Economía
Ofrecen ocho mil MDP en empeños
Muchos negocios de préstamo se aprovechan de la situación crítica de las personas que no tienen recursos para enfrentar sus deudas
CIUDAD DE MÉXICO.- El crecimiento del desempleo y el sobreendeudamiento, se convirtió en una oportunidad para el surgimiento de nuevos negocios que lucran con la desesperación de las familias.
En los últimos meses, creció el número de empresas que ofrecen préstamos a cambio de la factura del auto o las escrituras de un inmueble.
Por lo general, estos negocios no cuentan con registro ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ni tampoco operan bajo la figura de casas de empeño.
Marco Carrera, director de estudios de mercado de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios
Financieros (Condusef), afirmó que el nacimiento de estos establecimientos es "un foco amarillo", debido a que no cuentan con ninguna regulación.
Admitió que se observa un incremento en el número de empresas que ofrecen préstamos a cambio de bienes.
"Y muchas de éstas se aprovechan de la situación crítica de las personas que no tienen recursos para enfrentar sus deudas".
Incluso, hay quienes ante la insistencia de los despachos de cobranza de los bancos, optan por esta salida y piensan que hipotecar su casa puede ser una solución.
Roberto Bello, director general de estudios sobre consumo de la Profeco, sugirió efectuar cualquier operación de "empeño" con negocios que se ubiquen en el sector formal; ya que de no hacerlo, las personas podrían correr riesgos.
Es importante, dijo, que corroboren que el contrato de adhesión de estos negocios esté registrado ante la Profeco o la Condusef, en caso de ser una institución que integra el sistema financiero.
Exigen mayor regulación
Marco Carrera afirmó que es primordial promover una legislación que regule a este tipo de negocios.
En los últimos meses, este tipo de empresas se publicitan a través de medios de comunicación impresos.
Una de ellas, se denomina EC, que ofrece préstamos para autos o inmuebles con una tasa de 3% mensual y un Costo Anual Total (CAT) de 50%.
De acuerdo con información que se recabó en la misma compañía, para el empeño de un bien inmueble, se financia en promedio el 25% de su valor. El cliente debe pagar los gastos notariales por la hipoteca.
El crédito se puede autorizar el mismo día para el caso de autos y puede tardar hasta 20 para bienes inmuebles. La condición es que se ubiquen en el Distrito Federal y la zona metropolitana.
Al buscar a directivos de la empresa para abundar sobre los diversos planes de financiamiento, éstos se negaron a dar declaraciones.
En su página de internet, especifica que para préstamos por un bien inmueble, éste debe registrarse ante notario.
Los inmuebles susceptibles de garantía, deben ubicarse en el Distrito Federal, municipios conurbados del valle de México, valle de Toluca y valle de Chalco.
Marco Carrera, directivo de la Condusef, afirmó que estas nuevas empresas, por lo general, no son casas de empeño.
"Es factible que algunas de ellas sean Sofomes o Sofoles; sin embargo, hay negocios que, al no acreditarse con suficiente claridad, implican elevados riesgos", precisó.
Las casas de empeño
En México, existen más de 250 casas de empeño, según cálculos de la Profeco y de la Condusef.
Estos establecimientos representan la "más clara" operación del crédito prendario, ya que constituyen una fuente de crédito relativamente barato para los sectores más pobres.
Los prestamistas prendarios pueden considerarse como intermediarios financieros, ya que buscan utilidades con los intereses que cobran.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros detalló que cuando los objetos que se empeñan no se recuperan, los prestamistas no pueden cobrar intereses vencidos y pueden poner a la venta los objetos.
Por lo general, estas entidades aceptan: automóviles y bienes inmuebles, televisores mayores de 21 pulgadas, estéreos, mini componentes, herramientas, aparatos electrodomésticos, DVD.
En su lista se incluyen: reproductores de CD portátil, navajas de bolsillo, bolígrafos de firma, cámaras fotográficas compactas, lentes y encendedores.
En ningún caso aceptan animales vivos, material pornográfico, armas, ni ciertos modelos obsoletos de artículos electrónicos.
Lo que cobran
Roberto Bello, directivo de la Profeco, advirtió que hay una casa de empeño que llega a cobrar un CAT de hasta 1000% anual, debido a que la tasa de interés que aplica al mes llega a ser de 23%.
Sin embargo, el promedio del CAT que cobran las casas privadas es de 257%, mientras que las de asistencia alcanza en promedio 120%.
La Condusef detalló que las casas de empeño cobran tasas sobre el préstamo otorgado y una por la custodia de la prenda sobre el valor del avalúo.
Cuando las personas no liquidan su crédito en la fecha estipulada, el objeto se pone a la venta tres meses después del periodo de vencimiento. Durante este tiempo, los pignorantes pueden recuperar su prenda, si ésta no se vendió.
En los últimos meses, creció el número de empresas que ofrecen préstamos a cambio de la factura del auto o las escrituras de un inmueble.
Por lo general, estos negocios no cuentan con registro ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ni tampoco operan bajo la figura de casas de empeño.
Marco Carrera, director de estudios de mercado de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios
Financieros (Condusef), afirmó que el nacimiento de estos establecimientos es "un foco amarillo", debido a que no cuentan con ninguna regulación.
Admitió que se observa un incremento en el número de empresas que ofrecen préstamos a cambio de bienes.
"Y muchas de éstas se aprovechan de la situación crítica de las personas que no tienen recursos para enfrentar sus deudas".
Incluso, hay quienes ante la insistencia de los despachos de cobranza de los bancos, optan por esta salida y piensan que hipotecar su casa puede ser una solución.
Roberto Bello, director general de estudios sobre consumo de la Profeco, sugirió efectuar cualquier operación de "empeño" con negocios que se ubiquen en el sector formal; ya que de no hacerlo, las personas podrían correr riesgos.
Es importante, dijo, que corroboren que el contrato de adhesión de estos negocios esté registrado ante la Profeco o la Condusef, en caso de ser una institución que integra el sistema financiero.
Exigen mayor regulación
Marco Carrera afirmó que es primordial promover una legislación que regule a este tipo de negocios.
En los últimos meses, este tipo de empresas se publicitan a través de medios de comunicación impresos.
Una de ellas, se denomina EC, que ofrece préstamos para autos o inmuebles con una tasa de 3% mensual y un Costo Anual Total (CAT) de 50%.
De acuerdo con información que se recabó en la misma compañía, para el empeño de un bien inmueble, se financia en promedio el 25% de su valor. El cliente debe pagar los gastos notariales por la hipoteca.
El crédito se puede autorizar el mismo día para el caso de autos y puede tardar hasta 20 para bienes inmuebles. La condición es que se ubiquen en el Distrito Federal y la zona metropolitana.
Al buscar a directivos de la empresa para abundar sobre los diversos planes de financiamiento, éstos se negaron a dar declaraciones.
En su página de internet, especifica que para préstamos por un bien inmueble, éste debe registrarse ante notario.
Los inmuebles susceptibles de garantía, deben ubicarse en el Distrito Federal, municipios conurbados del valle de México, valle de Toluca y valle de Chalco.
Marco Carrera, directivo de la Condusef, afirmó que estas nuevas empresas, por lo general, no son casas de empeño.
"Es factible que algunas de ellas sean Sofomes o Sofoles; sin embargo, hay negocios que, al no acreditarse con suficiente claridad, implican elevados riesgos", precisó.
Las casas de empeño
En México, existen más de 250 casas de empeño, según cálculos de la Profeco y de la Condusef.
Estos establecimientos representan la "más clara" operación del crédito prendario, ya que constituyen una fuente de crédito relativamente barato para los sectores más pobres.
Los prestamistas prendarios pueden considerarse como intermediarios financieros, ya que buscan utilidades con los intereses que cobran.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros detalló que cuando los objetos que se empeñan no se recuperan, los prestamistas no pueden cobrar intereses vencidos y pueden poner a la venta los objetos.
Por lo general, estas entidades aceptan: automóviles y bienes inmuebles, televisores mayores de 21 pulgadas, estéreos, mini componentes, herramientas, aparatos electrodomésticos, DVD.
En su lista se incluyen: reproductores de CD portátil, navajas de bolsillo, bolígrafos de firma, cámaras fotográficas compactas, lentes y encendedores.
En ningún caso aceptan animales vivos, material pornográfico, armas, ni ciertos modelos obsoletos de artículos electrónicos.
Lo que cobran
Roberto Bello, directivo de la Profeco, advirtió que hay una casa de empeño que llega a cobrar un CAT de hasta 1000% anual, debido a que la tasa de interés que aplica al mes llega a ser de 23%.
Sin embargo, el promedio del CAT que cobran las casas privadas es de 257%, mientras que las de asistencia alcanza en promedio 120%.
La Condusef detalló que las casas de empeño cobran tasas sobre el préstamo otorgado y una por la custodia de la prenda sobre el valor del avalúo.
Cuando las personas no liquidan su crédito en la fecha estipulada, el objeto se pone a la venta tres meses después del periodo de vencimiento. Durante este tiempo, los pignorantes pueden recuperar su prenda, si ésta no se vendió.
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