Economía
Pide CTM desaparecer Comisión de Salarios Mínimos
Juan Carlos Velasco, secretario de transporte de la CTM dice que el panorama es desalentador porque los patrones y la representación gubernamental en la CNSM argumentan que se afectaría el empleo
Juan Carlos Velasco, secretario de Transporte de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), señaló que es muy difícil que se dé un incremento superior en términos reales a los que se han dado en lo que va de la presente administración, porque los patrones y la representación gubernamental en la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CNSM), argumentan que se afectaría al empleo.
En entrevista, Velasco resaltó que en el último lustro los salarios han tenido un aumento de 13 pesos y el gobierno señala que hay estudios que han bajado los precios, por ejemplo, de los refrigeradores, pero cuestionó: "Cuántos refrigeradores compra un trabajador en toda su vidas?", en cambio, "¿cuántos kilos de jitomate, tortillas, café, o litros de leche o aceite necesita?.
Por ello, consideró que ante los escasos resultados que ha tenido, es necesaria la desaparición de la CNSM y que se homologuen las tres regiones geográficas que se establecen para los mínimos. "Se debe acabar con la injusticia de tener tres zonas diferentes, en donde unos ganen mucho menos que otros".
Insistió en que es inconcebible que cada año, el alza a los mínimos resulte un golpe en lugar de una buena noticia para los trabajadores, por lo que se debe hacer justicia y tengan capacidad de completar una canasta básica.
Subrayó que en la pasada legislatura del Congreso de la Unión, cuando fue diputado federal promovió una iniciativa para desaparecer la CNSM y que los factores de la producción, capital y trabajo se reunieran de septiembre a noviembre de cada año y lograran un acuerdo.
En un esquema así, expuso, "en caso de no haber consenso, el último día de noviembre pasaran a la Cámara de Diputados los estudios y propuestas que cada parte tuviera para que esta instancia fije el incremento a los salarios mínimos.
Para este proceso, planteó, el gobierno no debe tomar partido sino que se convierta en un facilitador "y no que no meta la cuchara", ya que cuando lo hace, generalmente se inclina a favor de los intereses de los empresarios.
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