta los 48 meses dependiendo del operador financiero.
Los meses sin intereses son un beneficio de cualquier plástico ya sea bancario o departamental pero, si no se usa con mesura, puede llegar a convertirse en un problema, aseguró Sofía Macías, vocera del programa Consumo Inteligente de MasterCard.
Los expertos aseguraron que para manejar este tipo de plan se tienen que tomar en cuenta ciertas reglas. Una de ellas consiste en adquirir artículos que se tengan como prioridad.
Éstos deben de tener una vida útil mayor al plazo en el que se adquirió el producto, “los tarjetahabientes deberán ser constantes con cada mensualidad, pero si no cumplen caerán en una deuda ordinaria.
Es relevante tener presente que este tipo de esquema consumirá una parte de su capacidad de pago, aunque se maneje sin intereses.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) explicó que las personas deben tener un control exacto que las compras bajo ese esquema; de no ser así causará un descontrol en su balance financiero.
Rosa María Castanedo, directora de campañas de ventas de créditos al consumo de HSBC, mencionó que el plan de meses sin intereses tiene ventajas, siempre y cuando se tenga presente la capacidad de pago.
Marco Carrera, vocero de la Condusef, insistió en que las personas “no deben abusar”. Estos planes, dijo, tendrán sentido siempre y cuando el objeto que se adquiera sea un bien de consumo duradero.
Muchos de los clientes que hacen compras a meses sin intereses castigan su capacidad de pago.
“Este esquema es una desventaja desde la organización financiera, debido a que los consumidores se confían y suman poco a poco más compras, finalizando con un pago mensual enorme que terminará afectando la economía familiar”, aseguró Juan José Salas Méndez, especialista en finanzas personales.
Como medida preventiva, Sofía Macías recomendó verificar que dicha promoción no vaya a caer en un periodo de gastos fuertes, ya que probablemente el costo total podrá desbalancear su presupuesto anual y se empezarán a generar intereses por el saldo promedio.
Lo ideal es que se pague en tiempo y forma, para que no se tenga ningún problema al momento de cubrir el monto total. Uno de los aspectos que debe considerar el cliente es el Costo Anual Total (CAT) de su tarjeta de crédito, así como manejar un aceptable nivel de endeudamiento, el cual no debe rebasar 35% de su ingreso mensual y mantener a raya todos los créditos para no caer en morosidad y problemas de pagos.
El funcionario de la Condusef explicó que “idealmente” todas las tarjetas tienen un tope, por lo que es primordial mantenerse informado de todos los movimientos que se incluyen en la cuenta. “Con eso se estará al tanto de los estados financieros y se manejará un aceptable control sobre las compras, y de esta forma, se podrá cumplir de manera puntal con sus obligaciones”.
De acuerdo con Juan José Salas Méndez, quien también es catedrático de la Universidad Iberoamericana, en México se carece de cultura financiera y los usuarios, aunque están conscientes de sus deudas, no toman las medidas necesarias para dejar de gastar. “La regla de la tarjeta de crédito y finanzas personales es no gastar más de lo que se gana”.
El problema no son los meses sin intereses, sino cuando ya se acumuló una cantidad mayor de lo que realmente se puede pagar.
Otro de los problemas, agregó, es que cuando se rebasa ese límite, hay personas que optan por sacar dinero de una tarjeta para liquidar otra o dejar de hacer cosas debido a que el plástico lo está comiendo en pagos mínimos, ahí está el verdadero problema”.
Por ello, el académico insistió que la tarjeta de crédito no es dinero extra; se debe de ver como una medida de pago que trae consigo beneficios y un control de su presupuesto.
Los tarjetahabientes que sepan administrase harán de ella una excelente herramienta, pero de otra manera terminará con su balance financiero.
Antonio Perdomo, director ejecutivo de créditos al consumo de HSBC, sugirió que antes de adquirir un artículo se investigue el esquema en el cual se entrará junto con sus condiciones de compra a meses sin intereses o tasa fija.
“Hay que ver qué otros beneficios se tienen, ya que muchas entidades bancarias lanzan constantemente promociones adicionales”.
Si no se analiza lo que se adquiere, las personas se pueden perder en el camino al descapitalizar sus ingresos mensuales; con ello, podrían poner en peligro su estabilidad económica y familiar.
PARA SABER
Fraude, preocupación del trajetahabiente
La mayor preocupación de los usuarios de tarjetas de crédito o débito es la posibilidad de sufrir el robo o extravío, con el consecuente fraude. Ante esta problemática, hay instituciones que brindan mayor protección a los clientes, mediante la emisión de plásticos con “blindaje”.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), informa que esta mayor protección es una alternativa más para los clientes, que se debe cotejar con el costo-beneficio.
FICHA TÉCNICA
Aproveche promociones
Los especialistas coincidieron que antes de comprar un producto evalúe si lo necesita, ya que las compras por impulso son las más peligrosas.
Es primordial comparar el precio del producto en distintos establecimientos; ya que como consumidores se debe ser bastante analítico y no dejarse llevar por un impulso.
Tomar en cuenta el número de pagos a los que se está comprometiendo y calcularlos en su presupuesto mensual.
Utilice este esquema para adquirir bienes duraderos, cuyo beneficio continúe más allá de su deuda.
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